capítulo 2

1.8K 111 1
                                    

Mientras nos dirigíamos a la salida, pude notar que su postura al caminar era  demasiado recta eso solo me hacía suponer una cosa. Macarena también se dedicaba al modelaje eso explicaría también su figura bien torneada, ninguna de las dos había dicho nada aún pero ella pronto rompió el silencio.
—dime ¿estás nerviosa por iniciar las grabaciones? —sus lindos ojos azules destellaban curiosidad.
—Creo que un poco y ¿tú? — Le respondí sincera.
— yo también lo estoy, pero tengo el presentimiento que será increíble y ahora que te conocí, estoy segura.
No pude evitar sonrojarme ante su comentario, pronto sentí mis mejillas arder. Se notaba que Maca era una chica demasiado expontanea y tenía la corazonada de que trabajar a su lado sería una gran experiencia.
— Gracias, ojalá que nos valla muy bien, es una gran historia — Dije, tratando de desviar un poco el tema.
— Te puedo asegurar que está historia llegará al corazón de muchas personas.
Sin darnos cuenta ya habíamos llegado al estacionamiento y era hora de despedirme.
— Bien, Maca entonces nos estaremos viendo en pocos días para iniciar las grabaciones.
— Así es, estoy ansiosa porque llegue el día de iniciar —soltó alegremente.
—por cierto espero que tú inconveniente de la mañana ya esté resuelto.
Ella me miró confundida como si no entendiera a que me refería y cuando logró hacer memoria comenzó a reír.
— Debo confesarte que en realidad llegué tarde porque me quedé dormida. Ayer tuve una pequeña reunión en casa y terminó algo tarde, pero de verdad mis disculpas fueron sinceras.
No pude evitar reír, esa chica sí que se tomaba la vida de forma relaja, yo jamás hubiera pensado en hacer una fiesta una noche antes de tener una reunión de trabajo tan importante.
— Entiendo, y no te preocupes.
Nos despedimos con un beso en la mejilla y ambas caminamos hacia nuestros respectivos autos. Mi día no podía ir mejor  había confirmado que mi papá no había influido en la decisión de Bardasano para darme el protagónico,  Mi compañera de rodaje era sumamente linda y agradable. Estaba apunto de encerder el motor del Volvo, pero de pronto sentí ganas de llamar a Gonzalo, mi novio. quería contarle las cosas buenas que estaban sucediendo en mi vida, pero me detuve al recordar que habíamos discutido por la mañana. Nuestra relación estaba pasando por la peor crisis, así que dejé de lado mí impulso por llamarlo y guarde mi celular en la guantera del coche mientras me apresuraba a salir del estacionamiento para ir a mi departamento.
—Hola, buena tarde —saludé al guardia del edificio.
—buenas tardes, señorita —me respondió sin levantar la vista del periódico que sostenía en las manos.
Subí al ascensor y caminé hasta mi departamento, al abrir la puerta, pude notar la presencia de Gonzalo sentado en la sala. Su rostro era inexpresivo, su mirada estaba pérdida en un punto fijo y al percatarse de mi presencia se removió un poco en el sofá.
— No esperaba encontrarte aquí, después de la discusión que tuvimos por la mañana — Solté.
— Vine, porque  creo que necesitamos hablar.
— Te escucho —reaccioné un poco molesta, al recordar la actitud que había tomado los últimos días.
— Nena, quiero disculparme contigo, yo sé que no está bien presionarte con el asunto de la  boda — me dijo con voz de arrepentimiento.
— Yo también, no tuve la mejor actitud —reconocí .
— Sólo me gustaría que te dieras cuenta que lo que más deseo es estar contigo todo el tiempo.
—Yo quiero lo mismo que tú, sabés que estoy enamorada de ti desde el primer día que te miré, pero creo que no es el mejor momento para casarnos.
Su rostro se descompuso en un segundo y su mirada se llenó de furia.
— Sería mejor si me dijeras que no estás dispuesta de dejar tu vida aquí en México, para irte conmigo a España —su voz había subido de tono.
—Acabo de firmar el contrato para mí primer protagónico, tú sabes cuánto trabajé para conseguir una oportunidad así y me pides que lo abandone para casarme — Mi exasperación era evidente.
Nuestra conversación había pasado a ser una discusión y no había marcha atrás. Él se levantó del sofá, caminando de un lado a otro mientras se frotaba la barbilla con la mano izquierda.
— Lo dices como si fuera una tragedia.
— Me estás pidiendo que abandone mis sueños Gonz, ¿cómo quieres que reaccioné?— el tono de mi voz también se había elevado.
— Tienes razón, en vista de que tu carrera  y tus sueños son más importantes que yo, Lo mejor es que dejé de insistir y te de tiempo para pensar bien las cosas.
— ¿estás  seguro de lo que estás diciendo? —No podía entender su drástica reacción.
— No quiero estar con alguien que después de cuatro años de relación, duda de sus sentimientos.
Se puso de pie y comenzó a caminar con rumbo a mi habitación. Tomó una maleta del clóset y comenzó a guardar algunas pertenencias que tenía en el departamento. Yo me limité a observar mientras me recostaba en el marco de la puerta tratando de contener las lágrimas, cuando terminó de guardar todo. Tomó su maleta y pasó a mi lado sin volver la vista para mirarme, antes de salir colgó el juego de llaves que una vez le dí. En el fondo sabía que posiblemente el fin de nuestra relación había llegado. Así que cuando me quedé completamente sola dejé de contener el llanto permitiendo que se apoderará de mí.

Quédate a mi lado ~juliantina~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora