La luz que entraba por la ventana hizo que mis ojos se abrieran lentamente, me moví en mi lugar trancado de cerrarlos nuevamente, pero mi mirada de poso en la puerta al ver a Marcus a punto de salir de la habitación, lo observé y el ya iba vestido con sus pantalones negros, zapatillas azules y una campera del mismo color de sus pantalones con diseños en blancos.
____: que guapo estás -refregue mis ojos mientras que llamaba su atención-
Marcus: muchas gracias, todas querrán ser mis novias luego de verme -hizo pose de diva y rei-
____: ya, tampoco te la creas tanto -me estire- y los demás? -mire a mi alrededor-
Marcus: ya están abajo, Emma se acaba de ir a la habitación de mi madre para cambiarse -me levante- así que prepárate que las esperamos abajo -me guiñó un ojo y salió de la habitacion-
Entre a la ducha sin dudarlo. Luego empecé a alistarme. Primero mi vestimenta, luego mi cabello y por último mi maquillaje. Me miré al espejo y la verdad que hacía mucho que no me veía tan bien. Me acorde de los pendientes que me regaló Anne, fui en busca de ellos y me los coloqué.
Antes de salir, me pare unos minutos más a verme y acomodar cada detalle con una sonrisa en mi rostro. La puerta de la habitación se abrió de golpe, no logró asustarme ni que volteara a ver quién era, se cerró lentamente y pude ver de quien se trataba cuando se colocó detrás mío y a través del espejo pude visualizarlo, le sonreí y él también lo hizo. Miro cada detalle, con una sonrisa en su rostro, me giré quedando frente a él y se acercó más a mí quedado a unos centímetros. Baje mi cabeza y coloque un mechón de mi cabello detrás de mi oreja demostrando mi nerviosismo.Martinus: te ves muy linda -levanto mi mentón y le sonreí- tengo algo para ti -
Saco de su bolsillo una pequeña bolsita, me la tendió y la abrí cuidadosamente, se notaba que su contenido era delicado. Saque la pequeña cajita Blanca, al abrirla se encontraba un collar de cadena fina junto a un corazón con pequeñas perlitas brillantes, era sencillo y muy delicado. Mire a Martinus confundida, no entendía porque me había dado tal regalo.
_____: esto es para mi? -asintio- y por qué? Falta bastante para mí cumpleaños -trate de ser graciosa-
Martinus: mientras que caminábamos al ensayo, nos topamos con una bridiera de una joyería, con Marcus vimos esta cadena y enseguida viniste a mi mente -me miró- fue inevitable no pensar en ti. Representa tu sencillez y brillo, es muy especial. Igual que tú. -sonrio- así que no dude en comprarla para ti -
_____: es muy lindo de tu parte -mire la cajita- pero yo no puedo aceptarla -le tendí la caja en sus manos y me giré nuevamente- no tienes porque gastar en mi. -me moví nerviosa aún dándole la espalda-
Martinus: tu significas mucho en mi vida -coloco la cadena alrededor de mi cuello sin permiso- y es para ti, no quiero regalarsela a nadie más -miro por encima de mi hombro- mereces esto y mucho más -Beso mi mejilla y se dirigió a la puerta-
_____: oye Martinus! -llame su atención- gracias! -el me sonrió y cerró la puerta y a los segundos la volvio a abrir- paso algo? -
Martinus: eh si, olvidaba decirte que te esperamos abajo, estamos por irnos? -puso cara de pensativo- bueno la verdad no se, solo apúrate y baja -rio y yo igual-
_____: esta bien, espera que tome mis cosas y bajo contigo -asintio-
Agarre mi pequeña cartera, coloque mi celular, un labial y dinero junto a mis documentos y tarjetas y salimos.
Mientras que caminábamos al ascensor pude ver desimuladamente, pero bien, a Martinus. Llevaba unos pantalones negros, con unas zapatillas de igual color, junto a una campera de color naranja con detalles en negro. Su pelo, nunca lo tuvo así, lo tenía para atrás y su perfil hacia que luciera muy bien, su piel estaba liza y Blanca como siempre. Pude notar que también había crecido, estaba más alto y con más cuerpo, no es lo mismo que en fotos.
Se veía tan bien. Y llevaba esa sonrisa en su rostro que hacía verlo único.
ESTÁS LEYENDO
"Un Año" Marcus and Martinus
De TodoQue pasará cuando se alejen? El Amor será más fuerte que la distancia?