Capitulo 5. Caso 225.

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Max ha sido mi amigo desde hace casi un año, es el chico más noble y desinteresado que he conocido, también me ha ayudado en cada problema en el que me he metido. Por supuesto que a veces me sacaba de quicio porque solía tener ideas aburridas para pasar el rato, yo sólo quería que se divirtiera, que conociera chicas, que se tomara la vida de forma más relajada. Claro que con un padre como el que tiene era más que obvio que Max tuviera una personalidad tan reprimida. Ahora él estaba metido en un problema y todo había sido por mi culpa. 

***

Estaba en clases, ansioso por todo lo que acababa de ocurrir, Bridgette se sienta justo adelante y ya no cruza siquiera una mirada conmigo, ningún gesto, ninguna sonrisa y estoy algo impaciente por todo lo que estaba ocurriendo que comienzo a tocar la mesa con mis dedos en modo de ansiedad.

-Joven Couffaine.- escucho la horrible y sonora voz de la srta Mendeleiev y  pongo atención.- podría dejar de hacer ruido y escuchar lo que tiene que decir el oficial Raincomprix.

-Si disculpe srta.- respondo algo distraído.

- Bien muchachos, como saben París está siendo azotada por una gran ola de crímenes, donde las principales víctimas son jóvenes de entre 15 y 18 años. Espero que todos ustedes estén haciendo caso a las recomendaciones que ven en televisión y si no están enterados no está por demás repetirlo. Así que no deben de salir a altas horas de la noche y durante las tardes es preferible que estén acompañados, no vayan a lugares solitarios, sean conscientes de lo que hacen en la calle. Usualmente esos sujetos utilizan varios químicos para adormecerlos y llevárselos en autos negros, según lo que dicen varios testigos.

André y yo sólo compartimos miradas, esperando a que no hablara de Max. Mis nervios estaban matándome y comencé a raspar la mesa con mis uñas, de forma cautelosa para que no tuviera otra llamada de atención de la bruja. Hace mucho que no lo hacía esa vieja maña y mientras tanto observaba de nuevo a esa chica, sólo por momentos, no quería parecer un desquiciado loco o que pensara eso de mí, así nunca conseguiría que hablara conmigo.

-Se preguntarán porque digo todo esto. Ayer uno de sus compañeros...- pausó un momento, porque no recordaba el nombre y André y yo ya sabíamos la respuesta, pero muy por dentro esperábamos que no dijera ese nombre.- Max...

¡Joder, lo hizo!

-desapareció sin dejar rastro. Si alguien puede decirnos donde lo vieron por última vez, sería de gran ayuda.- Usualmente un policía (y menos el jefe en persona) no buscaría a un joven que está desaparecido en menos de 24 hrs, si fuera yo, supongo que nadie se preocuparía por mí además de mi madre, pero el chico es una eminencia de la computación (algo así como un dios) e hijo de una de las personas más influyentes de la ciudad, el señor Kant, jefe de la corporación Kant (dedicado por supuesto a la tecnología) y un hombre que me odia por ser amigo de su hijo y se encarga de humillarme cada vez que voy a visitarlo a la mansión. Si recordara todas las veces que he entablado conversación con él, sería como:

-hola señor Kant, ¿cómo va todo?

-¿Max, porque te juntas con jóvenes inferiores de intelecto?

......

-Hola señor Kant, debo decir que es para mí un honor que me haya invitado a su fiesta de benef...

-Max, ¿escuchaste algo?, ¿dejaste entrar al perro a la mansión?

......

Y eso es en resumen las únicas conversaciones que hemos tenido...

-Bueno entonces recuerden chicos, pueden ir a la estación si saben algo. Es lamentable que le pase esto a jóvenes y más a estudiantes como Max. Bueno, entonces ¿nadie sabe lo que pasó con Max el día de ayer por la tarde y noche?- de nuevo un silencio y yo ya no podía con lo que pasaba, sin embargo no iba a hablar. 

CarmesíWhere stories live. Discover now