Capítulo 1

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El inicio de la promesa

Todo dejo de moverse, el ruido de las personas desapareció, había silencio, una ligera sonrisa en su rostro.

—Así es Sakura—logró sacarla del trance—Ella es mi nueva prometida.

FLASHBACK

22 años antes

—¿Quién diablos está llorando?—cerró su libro de golpe y se levantó decidido a golpear a quien estuviese llorando.

Después de caminar por el jardín, se dio cuenta que era una niña debajo de un árbol.

—Oye tú—la niña volteó a verlo—¿Por qué estás llorando?

—Mamá y Papá estaban peleando y...—sollozó

—Supongo que no querías estar más tiempo ahí, ¿No es así?—se sentó a su lado.

—Perdón si te moleste con el ruido, suelo llorar mucho—abrazó sus piernas.

—Eres fastidiosa—volteo a verla—No dejas que lea en paz.

—¡Ya dije que lo siento!

—¿Eh? ¿¡Te enojas todavía que vine a consolarte!?

—¿Consolarme? ¿Llamándome fastidiosa? ¿Es enserio?—le dió un pequeño golpe en el brazo.

—Ya ya, lo siento... eh...

—Sakura...¿Y tú eres?

—Naruto.

Desde entonces, Sakura iba a la casa de Naruto después de la escuela, siempre estaban juntos aunque se notaba que a él luego le hartaba.
El cumpleaños #7 de Sakura estaba cerca, ella estuvo toda la noche haciendo una invitación para Naruto, solo que entregarla...sería imposible.

—Naruto—lo llamó con un tono triste—¿Por qué están esas personas aquí? ¿Por qué están esas cajas ahí?

—¿No es obvio? Me cambiaré de casa, por el trabajo de papá.

—¿Es enserio?—las lágrimas empezaron a caer de sus ojos.

—No tienes que llorar—hablo fastidiado.

—¡Ya sabes que lloro mucho! No quiero que te vayas Naruto ¿Quién va a estar conmigo?

Naruto sonrió ligeramente al verla, sentía lindo que alguien llorara por él. Se arrodilló tomando las manos de Sakura.

—Ya no llores Sakura—le sonrió—Cuando sea lo suficientemente grande regresaré por ti y nos casaremos ¿Está bien?

—¿Eh?—Inmediatamente sonrió—¡Si! Yo seré tu esposa.

12 años después

Estaba a nada de cumplir 19 años, sino mal recuerdo, Naruto ya debería tener casi 21. No puedo creer que desde niña no he dejado de pensar en eso.

"Cuando sea lo suficientemente grande regresaré por ti y nos casaremos"

Ahora me siento muy estúpida, seguir pensando en eso, a esta edad. Solo fue un pequeño juego de niños. Además supongo que en su nueva casa encontró a alguien más.

—Sakura, ¡Sakura! ¡Despierta!

—Ino, ¿Qué sucede?

—Has estado distraída todo el día, mira todos ya salieron—observé mi alrededor, no quedaba nadie en el salón más que el conserje.

—Lo siento—empecé a guardar mis cosas—Es que he estado pensando en muchas cosas.

—Deben ser cosas importantes, llevas así como una semana.

<<¿Una semana pensando en él?>>

—¿Importante dices?—suspiró—¡No es nada! Es solo una tontería—rió.

Llegando a casa

—Hola mamá—grité desde la entrada de la casa—¿Mamá?

Escuche ruidos que venían de la sala, al parecer había una visita.

—¡Sakura! Por fin llegaste, mira quién regresó.

Mi respiración se detuvo, sentía como lentamente mi cuerpo se paralizaba, mi corazón empezó a latir rápidamente. Sus ojos veían directamente a los míos, ese bello color azul seguía ahí.

—Sakura ¡Que sorpresa!—se levantó del sofá y se paró enfrente mío—¡Nos volvemos a ver!

—Naruto, enserio volviste—no le quitaba la mirada.

—¿Creíste que olvidaría nuestra promesa?

—¿No la olvidaste?—Él negó con la cabeza.

—¿Y bien? ¿Qué día nos casamos?























¿Por qué diablos no pude olvidar esa estúpida promesa?

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