Número 5

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Después de darse otro baño juntos (nuevamente), Seiya y su amiga Shoko se prepararon para ir a una especie de "festival tradicional", por lo que ambos se vistieron a la usanza japonesa, es decir, ambos traían puestos una yukata. Ambos fueron a un poblado rústico en las afueras de la ciudad, por lo que encontraron por fin un momento de descanso tras muchos días de arduo entrenamiento.

Shoko: Finalmente llegamos... Las Ruinas del Castillo Hachigata.

Seiya: He oído hablar de este lugar antes, el corazón del clan Hojo.

Shoko: Un momento Seiya, ¿Conoces de casualidad al clan Hojo?

Seiya: No exactamente, pero según lo que me han contado por ahí, su símbolo principal está conformado por tres triángulos.

Seiya: No exactamente, pero según lo que me han contado por ahí, su símbolo principal está conformado por tres triángulos

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Shoko: Efectivamente. Según la leyenda, los miembros del clan Hojo creían en la existencia de tres fuerzas de carácter sobrenatural: una representaba al valor; otra representaba la sabiduría; y la última representaba el poder. Sin embargo, las ideas del clan Hojo chocaban con las creencias religiosas que imperaban en aquellos entonces en Japón, por lo que el clan Minamoto impuso su hegemonía en todo Japón y gran parte de los miembros del clan Hojo se vieron obligados a abandonar el archipiélago. Nadie sabe acerca del paradero de los sobrevivientes del clan, pero por lo que he visto y deducido, puedo estar más que segura de que ellos se encuentran dispersos por todo el Mundo.

Seiya: Muy interesante, Shoko. ¿Alguna otra cosa qué agregar?

Shoko: Si (toma algo de agua) La leyenda también explica que el Castillo de Hachigata era tan resistente, que ningún clan enemigo podía derribarla; hasta que un sumo sacerdote del templo cercano profetizó que tarde o temprano el Castillo sería derribado, y que el clan que logre derribarlo recibirá una venganza, la cual tardará siglos en manifestarse. Lamentablemente, el día que más temió el sacerdote llegó, y el Castillo fue derribado.

Seiya: ¿Lo dices en serio? (se ríe a carcajadas) ¡Vaya forma de espantar a las personas con esos cuentos! ¡Las maldiciones no existen, y las venganzas no suceden nomás porque cierto loco dijo que pasaría! Sépase que he oído hablar de muchos que predijeron una cosa, y al pasar el tiempo no pasó nada de lo que dijeron... Bueno, creo que ya dije mucho por ahora. ¿Qué te parece si mejor vamos a ir por algo de comida?

Shoko: Tu idea es bastante buena, Seiya. ¡Trato hecho!

En estos momentos, Seiya y su amiga fueron a comprar algunos platillos de ramen y yakisoba, así como dulces típicos de la región; todo esto mientras comenzaron a disfrutar del espectáculo con fuegos artificiales, lo que representaba la señal de que el festival había llegado a su punto culminante.

En estos momentos, Seiya y su amiga fueron a comprar algunos platillos de ramen y yakisoba, así como dulces típicos de la región; todo esto mientras comenzaron a disfrutar del espectáculo con fuegos artificiales, lo que representaba la señal de qu...

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Shoko: ¿No te parece muy hermoso, Seiya? ¿Ver el cielo iluminándose de muchos colores, mientras estamos juntos?

Seiya: Si, todo esto es muy hermoso.

Los dos otrora santos comienzan a tomarse de las manos mientras siguen presenciando el momento posterior a la culminación del festival; hecho que Seiya y Shoko aprovecharon para poder sentarse en un comedor que estaba cerca, en el momento que ambos continuaron con la conversación.

Seiya: Sabes Shoko, quisiera decirte que fue muy bueno el tiempo que los dos estuvimos juntos; (comienza a sonrojarse) y quizás te molestará un poco cuando te diga lo siguiente: me gustas, Shoko. Me gustas mucho y cada día me gustas más.

Shoko: ¿Qué? (se sonroja también) Acabas de... decir... que...

Seiya: (sonríe) Tal y como lo dije, me gustas mucho.

Shoko: ¿Sabes, Seiya? Tu también... ¡TAMBIÉN ME GUSTAS!

Shoko sostiene sus dos manos en la cabeza de Seiya, y sin que éste dijera una sola palabra, recibió algo que nunca en su vida había esperado: un dulce y cálido beso. Seiya no sabía qué decir, pues estaba tan sonrojado y tan excitado que se había quedado sin palabras ante dicho acto de amor realizado por su amiga, por lo que se desmaya y cae dormido. 

En estos momentos, el viento comenzó a soplarse en el lugar, y de inmediato, un periódico llegó a tocar el rostro de Shoko quien, desprevenida, comenzó a tomar el periódico con sus manos, y de inmediato, comenzó a leer el encabezado:

Shoko: (leyendo en voz baja) ¡Tres sujetos con armaduras cometen asalto en Tokio! (exclamando a voz alta) ¡Oye, Seiya!

Seiya: (despertándose) ¿Qué ocurre? ¿Pasa algo malo?

Shoko: Seiya, no me lo vas a creer, pero creo que nos hemos distraído. Según este periódico, tres hombres vestidos con lujosas armaduras acaban de cometer un acto delictivo en Tokio.

Seiya: Eso significa que...

Shoko: Así es... ¡Es momento de volver a la acción!

Mi Mayor Inspiración (Seiya x Shoko)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora