Capítulo 5

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Colegio Privado de señoritas.
Lunes.

Un día nuevo comenzaba, las clases tomarían su curso normal. Rin terminaba de alistarse cuando Kikyo llamó a la puerta.

—Voy —hablo con calma al dejar su cepillo en el tocador. 

Abrió la puerta y ambas se dirigieron al aula donde tomarían su primera clases, la cual era Matemáticas, aunque no sabían si tendrían esa clase, pues Kaede no les había avisado si ya tenían nuevo profesor. 

Todas las alumnas estaban sentadas en sus lugares hablando de lo que habían hecho el fin de semana. Rin y Kikyo estaban en silencio revisaban sus apuntes. De prontos todas guardaron silencio y se pusieron de pie para recibir a la directora Kaede.

—Buenos días —saludó la mayor y ellas solo hicieron una reverencia—. He venido a presentarles a su nuevo profesor de Matemáticas —miró hacia la puerta—. Puede pasar.

Naraku entro a paso tranquilo al aula, Kikyo y Rin cruzaron miradas, luego volvieron la vista al frente. Naraku por su parte miro rápidamente el lugar, durante la noche se hizo a la idea de que tal vez Hitomi solo estaba de visita en el colegio por ser amiga de Rin, pero al verla ahí, frunció el ceño. ¿Cual era su verdadero nombre? Fuese cual fuese lo descubriría pronto.

—Su nombre es Naraku Park —dijo Kaede—. Ya saben que deben de portarse bien y de manera educada con él —miró a Naraku—. Lo dejo con sus alumnas.

Él hizo una reverencia y espero a que ella se fuera para cerrar la puerta. Comenzó por presentarse nuevamente e inmediatamente se dispuso a pasar lista para así ir conociendo a sus alumnas y saber quien había faltado. Pidió que cuando las nombrara alzara la mano para así verla e identificarla.
Cuando tocó el turno de Kikyo, está apretó los labios y sin otra alternativa alzó la mano para que la viera. Naraku sonrió de manera algo siniestra, ella sintió un escalofrío recorrer su espalda. 

Las clases continuaron su curso normal, ese día no les tocaba música, sino hasta el día siguiente, aunque ya sabían que Sesshomaru sería su profesor. Tsubaki se los había comunicado.

Al término de las clases, Rin fue para la dirección ya que Kaede la había mandado llamar. Kikyo fue a la cafetería para comer algo. Para su mala suerte se encontró con Naraku sentado en la mesa frente a ella, estaba comiendo y ella no podía irse a otra porque a esa hora todas comían y el lugar estaba lleno.

Trato de mantenerse en calma, él no podía decirle nada al menos no frente a todos, aunque debía de pensar en alguna excusa para justificar el nombre y así evitar sospechas sobre Rin. Al estar comiendo podía sentir la mirada de Naraku sobre ella, trataba de no ponerse nerviosa y de no prestarle atención. 

—Hola Kikyo —se acerco alguien a saludarla.

—Hola Kagome —saludó Kikyo a su compañera de clase.

—¿Todo bien? —pregunto en voz baja.

—Sí, gracias.

—¿Y Rin?

—La directora la mano llamar. 

Continuaron conversando sobre las clases de ese día, cuando Kikyo miró hacia al frente Naraku ya se había ido.

~O~O~O~

En la oficina de Kaede, Rin estaba de pie frente al escritorio. La mayor hizo un ademán para que tomara asiento y así lo hizo.

—¿Quería verme?

—Sí, tu padre llamo... —suspiró—. Al parecer salió de viaje y no volverá hasta dentro de un mes.

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