Pequeño Intruso

Duelo

Jinyoung despertó luego de que pasaran violentamente por un bache. Fue cuando se dio cuenta que Jaebum iba a toda prisa.
Entró en pánico así que le preguntó a su novio a lo que solo respondió dándole su teléfono. En la pantalla había un corto mensaje por parte de Mark.

Mark
"Manager-hyung se llevó a Jinjae"

Solo esas palabras hicieron que el mundo de Jinyoung se viniera abajo.
Quería creer que eso solo era una broma pesada por parte de los chicos pero al ser Mark el que envió el mensaje lo único que podía hacer era preocuparse.

No cuestionó más la velocidad en la que iban, solo quería llegar rápido al dormitorio para comprobar que todo era una pesadilla de la que no podía despertar.

No pensaron que estaban tan lejos, por lo visto el mensaje de Mark fue enviado poco después de que se fueran, tal vez una hora y media, eso quiere decir que todo eso pasó hace casi cinco horas o más.

No podía creer que su hermoso día con Jaebum se cayera en mil pedazos.

Por cada segundo que pasaba, los dos, sentían una opresión en el pecho. Confiaban en que solo fuera una broma muy pesada. Cuando menos lo pensaron ya estaban en el estacionamiento subterráneo del edificio.
No saben como llegaron al ascensor pero, al igual que en el camino, sentían que cada segundo dentro de esa caja metálica era una pesadilla.

Llegaron a la puerta del dormitorio con el corazón en las manos. Al abrir la puerta vieron a todos los miembros sentados en el sofá con la mirada ida hacía un punto de la puerta principal.
El primero en reaccionar fue Mark quien, al instante de ver a los dos parados en la puerta, rompió en llanto seguido de los otros miembros.

- Mark, ¿Qué sucedió? - Jaebum quería obtener respuestas. Jinyoung también estaba ido en sus pensamientos. Le puso una mano alrededor de los hombros y lo guío dentro junto a los demás miembros. - No lo sé con exactitud. Jackson y yo regresamos al dormitorio y lo único que encontramos fue a dos hombres vestidos de blanco que salían del dormitorio con unas maletas. Y al entrar los chicos estaban histéricos, solo balbuceaban que Manager-hyung se había llevado al bebé.

Al oír la historia, Jinyoung salió corriendo a la habitación de su pequeña familia. Efectivamente, todos la ropa, frazadas y peluches que una vez estuvieron regados por toda la habitación ya no estaban. Caminó por la habitación, deambulando en busca de algo, junto a la cama que compartía con Jaebum, encontró el conejo favorito de Jinjae.
Lo tomó con sumo cuidado, primero lo vió y recordó las risitas de Jinjae, sus primeros pasos, todo lo que había pasado en esos dos meses que se habían sentido como mil años. Las lágrimas amenazaron con salir sin ser llamadas, no quería llorar, no frente al conejo porque creía que al hacerlo estaba llorando frente a su bebé. Pero, no puedo más, siguió recordando y cada recuerdo era más doloroso que el anterior. El llanto no tardó en llegar. Abrazando con delicadeza el conejo, lloró sin parar. A pesar de que Jinjae no era su hijo biológico, le dolía no tenerlo.

Jaebum había visto la escena desde la puerta, con lágrimas resbalando por sus mejillas. Le dolía esa situación, al igual que todos pero le dolía más ver a su querido novio llorar de esa forma. Entró despacio y se arrodilló junto a Jinyoung.

- Esto se resolverá Jinyoungie, recuperaremos a Jinjae. Por favor, ya no llores - Jaebum abrazó a su novio mientras que este rompía en llanto en sus brazos - Todo está bien, estoy aquí para ti. Voy a traerlo de vuelta cueste lo que cueste. Te lo prometo. - Se quedaron ahí, los dos en el suelo, llorando.

A la mañana siguiente Jaebum se levantó con dolor, pues habían dormido en el suelo. En realidad, de tanto llorar, los dos cayeron en dónde estaban. Vió a su novio, quien abrazaba el peluche con fuerza, se veía el rastro de sus lágrimas por sus mejillas, sus ojos estaban hinchados de tanto llorar, era una escena muy lamentable y dolorosa para Jaebum.

- No te preocupes, Jinyoungie. Lo traeré de regreso. Te lo prometo.

Le dio un tierno beso en la frente, se levantó del suelo. Se puso su chaqueta. Salió con el ceño fruncido.

- Lo traeré - dijo antes de cerrar la puerta principal tras de sí.

Holaaaaaaa~
No me maten, sé que es corto y pues...algo doloroso. Pero volveré en cuanto organice mis ideas.

Las amo, gracias por la paciencia y el amor a esta historia.

Nos vemos. ^-^