Nuestra Pequeña Mate (BORRADOR)

capitulo 8

Evelyn

A pasado una semana desde que estoy en esta casa o mansión, es muy grande y me e perdido muchas veces.

Los e conocido a los cuatro chicos que dicen ser mis almas gemelas, a sus padres, la señora Saray es muy buena conmigo, el señor John es un poco serio pero es bueno.

Por lo que e observado estoy en un bosque, creo que esto es un pueblo o algo así, ya que nunca lo e visitado o oír de el. En fin solo es bosque y no creo que sea peligroso,ya que algunas veces e escuchado un tren pasar, a penas se escucha pero lo logró escuchar.

-nena, vamos que ya está listo el almuerzo- dijo Eros, bueno el es lindo y sexy, ya entiendo porque todas las chicas de este pueblo lo miran tanto, claramente no me molesta, pero él piensa que estoy celosa y suele decir que es solo mío, y eso no me molesta para nada.

Me levanto y me dirijo a el comedor donde yo me siento entre Cody y Sebas. Para almorzar había lasaña, ensaladas de tomate y lechuga con otras cosas que son deliciosas.

Amaba la comida de este lugar se me hacía familiar pero no podía ser posible. La señora de mirada azulada me miraba fijamente,y eso me ponía nerviosa, no podía evitar mirar a los chicos sentados el lado y al frente mío. Esa señora que tenía y una personalidad delicada y suave,relajada y pasiva, me transmitía tranquilidad, su aura es fantástica, con aires de grandeza y relajación.

Luego de eso salí al bosque,amaba pasar tiempo en este lugar,es tranquilo y silencioso, me deja pensar y armar un plan para huir de aquí, quizás aunque deba quedarme necesito a Allison y mi amiga. No las veo hace tiempo y necesito hablar con alguien de confiar. Con un cuaderno de notas que saque de el despacho de los chicos, quería idear un plan, solo necesitaba una pluma. Cuando escucho unos gemidos dentro de él.

~Sebas~
Estaba en el despacho de lo más normal hasta que siento la presencia de Eve, me pude algo nervioso ya que me gusta mucho ella y no pode evitar sentarme bien. Estaba viendo la TV cuando apareció un anuncio de lo más pervertido del mundo. Mi lobo me dijo que  ella lo escucho. Mierda, mierda, mierda, mierda,mierda, MIERDA!. Esto no puede estar pasando, Carajo!, No quiero arruinarlo, ¿¡Porque mierda?! Esto no es culpa mía, pero no puedo evitar sentirme mal, puede pensar que alguno de los cuatro tuvo sexo en el despacho, aunque si ella fuera un licantropo, se daría cuenta porque al tener relaciones sexuales los lobos machos largan una esencia, dato curioso pero muy ciento.
Me levanté del sofá y corro hacia arriba siguiendo su delicioso aroma, es tan delicioso y ella tan perfecta, que de solo pensarlo, mi entrepierna se pone sencible, diablos, no quiero hacer nada aún que ella no quiera.
Toque la