00 {Classmates}

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Estaba entusiasmado, por fin había llegado el sobre que su madre prometió enviarle. Al parecer esta estaba haciendo una limpieza intensa y, cuando llegó a las cajas donde descansaban viejos documentos, encontró viejas fotos de la familia las cuales creía perdidas, al contárselo a su hijo le hizo desear verlas de nuevo. Claro, nada malo podría salir de tener
muchas fotos de él pequeño cerca de los demás chicos.

— ¿Qué es eso? ¿Revistas para adultos? —preguntó burlón Namjoon viéndolo entrar a la sala y rió más al ver como sus orejas se ponían rojas negando rotundamente.

—Es un sobre que envió mi madre, son muchas fotos viejas. —Con esto se ganó la completa atención también de sus otros dos compañeros que soltaron los celulares con sonrisas maliciosas.

— ¡Chicos, vengan! —el grito de Seokjin se escuchó por todos lados, muy provechoso cuando se trataba de reunirlos a todos.

Él sabía que era una pésima idea pero estaba mentalizado desde el momento en que fue nombrado “maknae de BangTan”; sería molestado por sus mayores casi a diario. Tantos años ya era costumbre, es preferible verle el lado gracioso y reírse él también de sí mismo cuando era más joven.

Cuando los siete estuvieron alrededor de un círculo, inclusive Yoongi había dejado su estudio un rato, Hoseok, quien se había apoderado del sobre amarillo, desparramó las fotografías en un montón en el suelo. Fue regañado por ser tan desordenado, claro está.

—Oh por Dios, no has cambiado nada —se mofó Jimin riendo al ver una foto de Jungkook al parecer en un parque—. Tienes la misma nariz.

—Claro que la tengo, no me he hecho ninguna operación —aseguraba mientras observaba una foto de su familia al parecer antes de que él naciera pues sus padres se veían muy jóvenes.

En realidad era mejor de lo que se esperaba, no todas las fotos resultaron ser suyas, más que todo recuerdos familiares la mayoría de vacaciones. Aunque a veces encontraban una que otra joyita como una donde el chico, al parecer con cinco años, lloraba al ser fotografiado junto a un payaso.

Hasta que en un montón sujeto por una liga encontraron varias que hacían un progreso de su educación, algunas fotos en festivales y demás, hasta que una fotografía grupal llamó la atención de uno de los chicos.

—Esperen, creo que veo algo —dijo Taehyung observando con más detenimiento la foto, hasta entrecerraba los ojos para ver y luego se alejó extendiéndola al líder—. Hyung, mira a la chica en el medio y dime si se te hace conocida.

Ahora todos lo veían a él quien examinaba la fotografía de igual manera que el menor, algunas veces murmuraba que era imposible.

— ¿Estudiaste con Hana? —preguntó de repente al maknae quien bastante sorprendido solo se le quedó mirando. ¿Lo había hecho?

—Déjenme ver —sin esperar nada Suga se apropió de la foto para ponerse a leer la leyenda donde al parecer aparecían los nombre de los estudiantes en orden a cómo estaban parados—. Centro, fila de abajo, sí. Lee Sun Hi, ese es su nombre completo, ¿cierto?

La mayoría estaban asombrados, no por el hecho de que hayan estudiado juntos ya que no era muy raro, tenían la misma edad y ambos son de Busan, en realidad no podían creer que Jungkook nunca lo hubiera comentado. Es decir, algunos de sus compañeros o compañeras de alguna clase en algún momento resultaron ser idols, no era de extrañar que él no fuera la excepción.

Pero él igualmente lucía sorprendido cuando Yoongi le regresó la foto y decidió enfocar en la niña pequeña.

—Yo recuerdo a esta niña, de verdad —dijo de repente reprochándose a sí mismo no haberlo sabido—. Recuerdo que en los festivales de talentos ella hacía gimnasia, era muy buena, pero nunca recordé su nombre. Lee Sun Hi, sí, creo que era cómo eso.

—Eres un completo desastre, Kook —reclamó Jin negando con la cabeza frotándose la frente—. ¿Cómo pudiste olvidarla? ¿Qué tal si ella te recuerda y tú nunca comentaste nada?

