The Lee Sisters ⌇ izone and itzy AU!

I don't want you here

Sakura's pov

Todo igual de frio que siempre, un invierno precioso igual a los otros, la estación del año mas acogedora, los hermosos copos de nieve caían como si de plumas se tratasen, tan delicados y preciosos que da miedo tocarlos porque es como si fueran a desaparecer, díganme, ¿es el amor tan delicado y precioso? Para mi no existe diferencia entre los copos de nieve y el amor, tan hermoso que lo necesitas tocar pero tan delicado que cuando lo tocas se derrite en tu mano, una verdadera desgracia, se siente bien ser amado, aunque no se siente nada bien cuando se derrite.

Suave, delicado y placentero, ¿por qué no? Ella era tan buena, su tacto quemaba en mi piel y se sentía bien, cálido y cariñoso, verdaderamente era un cálido abrazo, cada tarde después de mi trabajo me recibía en la puerta de mi departamento con los brazos abiertos, un tierno roce de labios y una linda sonrisa, hacia calentar mi corazón, pero no me gustaba que lo hiciera, se derretiría rápido, como la nieve cuando es primavera.

—ya déjate amar Sakura—

Siempre me decía, pero no quería, ella no, ella simplemente no podía derretirse en mi mano e irse tal y como hizo su hermana, su suave tacto tenia que durar un poco mas, solo un poco mas, si después decidía arruinarlo y entregarle mi corazón terminando de derretirla seria mejor. 

—algún día Chaer—

Esa siempre era mi respuesta, una dulce sonrisa y otro roce de labios era lo que le acompañaban por defecto, eso la derretía a un paso mucho mas lento que simplemente lanzarme a amarla.

Duro día de trabajo como siempre, estresantes, cada uno mas que el otro pero lo valía si al final del día llegaba a casa para encontrarme con Chaeryeong y sus sonrisas, sentía como el tiempo se acababa, cada beso, cada abrazo, cada sonrisa restaba un segundo de vida a este amor que teníamos, siempre le correspondía, cada beso, cada abrazo, cada sonrisa, eso restaba otros segundos pero no podría resistirme a sus encantos, ningún ser humano cuerdo lo haría. Nunca le había explicado el porque de mi terquedad con el amor, ella en su linda ignorancia no sabía que su hermana me había roto el corazón, y tampoco planeaba decírselo, según lo que ella me había contado era muy cercana a ella y no quería arruinar su relación, después de todo el amor de familia no debería ser un simple copo de nieve, si no que un glaciar entero, por su defecto tampoco mi percepción del amor, eso nunca se lo había contado a nadie, me tomarían por un bicho raro, mas de lo que ya me consideran.

Somos mujeres de hábitos, y como cada día de semana íbamos a un pequeño restaurante que quedaba en el centro de la ciudad, a Chaeryeong no le gustaba que me la pasara encerrada en mi departamento porque decía que era poco saludable, así que se hizo una rutina ir ahí simplemente para ordenar un café y hablar de tonterías. Me sorprendía que siendo mas joven que yo tenia una infinidad de historias que contar, sobre algún viaje con sus amigas o una loca travesura que había hecho en sus días de universidad, mientras que yo era simplemente yo, sin ninguna cosa realmente interesante que contar, ademas de mis desventuras con el amor, pero no le contaría eso a ella, simplemente eran interesantes para mi, no la aburriría con mis largas noches de corazones rotos o terminar asustandola con mis salvajes noches de fiesta, viejas noches de desvelo en las cuales mis problemas me llegaban mucho mas arriba de la coronilla y necesitaba un poco de distracción.

Mis conclusiones nunca son favorecedoras para mi, una de esas tantas conclusiones era que la suerte nunca estaba de mi lado (a excepción de unas cuantas veces claro esta) como por ejemplo ahora mismo, mi hermosa acompañante se levanto para ir al baño y quede yo en la mesa, realmente sola con mis pensamientos hasta que sentí como la silla de mi acompañante fue removida por alguien.

