Good Luck, Liar {PJY}

DIECINUEVE

Jackson se encontraba boquiabierto tras todo lo que Jane acababa de contarle.

Se había convertido a lo más cercano a un amigo, y uno realmente bueno. Después de contarle a Mark lo que nunca había dicho, se decidió por contárselo a Jackson, no para darle pena, sino para que supiera con quién se estaba relacionando y así, conocerse mejor. Le estaba cogiendo especial cariño a aquel rubio y de verdad quería crear una buena amistad entre ellos. 

-No... No sé ni qué decir, Jane.

-No digas nada entonces, ¿vemos una película? Tengo helado. 

-¿Qué ha sido del guaperas?

-Está conociendo a alguien. Cuando le conté mi situación con Jinyoung, ambos decidimos parar lo que fuera que teníamos.

-Una verdadera pena, de verdad quería el trío.

-¿Y Youngjae?

-En el trío. Ya te dije que tú estabas fuera.

Jane le tiró un cojín a la cara y ambos se rieron por ello.

-Ya no te doy helado. Ni siquiera te dejo que te sientes en mi sofá, fuera, bicho.

-Pero tengo una de tus películas favoritas- chantajeó Jackson con cara pilla.

Jane abrió sus ojos. 

-¿Deadpool?- chilló sin ocultar su emoción.

Reconocía que no era de las mejores películas que había visto, pero sí de las que más le enganchaban y con la que mejor se lo pasaba. Además llevaba ya tiempo sin verla. 

-Si me perdonas voy a por ella, la tengo en el portátil.

-¡Ve! ¡Corre! Voy a por helado- Jane saltó emocionada por encima del sofá para dirigirse a la cocina a por aquel helado para volver corriendo al salón y esperar a Jackson. 

Pero cuando llegó no se encontró con un rubio, sino con un moreno que la miraba con pena. 

-¿Que diablos...? ¿Qué haces aquí, Park?

-Pedirte disculpas.

-Oh, ¿por qué?- sabía que estaba jugando con él.

-Sé que me has visto. 

-¿Cuándo? No has aparecido por el examen, ¿estabas ocupado?- preguntó con una sarcástica sonrisa por su rostro- ¿Dónde está Jackson? Íbamos a ver una película, ¿te apuntas?

-¿Qué? ¿Quieres que me quede?

-¿Tienes algún plan mejor? Oh, claro, espera. Seguro que tienes a aquella mujer con aspecto de modelo en tu cama esperándote. Tranquilo, ve con ella. Ya te cuento qué tal la peli. 

-Janeth, por favor. 

-¿Si?- preguntó inocente mientras abría la tarrina del helado. 

-Dios, odio esta actitud, Janeth.

-¿Qué actitud?

-Esta. Tú, así, haciendo como si nada hubiera pasado. J, sé que me has matado en tu mente unas cinco veces ya.

-¿Yo? Qué va. A la séptima ya me cansé.

-Háblame entonces. Dime de todo. Cualquier cosa, pero no hagas como si nada. 

-Está bien- él ya se preparaba para lo peor- Es tu vida, nunca fui nada en ella ni lo soy ahora. Estás en todo tu derecho de acostarte con quien te plazca. No hay más. 

-Siempre me acostaba con otras para olvidar tu cuerpo. 

Y de la garganta de Jane se dejó escuchar una enorme carcajada.