Volver a Verte | NaruSaku

Capítulo 8

Un pasado que olvidar

FlashBack

Habían pasado unos años desde que Naruto se había mudado de ciudad. Acababa de graduarse de la preparatoria. Por muchos años estuvo pensando en que estudiar...algo que pudiera darle el dinero suficiente para que a su futura esposa no le hiciera falta nada.

—¿Sakura será de gustos caros?—pensaba en voz alta, hasta que su padre lo sacó de sus pensamientos.

—Naruto, qué bueno que ya estás despierto.

<<Aquí viene de nuevo>>

—¿Qué sucede papá?

—Venía a preguntarte sobre la carrera que vas a estudiar—se sentó frente a él. Naruto solo pudo suspirar ante la situación, no era la primera ni la última vez que le preguntaba sobre su futuro en la universidad.

—Ya te dije que aún no decido por cuál—dió la vuelta a su silla dándole la espalda.

—Bueno, pues quería darte una idea sobre la carrera que estudié para que en un futuro puedas...

Naruto en algún momento dejo de escuchar a su padre y se quedó viendo todos los cuadros que tenía en su cuarto ¿Será que ya sabe que estudiar? Podría ser ¿Sakura estará de acuerdo en ser esposa de un pintor?
Naruto estaba seguro de que Sakura no tendría problema con eso, que el dinero no lo sería todo.

—Papá...

—¿Qué pasó? Naruto, te estoy platicando sobre...

—Ya se que estudiar—volteo a verlo notando la sorpresa en el rostro de su padre—Seré pintor.

—¿Qué?—preguntó muy sorprendió—Hijo, pero tú...

—¿Qué no te das cuenta?—interrumpió—Amo pintar en el lienzo, amo dibujar cualquier estilo, tengo el talento, amo hacer eso ¿Por qué no serlo?

—Hijo...tú tienes que estudiarlo mismo que yo.

—¿A quién le importa tu carrera? Yo ya escogí, estudiaré artes—sus ojos mostraban un brillo único, pero ese brillo no duró mucho.

—¿Cómo es que puedes estudiar eso? Hijo, eso no te dejará dinero.
Minato estaba completamente decepcionado de Naruto, él sabía que esa carrera lo dejaría en la calle sin ninguna oportunidad en la vida.

—Tu mismo has dicho que si me hace feliz no hay porque preocuparse por el dinero.

—Lo sé hijo, pero tú eres el único que puede dirigir la compañía...

—Ya lo decidí papá—lo miraba a los ojos—Ni tú ni nadie me hará cambiar de opinión—salió de ahí.

Naruto se recargó en la pared apenas salió de su habitación, su corazón latía a mil por hora y su respiración era rápida. Él realmente estuvo nervioso de decir eso, lo que menos quiere es dirigir la empresa de su papá.

Días después

—Papá—bajaba las escaleras lo más rápido posible teniendo unos papeles en mano—Oye, necesito que revises estos papeles antes de que vayas al trabajo—se los entrego.