Going Seventeen

29 {Good bye, Chile}

Pánico y total pánico era lo que se notaba en los rostros de las estilistas pues, el día después del concierto teníamos prevista una fansign y justo antes de salir el bubble tea de Seungkwan acabó sobre mi camisa. Por supuesto que quedó una gran mancha causando un estrés colectivo en el grupo de mujeres.

De inmediato me llevaron de nuevo a la sala donde nos habíamos cambiado para buscar otra blusa.

—Si no encuentran una rosa, no hay problema en que use una azul —dijo nuestro mánager desde el otro lado de la puerta. Es probable que ya le hayan avisado que las demás camisas rosas que quedaban eran para los chicos.

Agradecí inmensamente que no entrara pues solo me encontraba usando un sujetador para hacer más rápido el trabajo de vestirme, claro, cuando encuentren con que vestirme. Sin importar que escuché como se iba miré por la habitación y me puse una chaqueta negra que estaba sobre la silla sin saber de quien era.

—Yo creo que en todo caso podría quedarle un de Woozi ssi —murmuró una de las mujeres y las demás estuvieron de acuerdo—. Están en la otra sala.

De inmediato una de las chicas más nuevas salió rápidamente de la sala pasando frente a mi con la cabeza agachada.

Eso de verdad es extraño y nunca lo entendería, es decir, puedo asegurar que soy menor que todas ellas e igualmente las jóvenes siguen tratándome como si yo fuera su superior o algo así. Es un poco incomodo aunque trato de ignorarlo.       

—Hana ssi —escuché como me llamaba en voz baja y al girar estaba la misma rubia que se había ido hace menos de unos minutos. Ella extendía una camiseta azul y tenía otras en el otro brazo.

Me quité de inmediato la chaqueta y me puse la primera prenda que me dio.

—Esa es de Woozi, también traje algunas de Dino y The8 por si esa no le queda —informó poniéndose junto al resto del grupo.

—Me queda perfecta, gracias, ¡adiós! —dije y grité todo muy rápido mientras salía corriendo por el corredor asta la sala del fansign.     

Sinceramente creo que era por aquí, no recordaba muy bien el camino hasta la sala pues de venida esta más preocupada por secar mi camisa llena de bubble tea. De igual forma corrí sin mirar a atrás.

—¡Seventeen! ¡Seventeen!

—Por aquí no es —hablé conmigo misma y me devolví para tomar el camino d la izquierda en vez de la derecha.

Cuando iba cruzando una de las esquinas choqué de repente con un gran muro llamado Na YoonNim, mejor conocido como el gigante amigable de Seventeen. Nuestro guarda espaldas principal y favorito.   

Me sujetó para que no cayera y me puso la mano en la espalda para dirigirme a la sala del evento mientras me daba su típico sermón de padre diciendo que no podía ir corriendo por todas partes.

—¿Donde se supone que estabas? —preguntó Jeonghan y me prepare mentalmente para ahora escuchar el sermón de mi segunda madre. 

—No hay tiempo, debemos salir —interrumpió Seungcheol dándome un beso en la frente—. Estás preciosa.    

En una ordenada fila y yo muy sonrojada, salimos por la puerta y los gritos de las carats se triplicaron. A pesar de solo ser 100 personas gritaban como nadie.

—Woah~ —exclamamos a la vez algunos al escuchar los gritos a pesar de no entender mucho lo que decían.

—¡Hola, carat!  —gritó Hoshi con su típico entusiasmo logrando que gritaran aún más como si eso fuera posible.

—Estamos muy felices de estar aquí y poder conocerlas a todas y todos —dije con una sonrisa con mi increíble español fluido gracias a las horas que pasé practicando anoche con el traductor google.  

Hicimos varias poses en grupo antes de empezar el evento para luego proceder a sentarnos cada uno en nuestro puesto. Como casi siempre yo estaba en medio entre Dino y Woozi. Detrás de nosotros habían guardias del lugar que se paseaban de un lado a otro al igual que nuestros mánagers.

Una a una las chicas empezaron a pasar para sentarse frente a nosotros. Yo reía mientras veía como los chicos solo asentían a las frases en español que les decían, solo Joshua y yo podíamos tener una conversación decente con las fans.

—Hana, ¿que significa ere muy lindo? —preguntó Vernon desde la otra parte de la mesa. De verdad los chicos no saben pronunciar las s en español.

—Eres muy lindo —dije sin dejar de firmar el álbum a "María" frente a mi.

—Oh, gracias, ya sabía que yo era hermoso.

El evento transcurría con naturalidad. Más o menos la mitad de las fans estaban llorando o muy nerviosas, por lo que cuando eso pasaba me dedicaba a escribir un mensaje lindo en su álbum o cualquier cosa que le fuera a firmar.

Pero algo que de verdad me molestó fue que, mientras hablaba con una chica sobre mis canciones favoritas y otros grupos, uno de los guardias la hizo moverse cuando apenas acababa de empezar. Lo dejé pasar pues tal vez nos estábamos quedando cortos de tiempo y querían que todos pasaran pero, cuando lo hizo unas cuatro veces más y vi que también lo decía con otro chicos simplemente no lo soporté.

—Este evento no es para conversar, siguiente.

—¿Podría dejar de hacer eso? Es molesto —dije con una pésima pronunciación debido a la ira.   

Al parecer uno de nuestros mánager escuchó como hablé con un tono enfadado (y era obvio que los chicos me habían escuchado, mi tono de voz molesto no es difícil de escuchar)

—¿Qué es lo que sucede, SunHi? —preguntó YoonNim parado junto al mánager.  

—¡Yah! Él sigue diciéndole a cada chica que se apresure, ni siquiera me deja hablar con ellas ni a los chicos —me quejé hablando en coreano a sabiendas que los guardias no conocían el idioma.  

[...]  

—Jagi, deja esa cara larga. No me gusta verte triste —murmuró Seungcheol mientras veíamos una película en el avión—. Vamos, solo una sonrisa.

Puso dos dedos uno a cada lado de mis labios alzando los costados de estos formando una sonrisa. ¿Como puedo seguir triste con un novio así?

—Estoy enojada, ¿bien? Me hierve la sangre recordar como trataron a las carats, duele y me da impotencia —empecé a desahogarme sabiendo que solo él me escucharía cada vez que lo necesitara—. Y no quiero olvidar este país, amé cuando fuimos a Viña y cuando paseamos por Santiago, pero no quisiera pensar que nuestra estadía aquí es algo que las fans recordaran como la vez que unos estúpidos guardias no las dejaron hablar con sus ídolos.

—Wow, noona se molestó —dijo Vernon desde el asiento de atrás logrando sacarme una sonrisa. 

—Tu novia tiene carácter, hyung —aseguró ahora DK.

Definitivamente yo nunca puedo estar molesta cerca de estos tontos.