El destino lo escribire yo. [Yakusoku no Neverland]

Zanahoria.

Había pasado ya dos semanas de lo sucedido, todo había pasado muy rápido. El albino como la pelinaranja notaban que su azabache no estaba en sus cabales, se veía distraído y un tanto preocupado.
Hace unos par de días el pelinegro había ido en busca de una de sus compañeras de su primer hogar el sólo había comentado de que estaba bien su amiga y que esperaba ir de visita cuando tuviera tiempo es lo único que le había dicho a sus dos amigos. Emma como Norman no estaban tan convencidos por lo que había dicho el azabache, pero por falta de pruebas no podían cuestionarlo.... el era su amigo así que ¿por que desconfiar de el?.

En las clases de Deporte a Emma y a Norman le tocaban juntos aunque cada uno tenía diferente ejercicio que hacer. Hacían un grupo de todas las mujeres y uno de todos lo hombres de la clase.
Emma era en lo que más destacaba, fue nombrada como la mas rápida de todos los de primero, al igual que era ágil y se podría decir que lo suficientemente fuerte para destacar entre las mujeres. Como siempre era en esa clase, empezaban los murmullos de los chicos sobre la ojijade.

-¡Wow si que es sorprendente!-

-¡Están increíble Emma!-

-¡Y no está para nada fea!.. ¡si que me gustaria..- fue interrumpido.

-Acaso creen que es hora de estar hablando!?- decía el chico albino aventando un balón de basquetbol hacia las manos de uno de los chicos. --concentrence  en el juego- decía que una voz totalmente sería a la situación.

-Uy! Norman relájate no es como si hablar un poco mientras el profesor no está, sea un pecado- decía con tono sarcástico un chico con cabello alborotado castaño.

-ahora que lo pienso.. ¿Tu siempre estás con ella o no Norman?- decía otro chico rubio , muy intrigado.

El anterior mencionado sólo rodó los ojos mostrando su molestia y asintió con la cabeza. Los dos chicos se acercaron un poco más al albino, el rubio acercó un poco su cara hacia la de Norman.

-Acaso... ¿Emma es tu novia?- pregunto con una cara pícara.

El albino al escuchar la pregunta de su compañero retrocedió 3 pasos su cara pronto tomo un color rojo muy intenso. - ¿Q-Que di-diablos dices!? No!... - aparto la mirada - ella sólo es una amiga..- lo último parecía casi un susurro, el albino estaba totalmente exaltado y nervioso.  Los dos chicos empezaron a reír al ver la expresión que tuvo el albino.

-Entonces Emma está disponible- decía el castaño poniendo su mano derecha en su barbilla, dando a entender una pose de "pensador" los dos chicos se miraron entre si.

-¡Tenemos oportunidad con ella!!- dijeron mutuamente los dos chicos alzando su puño con gran "determinación"

-¿Quien les dió autorización para estar vagando!?- Decía su profesor acercándose a los 3 jóvenes.

Los 3 jóvenes se asustaron al escuchar al profesor, pidieron  disculpas y se integraron a su clase.

Por parte las chicas estaban en un apartado de salto de longitud.
Cada una tomaba su turno de veía que tenían un buen ambiente entre ellas. Una de las estudiantes tomaba las medidas de los saltos que daba cada una. Algunos eran muy cortos otros con una longitud bastante buena, pero cada jovencita de ahí estaba intrigadas  de cómo saldría una peculiar pelinaranja. La anterior mencionada por era su turno de saltar ella tomó cierta distancia para su impulso, las chicas de su clase se veían demasiado emocionadas de cómo sería el resultado de su compañera ojijade. Fue cuando dieron la señal, Emma corrio y en el punto donde terminaba dió el saltó.

-1.88 Emma!- dijo la joven viendo la marca de la pisada de la pelinaranja había dejado al final.

Todas las chicas empezaron a gritar fascinadas y sorprendidas de que cada día más Emma rompía su propio record, a la pelinaranja le gustaba la atención que le daban, le daba más motivación para mejorar pero aún así la ponía nerviosa tener todas las miradas fijas en ella, lo bueno esque ella podía ocultar esos nervios.