Sin decir nada más se levantó para buscar su celular diciendo que iba a llamarla, al fin tenía una buena razón, o mejor dicho, una buena excusa para llamarla. ¿Y si ella había cambiado su número?

Quitando todas las inseguridades de su cabeza y realmente sin pensar mucho presionó el símbolo para llamarla. A él mismo le daba risa lo nervioso que estaba.

¡Pero si contestó!

— ¿Aló? —sintió un poco de pánico escuchar su voz proveniente del aparato pero sacudió la cabeza para responder.

—Hola, uhm, soy Jungkook —llevó su palma a su frente cuando la escuchó reír levemente.

—Sí, tengo identificador de llamadas —su broma lo tranquilizó un poco y tratando de iniciar conversación le preguntó lo que hacía, debía sonar casual—. Bueno, justo descansamos de un ensayo. Tendremos un concierto aquí en Japón, bueno, varios en realidad.

Y cómo si hablaran a diario comenzaron a conversar sobre esta serie de conciertos que Seventeen haría, algunas veces ella se detenía diciendo que la detuviera si hablaba mucho a lo que él con seguridad decía que le entretenía escucharla. ¿Por qué las chicas siempre piensan que hablan demasiado?

Sin darse cuenta se encontraba cómodamente tendido en su cama de lado para que el teléfono descansara en su oreja sin tener que sujetarlo, su brazo se cansaba un poco. A veces reía de sus bromas y anécdotas recientes sobre todo de los compañeros de ambos, cualquiera que lo viera en esa situación aseguraría que luce como un adolescente enamorado
hablando por celular, solo si no escuchabas lo que decía.

— ¿Sabes algo? Estaba revisando unas fotos que mi madre envió y descubrimos algo —contó cuando la conversación fue a parar en las escuelas, continuó cuando ella preguntó qué era—. Pues que no recordaba que la niña de mi clase que siempre hacía gimnasia y estaba con chicos más grandes que ella se llamaba Lee Sun Hi.

Asombrada Hana se quedó prácticamente muda, ¿era lo que creía? Con curiosidad le preguntó rápidamente el nombre de su escuela y, al escucharlo, soltó un pequeño chillido diciendo emocionada que sí que habían estudiado juntos.

—Y no digas eso de los chicos, se escucha muy mal —se quejó haciéndolo reír—. Tan solo estaba con mis hermanos y sus amigos.

» ¿Qué? Ah, con Jungkook. Solo me llamó para decirme algo, no tardaré mucho. Sí, cinco minutos.

Se sintió algo entrometido al escuchar esa conversación en la que no participaba en lo absoluto, ni siquiera sabía con quien hablaba pero se escuchaba algo más bajo como si hubiese estado cubriendo el celular.

—Lo siento, Coups acaba de pasar por aquí y me vio sentada en el suelo —explicó una vez que la otra voz no se escuchó más—. Dijo que debía volver a ensayar en un rato. Ahh, realmente ha estado raro estos días.

Lo pensó mucho antes de decirlo y finalmente le preguntó con discreción si quería hablar de eso, puede que su respuesta fuera negativa de inmediato pero nada perdía con intentarlo, tal vez pudiera ayudar en algo.

—Pues… Es una historia muy larga y debo irme, ¿es un problema si te llamó cuando esté en el hotel?

Ni lo dudó al decir que sí, incluso su entusiasmo al responder la hizo reír de nuevo.

Estaba muy feliz cuando la llamada finalizó con ella pidiendo mandar saludos a los demás y él igual, parecía poca cosa pero sentía que por fin estaba logrando entablar una verdadera amistad con ella, el simple hecho de poder hablar con ella por siquiera más de dos frases era un gran avance.

¡Ah, no podía esperar que llegara a su hotel!

Datos:

°Hana, al igual que el resto de los chicos, ha sido vista usando ropa con mensajes de apoyo a la comunidad LGBTQ, como una vez que usaba un vestido que decía “Blue is a feminine  color. Pink is a masculine color” o cuando en un concierto pidió un micrófono con la bandera de dicha comunidad.

[SE VIENE LO BUENO]

Por cierto, me encantaron sus comentarios y deducciones del capitulo anterior, y lo diré: alguien adivino la chica.

Y me encantaría saber lo que opinan de Kook y Hana, que creen que pasara entre ellos?

Going SeventeenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora