DELICATAE (las chicas de Madame Juliette)(T3)

capítulo 21

Harry llegaba a Londres bufando al bajar del carruaje. El viaje había sido agotador. Sobretodo al tener que aguantar al Rey Jorge con sus tonterías. No tenía ganas de nada, solo de llegar a casa y ver a su Brigitte. Al entrar, el mayordomo quedó sorprendido

- hola Manfred - Harry dejaba una bolsa de ropa al suelo - es para lavar - lo vio a los ojos como los tenía agrandados - que te pasa?

El mayordomo reaccionó - que hace aquí?

Harry se sorprendió, sobretodo por como lo preguntaba - pues... Volver a mí casa? - contestaba con otra pregunta sin dejar de estar sorprendido

El hombre parpadeó un par de veces - no no, quiero decir... - tragó saliva - ha vuelto, y ha venido aquí. No va a ver ha Brigitte?

Harry ladeó la cabeza - ha eso también venía Manfred

- aquí?

- si, aquí, en casa... Manfred, no me digas que caíste en el mundo de las drogas. No me lo perdonaría

El hombre se percató de que la carta mandada por madame Juliette, nunca llegó a sus manos. Cogió aire - mi señor, será mejor que vaya al delicatae

Harry frunció el ceño - para que?

Momentos más tarde ...

Harry entraba a toda prisa al burdel apartando a Aymé pero sin dañarlo - dónde está?!

Las chicas al oír el grito, dieron un brinco y salían de sus habitaciones y del salón

• April - Harry?

• Harry - dónde está Brigitte?!

Lisa bajaba las escaleras - tranquilo Harry , ha despertado

Harry subía las escaleras a toda prisa. Tenía el corazón en la boca. Nunca había sentido tanto miedo en su vida. Lisa lo acompañó hasta el dormitorio. Abrió la puerta y entró él primero. Vio la escena. Brigitte estaba tumbada en la cama. Estaba pálida y apagada. Se acercó rápidamente mientras que Oana se apartaba para darle espacio

• Harry - mon amour - cogió su mano

Brigitte abrió los ojos - Harry?

Harry besó su frente - por dios qué susto - no dejaba de darle besos en la zona

• Juliette - tardaste en llegar - se cruzaba de brazos al umbral de la puerta

Harry elevó la vista - no lo he sabido hasta ahora - decía con rabia y enfado - la carta nunca llegó a mi Juliette

Tanto Juliette como Lisa y Oana quedaban en shock. Hasta ese punto de crueldad y maldad llegaban a tener la reina y Regina

• Juliette - han sido unos días de agonía muy grandes, por suerte, ya está bien

Brigitte sonrió levemente - lo siento querido, no tengo muchas ganas de cumplir mis deberes como puta ahora mismo - intentó bromear

Harry hizo mueca - tú no tienes deberes de nada Brigitte - una lágrima cayó por su mejilla consiguiendo que las chicas se sorprendieran - cuando Manfred me lo dijo, se me paró el corazón. No podría vivir sin ti - se derrumbó, dejó que su cuerpo se apoyara en la cama.

Brigitte al ver su estado, se intentó incorporar consiguiéndolo gracias a Oana. Acarició su corto pelo - Harry, estoy bien amour, tranquilo - le decía sin dejar de tocar el pelo de este intentando calmarlo

Juliette miró a Oana dándole a entender que era mejor dejarlos solos. La rumana entendió y se fue hacia la puerta. Brigitte miró a madame - si necesitas algo, toca la campanita - Brigitte asintió. Lisa cerró la puerta y las tres de quedaron en el pasillo algo más tranquilas