—miren a quién tenemos aquí—decía esa voz que me acompaño durante mucho tiempo en la secundaria—pero si es la pequeña Sakura—inmediatamente la sonrisa que Chaeryeong había puesto en mi cara se desvaneció.

—Eunbi... veo que volviste—una larga historia que no relatare hoy, les basta saber que ella se había ido a Seul.

—¡pues por su puesto que volví!—dijo en un tono alto y una sonrisa cínica—y te alegra saber que no soy la única—

—¿a que te refieres con que no eres la única?—

—tu amada Chaeyeon a vuelto a la ciudad, Sakura—su comentario helo mi sangre y detuvo mi corazón un segundo, eso traía muchos problemas, seguramente querrá ver a su familia y a Chaeryeong, y ella como siempre me arrastrara fuera de mi cómoda cama sin mas opciones que si o si—bueno, veo que tu "cita" ya esta volviendo, mi salida de escena es ahora, nos vemos pequeña Sakura—se paro rápidamente sin darme tiempo para reaccionar. 

—¿quién era kkura?—pregunto Chaeryeong confundida—¿alguna amiga?—

—p-pues era una ex-compañera de clase—exclame claramente nerviosa, ella no debía enterarse de eso, todavía.

—oh... esta bien—con una angelical sonrisa cayó en mi mentira, una de tantas que le he dicho.

Nunca seré merecedora de su amor, un amor que se derrite con al paso del tiempo, que yo lo derrito siendo una mentirosa, siendo poco honesta, tal vez nuestro romance no se derrita por el calor de mi mano tocando el copo de nieve que es su amor, tal vez se derrita por mi incapacidad de hacer las cosas bien, nunca seré merecedora de su amor porque soy una maldita incapaz de dejar a su corazón sentir. 

Mi corazón palpita por ella, pero esta mal, ¿en que momento decidí que enamorarme de la hermana pequeña de mi ex era una buena idea? Mi pequeña Chaer, un ángel caído que me entra la oscuridad que necesito, pero ¿por qué ella es mi oscuridad? Porqué ella me salvo de la luz, se ve confuso, lo sé, pero  es bastante fácil de explicar la verdad, Chaeyeon era mi luz, mi todo, ¿suena muy dependiente no? Eso también lo se, pero no le puedes pedir tanto a una persona que vivió carente de cariño la gran mayoría de su vida, después de todo, ella fue mi primer gran amor, ella alegro mis días y calentó mis tardes, pero cuando se fue la luz era demasiado brillante, me cegaba y me detenía de hacer las cosas que necesitaba. Por eso Chaeryeong es mi oscuridad, porque fue quien me salvo de la brillante luz que me dirigía al final del túnel.

—realmente lo siento Chaer, siento ser tan cobarde como para no decirte lo que me pasa, pero tengo miedo ¿si? —le dije una vez mirándola a la cara con lagrima en mis ojos, pero no respondió, tampoco es que fuera a hacerlo, dormía plácidamente a mi lado.

Miedos, una palabra conocida por mí, mi vida se basa en miedos, patético, ¿que es una vida si esta limitada por los miedos? Me criaron para ser así, desconfiada y temerosa del exterior, una fuerte armadura en el exterior que es lo que mantenía viva, solo una coraza vacía que no protege realmente mi interior. En mi familia nunca hemos hablado de nuestros problemas, miedos, preocupaciones o molestias, simplemente callamos hasta realmente dejen de serlo. Una crianza realmente rara ¿no?.

Vamos, yo puedo con todo, siempre lo he hecho ¿por qué no ahora? Lo haré por Chaer, lo haré por mí y por mis amigas, Chaeyeon no me detendrá, no otra vez.

Chaeryeong, te prometo que me mantendré fuerte por ti, seré tan fuerte como tu dulce amor.

Hoy día me dio la inspiración así que termine de escribir esta wea jsjs, ojalá les guste uwu.