*Dos meses después*
Narra ______:
Ya, las vacaciones terminaron, las clases comenzaban ese mismo día y junto con mis hermanos, fuimos directo al instituto.
Al llegar, nos separamos por los pasillos cada uno con sus amigos excepto yo. Ese día llevaba puesto un pantalón de Jean algo justo que nunca uso y una musculosa.
No me molesté en saludar a nadie ya que, nadie quería saludarme. Pues si, el maldito rumor de Niall llegó a todas esas personas, unos creían que fue verdad y otros creían que era todo pero ya no me importaba.
Iba escuchando música en mi auricular, últimamente, estaba volviéndome adicta a la música de Simple Plan por más vieja que sea su música, esa mañana iba escuchando Your love is a Lie mientras miraba a la gente.
Me daba gracia los que me miraban con repugnancia o directamente con envidia.
¿Por qué deberían envidiarme? Me pregunto a mí misma, es decir, todos salimos perdiendo.
-Hey- dijo una chica que me empujó contra un casillero y me quito un auricular- Estaremos en la misma clase- dijo mirándome intimidándome por completo- Eres una completa zorra, una mentirosa- dijo escupiendo las palabras.
-Lo siento- dije y golpeó mi abdomen.
-Eso te pasa por ser una zorra, delgadita y provocar a mis ídolos- dijo muy molesta ya que ella tenía un cuerpo robusto.
-Por favor- dije rodando mis ojos con sorna pero ella me golpeó contra el casillero fuertemente haciendo que me queje.
-Hey- apareció Trevor y la chica me soltó- Dejala en paz.
-¿Y tu que harás pedazo de gay?- le preguntó y Trevor se quedó callado.
-Escucha imbécil- dije molesta- Llegas a llamarlo así otra vez y te juro que te rompo la cara- amenacé y sonrió.
-Gay- le dijo a Trevor y muy molesta, salté contra ella, no lo soportaba más, necesitaba golpear a alguien. Todos en el pasillo miraban como nos golpeábamos o eso intentábamos ya que yo sinchaba su cabello hasta que un profesor me tomó de los hombros y me llevó directamente a la dirección.
Pasó media mañana mientras esperaba a que lleguen mis padres y cuando eso sucedió, yo tenía una bolsa de hielo en mi cabeza y ellos me miraron preocupados.
-¿Qué sucedió?- preguntó mamá sentándose frente a la directora.
-Disculpe la llamada inesperada pero necesito hablar con ustedes…- me miró la Sra.Directora- Esta mañana, ni empezaron las clases y _______ ya estaba a los golpes con una compañera- dijo y ambos me miraron.
-_________-regañó papá- Lo lamento, ella está pasando por un momento difícil de rebeldía y…
-¿Rebeldía?- pregunté y reí sarcásticamente- Siempre echándole la culpa a lo demás- dije molesta.
-Ya no sabemos qué hacer con ella, no va al Psicólogo, no es la misma de antes, se que ella trata de ser amable pero…- mamá me miró- Tienes que superarlo hija.
-¿Qué no lo entienden? Ustedes siempre le echan la culpa a mi obsesión, le echan la culpa a mis gustos, ahora le echan la culpa a Niall cuando no entienden que no es fácil…- dije intentando de no llorar- Todo el mundo me toma del pelo, me preguntan a cada rato, me tratan de zorra, en todos lados- dije forzando mi voz para no llorar- No fue ni medio año que pasé con él…- dije forzándome para no llorar- Todo el tiempo están molestándome- dije soltando una lágrima.
-Y es por culpa de ese chico- dijo mama y yo cerré mis ojos comenzando a llorar.
-Escuchen…- dijo a directora- Nunca antes se había planteado un problema así en este lugar así que tengo dos opciones- dijo mirando unos papeles- _________, tú tienes buenas notas- dijo- Podríamos hacer lo siguiente; transferirte a un internado de chicas y chicos para que te relaciones con otras personas o simplemente cambiarte de instituto aunque creo que esa no es la mejor opción.
