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—¿Entonces? —

—Entonces valemos mierda. —

Chenle arrugó la nariz, mientras caminaba al lado de su ahora ex-esposo en el hospital, la petición-extorsión de Mark era complicada de cumplir y no tenía mucho tiempo de pensar en un buen plan mientras tenían la boda de Yukhei y Chenle encima.

Así que sí, estaban jodidos porque ni Renjun, Donghyuck o Chenle eran lo suficientemente cercanos a John, el jefe de la Unidad de Fisioterapia del hospital con el que Mark quería una cita.

—¿Le explicaron a mamá por qué se casarían de nuevo? —preguntó Renjun, tratando de despejar su mente estresada.

—Sí, está emocionada... le dijimos que iba a ser una sorpresa. —Chenle asintió.— Que queríamos que ella viviera nuestra boda al no poder estar en la primera, estaba encantada.

—Mamá es muy sentimental aunque se haga la fuerte. —exclamó el mayor después de firmar unos papeles que le extendió un enfermero.— ¿Tu turno ya terminó? así te espero...

—Casi, solo tengo que dar la última ronda a mis niños y nos vamos. —Renjun sonrió de una manera tierna cuando el menor se alejó trotando hacia el área infantil del hospital y juró escuchar los grititos de emoción de los niños cuando llegó, él era el mejor enfermero con los niños, era su área, punto final.

Renjun decidió seguir su ejemplo y a pesar de que su turno ya había terminado fue a ver a sus pacientes de cirugía solo para confirmar que los dejaba bien para cuando Hyunjin tomara el turno.

Cuando recibió el mensaje de Lele llegó hasta la sala de descanso por sus cosas, mientras conversaban camino a recepción para firmar el fin de turno de ambos.

—Hey. —ambos pararon en secó al escuchar la voz de Donghyuck, recostado en el mostrador de recepción con una sonrisa.— ¿Qué tal el fin de turno? —preguntó y ambos siguieron en shock al ver quién estaba a su lado.— John también ya se va...

El nombrado asintió con una sonrisa nerviosa, mientras se le entregaban los papeles a firmar y colocaba las horas trabajadas, revisó una última vez su próximo turno y devolvió su folder tomando su maletín. Donghyuck hizo una mirada de pánico, movió su cabeza hacía su compañero de trabajo y Renjun balbuceo algo rápido.

—¿Qué tal tus pacientes? —preguntó y caso pudo escuchar la cachetada mental de parte de Donghyuck.— ¿Todo bien?

John tardó un momento en asimilar que la pregunta era hacia él y asintió lentamente antes de aclarar su garganta.— Sí, todos, mejorando... —exclamó con una sonrisa de orgullo.— La fisioterapia siempre es difícil pero están muy dispuestos, por cierto... Chenle, gracias por ayudarme con el pequeño Jeongin, se sintió mejor al tenerte cerca en sus sesiones.

—Siempre es un placer ayudar. —exclamó el menor, mordiendo su labio nervioso.— A él también le gustó que tu estuvieras con él, es un secreto, pero te ha estado haciendo una tarjetita.

—Eso es muy dulce, gracias. —John sonrió de nuevo, el ambiente si bien no incómodo era extraño para los cuatro.— Bien, umhm, nos vemos luego...

Chenle empujó el brazo de Renjun cuando John se giró a la salida, pero el mayor lo vio sin saber qué hacer así que hizo rodar sus ojos rápido antes de exclamar.

—¿V-vienes en auto? —preguntó Chenle y John giró con una sonrisa por segunda vez.— D-digo...

—No, no... —John negó, levantando su teléfono a la vista.— Está en el taller, iba a pedir un uber.

—¡Oh no! —Chenle exclamó, negando con todo su cuerpo.— ¿Cómo un uber? Nosotros estamos saliendo ahorita... p-podemos llevarte.

—No quisiera molestar, Chenle, un uber está bien. —

THREE? | NoRenMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora