Marc: Tengo que contarte una cosa
Yo: Claro, dime. Me estás asustando- y solté una sonrisa nerviosa
Marc: Tengo miedo de una cosa
Yo: Explicate. Tengo tiempo
Marc: Todo esto ha ido muy rápido- oh no, ya sí que estaba asustada totalmente- pero eso no me importa. Al revés, me gusta. Pero ya eres parte de mi mundo, y mi mundo es el que ya has conocido. Agobio, prensa, cotilleos y chivatazos. No quiero perderte por culpa de todo eso. Quiero que sigas en mi vida, y tengo miedo de la presión que tú puedas llegar a tener. Eres tú mi forma de relajarme, de divertirme, de tranquilizarme; eres tú mi forma de ver la vida como algo más que las motos. Quería que supieras todo esto, porque no quiero que te alejes de mí. Aunque yo esté viajando constantemente quiero sentirte cerca, ¿Entiendes?
Yo: Espera, porque me has dejado sin palabras, en serio jaja
Marc: Es que todo ha sido de la noche a la mañana. Notar que te necesito tanto es increíble
Yo: Te lo dije aquel día en el taxi. La prensa y agobios y todo eso me da igual. Te quiero a ti, y ya está, eso supera todo lo demás. Entiendo que en un futuro pueda llegar a tener menos intimidad al salir, pero no me importa. Pasaría por lo que hiciese falta solo por estar contigo. Te quiero conmigo- dije cogiendole las manos
Marc: No creo que haya más chicas como tú
Yo: Mejor! Que si no te vas con las otras, jum
Marc: jaja mi tontita- dijo acercandose a mí para besarme. Sus labios tocaban los míos como no lo habían hecho anteriormente. Parecía haberse desahogado, y ahora expresaba todo besandome. Yo no iba a ser menos, y seguí el beso con la misma intensidad. Necesitabamos coger aire, pero no estuvimos ni dos segundos separados. Nos volvimos a unir en otro beso, y otro y otro. Él me tumbó en la cama y se puso encima de mí. Se quitó la camiseta y después me la quitó a mí.
Todo estaba subiendo de tono, pero conseguimos frenar, ya que no era el momento porque Álex nos estaba esperando para ir a dar una vuelta. Cuando íbamos a salir miré a Marc y no pude evitar reírme
Marc: ¿De qué te ries ahora?
Yo: Tú te has mirado?
Marc: No.Voy bien no?
Yo: Sí sí. Perfecto. Con la camiseta puesta al revés jaja
Marc: ¿En serio?! Joder no me había dado cuenta jaja
Yo: Jajaja anda que, qué iban a pensar los que te vieran? Creerían que ha pasado algo
Marc: Casi, te recuerdo- dijo guiñándome un ojo
Yo: Sí casi, pero conmigo te lo tendrás que currar- y reímos
Nos reunimos con Álex y allí estaba Ana también
Yo: Ana! ¿Cuándo has llegado?
Ana: Pues hace poco, ha venido Álex a recogerme
Estuvimos hablando mientras paseabamos por la ciudad. Muchas chicas los paraban, para hacerse fotos con ellos. Yo ya me estaba habituando, y mientras yo hablaba con Ana
Yo: ¿Te costó mucho adaptarte a estas situaciones?
Ana: Que va, las vives tantas veces en poco tiempo así que es fácil
Yo: Eso espero
Ana: Se te ve muy segura de Marc
Yo: Tengo confianza en él. Si no, no tendría nada con él. Tú no estás segura de Álex?
Ana: A veces no. Depende de las personas. Hay admiradoras que se quieren quedar en eso, una foto, una firma, dos besos, un abrazo, y esas cosas. Pero hay otras que no, y eso lo ves tú. Algunas le hacen ojitos, se acercan más de la cuenta, y eso a veces me hace enfadar. Hemos tenido alguna pelea por eso, pero todo se soluciona
Yo:Es muy buen chico. No haría nada malo, que te pudiera perjudicar a ti, estoy segura
Ana: Más le vale, dijo riendo
Marc: ¿De qué hablais?
Yo: De cosas de chicas, cotilla jaja
Marc: Ah que esas tenemos. Ya verás ya jaja- dijo cogiendome la mano
Era ya de noche, y paramos en un restaurante a cenar. No me apetecía nada, pero no tenía ganas de disgustar a Marc. Así que haría el esfuerzo. Llegó la camarera para preguntar la bebida y ví como miraba a Marc. Entonces Ana se acercó a mí y me dijo: Estas son las situaciones que te decía
Marc pidió todo y la camarera se mostró demasiado simpática con los dos, a pesar de las miradas de asesina que teníamos Ana y yo. Cuando se fue, nosotras nos relajamos un poco
Marc: Chicas, la ibais a matar con la mirada esa
Yo: Pues es que no veías como os miraba?
Ana: Y vosotros encantados, que es lo mejor
Álex: Encantados no, es que tenemos que ser simpáticos. No podemos ir de bordes por el mundo
Marc: Cielo- dijo cogiendo mi cara con una de sus manos- tranquila, ¿va?. Es una chica más. Puede mirar como quiera pero nada más
Yo: Sí, lo sé- respondí sonriendo. Y llegó la tía de nuevo
Álex: Señorita, cuando pueda nos apunta lo que queremos comer
X: Claro, pero nada de señorita. Me llamo Carla
Álex: Ah pues Carla jaja
Ana: Uy Carla. Mira como sabe la tía
Álex: Ya está Ana
Carla: Disculpadme, no quería molestar. Si he hecho algo, perdón
Marc: No, tranquila, no pasa nada
Yo ni hablaba. Es que pasaba de este asunto. No quería meterme en eso
Álex y Marc le dijeron lo que queríamos y ella se marchó de nuevo. El ambiente entre los cuatro era frío. Pero era por Ana. No pensaba que la situación fuera para montar lo que ella había montado. Y eso que estaba más o menos calladita. No quería ni imaginar la que podía liar otro día. Álex parecía molesto, y no sé muy bien si con la camarera o con su novia. Porque parecía molesto pero bien a la vez.
Marc: Bueno rompamos este silencio, no os parece?
Yo: Sí, por favor. Es muy incómodo
Álex: Vosotros diréis jaja
Estuvimos hablando un rato y trajeron la comida. Por suerte para Ana no era la misma camarera así que parecía más tranquila.
Cuando acabamos yo fui al baño y Ana vino conmigo. Estabamos las dos solas y noté que ella no se encontraba bien
Yo: Ana, ¿estás bien? Te noto rara
Ana: Estoy un poco cansada. No es nada- y entró en uno de los baños. Salió al rato con los ojos rojos, había llorado seguro
Yo: Ana, puedes contarme lo que sea, de verdad. Puedes confiar en mí
Ana: Es que verás...-no le salían las palabras
Yo: Tranquila
Ana: Tengo una falta
Yo: ¿Cómo que una falta?
Ana: Pues eso, que este mes no he teido la regla
Yo: Joder. Y por como estás, supongo que Álex no sabe nada, no?
Ana: No, y no se lo digas, por favor
Yo: Claro que no, es una cosa que se la tienes que decir tú. Él te apoyará, estoy segura- y la abracé
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Algo más que una fan
FanfictionMaría, una estudiante de 18 años, tiene la suerte de encontrarse con su ídolo, Marc Márquez. Todos pensarían que es una fan como las demás pero no. Es algo más que una fan. Y eso llevará a los dos a nuevas situaciones a las que tendrán que saber enf...