-¿Internado?- preguntó papá- Eso implica tenerla lejos- dijo y yo miré al techo.
-Si- afirmó la directora- En este internado, es como un instituto cualquiera solo que duermen y viven allí- dijo- Nada del otro mundo…
-No quiero estar lejos de Trevor- dije rápidamente y papá miró a mama.
-Entonces… Lo pensaremos- dijo papá.
-¡Papá!- regañé molesta- ¿Qué país estamos hablando?- pregunté y ella miró los papeles.
-Hay tres internados de la misma consagración en tres países diferentes; Inglaterra, Alemania y Suecia- Cerré mis ojos ante el dolor de estar lejos de Trevor.
-Ese chico no es bueno para ti- dijo mamá.
-Si fuera por ustedes yo podría vivir encerrada en un manicomio- dije y me levanté- Hagan lo que quieran- dije caminando hacia afuera y los dejé allí adentro solos.
Definitivamente mi vida es una mierda.
Corrí al baño donde me encerré en la cabina y me senté en el suelo. Quería llorar y eso hice, las lágrimas salían de mis ojos cayendo por mis pómulos, odio llorar. Le mandé un mensaje a Trevor que estaba en clase diciendo todo lo que acababa de suceder y contestó un simple:
“No estarás sola linda J” y mi respuesta fue un:
“tengo miedo”
¿Por qué la gente me lastimaba? Simplemente soy una chica normal ¿Por qué me hacen estas cosas? ¿Por qué no me dejan en paz un minuto o siquiera me preguntan que quiero? ¿Nadie piensa en eso? ¿Nadie piensa que solo soy un humano?
Narra Niall:
Ese día estaba en el bus. No sabía a dónde iba o dónde estaba, simplemente estaba echado en un sillón y frente a mí, estaba Harry dormido, sentado en un asiento con mesa, estaba Zayn escuchando música, en otro estaba Liam mirando su teléfono y Louis no estaba allí. Definitivamente, no podía ni hablar con estos chicos, es decir, pasamos demasiado tiempo juntos como para estar todo ese tiempo entre bromas y chistes.
Mi teléfono estaba apagado ya que no soportaba más mensajes de otras personas, no soportaba invitaciones, no soportaba nada más.
Y si, como quise evitar, definitivamente _________ se hizo importante para mi, no me importa que hayan sido unos pocos días, fueron los mejores; ella me escuchaba, me hacía reír, me entretenía y no me dejaba solo.
Intenté superarla tomando, yendo a fiestas, besando a chicas y más que eso pero ella no se iba.
¿Por qué diablos soy tan malo para ella?
En eso, enciendo mi teléfono para ver si por alguna razón, ella escribió pero no, solamente tenía un mensaje de otro número nuevo que llamó mi atención.
“hola Niall, soy Trevor, no sé si me recuerdas; soy el gay insoportable amigo de _______ J, espero que leas esto. A _______ la trasladarán a un internado cerca de por ahí y yo no estaré con ella… Estará sola y está muy asustada, la gente la lastima y mucho…”
No sabía que contestar ante eso, así que simplemente mandé un:
-“Qué pretendes que yo haga?” y segundos después contestó.
-“cuidarla, haz algo por ti mismo, algo por lo que no te paguen, algo que te haga valer… Y sé que la quisiste, tal vez me equivoco, pero necesito que me contestes” lo dudé unos segundos.
-“cuenta conmigo”- contesté y dejé el teléfono bajo de mi, pensando en cómo diablos iba a cumplir cierta promesa cuando ni siquiera se en donde me levantaré mañana en la mañana.
Todo en mi era presión, el trabajar bien, el caerle bien a la gente, el llevarme bien con los chicos, el no meter la pata, el soportar los malditos rumores, el no saber en quién confiar, el no saber en dónde estoy o qué está pasando en mi familia… Todo es demasiada presión, crecer y no sentir el tiempo, no saber quién me quiere por quien soy o por lo que soy…
¿Qué no ven que solamente soy un humano?
