Umbrella Academy: todo para un fan.

♥️Os: Klaus y Cinco.♥️

—Cinco volvió.

Me observo en el espejo. Habían pasado demasiadas cosas en un día; "mi padre" había muerto, volví a ver a todos mis hermanos y el tipo que jodió mi cabeza mucho tiempo acaba de regresar.

Recordé lo sucedido: un ruido llamó nuestra atención por lo que decidimos salir. Era un hoyo relativamente grande, azul y muy muy extraño. Klaus le lanzó un extintor y esa cosa literalmente se lo tragó y comenzó a moverse fuertemente. Luther y Diego quisieron protegernos. De repente el vórtice comenzó a moverse y hacer ruidos más fuerte, pude distinguir la cara de un hombre adulto, de unos 50 años, luego se contraía y se mezclaba con el rostro de un chico, después de un rato el hoyo gigante lanzó al señor/niño al suelo y desapareció. Todos nos acercamos a ver, sorprendidos, nos dimos cuenta de quien se trataba.

—¿Soy yo o alguien más ve al pequeño Cinco?—dijo Klaus para romper el silencio. Todos asintieron con sorpresa.

Ahora, todos están en la cocina probablemente escuchando alguna clase de discurso de parte de Cinco, yo, por otro lado, intento calmar mis nervios en mi antigua habitación.

—No has cambiado nada.

Lo veo a través del espejo. Han pasado más de 15 años y el se sigue viendo de 13, el tiempo no avanzó en el por alguna extraña razón.

—¿Y acaso no te has visto?—digo con desdén. El hace una sonrisa burlona, esa sonrisa que de niña me volvía loca.

—Cierto, muy cierto. Se nota que has crecido, es obvio, pero tus cambios son mínimos, tu piel sigue viéndose tan suave, tus ojos siguen tan llenos de vida como la última vez que te vi, incluso se ven así aunque me veas con odio.—da un salto en el espacio y aparece justo frente a mi. Me tenso.—Tú cabello brilla, casi tanto como tú, ni si quiera creciste mucho. —tiene razón, incluso en el cuerpo de un niño es mas alto que yo.—Y aún tienes ese peculiar y maravilloso aroma a lavanda qué tan loco me volvía... vuelve.—escucho que susurra la última palabra, sin embargo finjo no hacerlo.

—Hey, linda, tome tu... ¿interrumpo algo?

Rápidamente notó el cambio en la voz de Klaus, no lo juzgo, yo también me sentiría extraña si veo a mi "novia" muy cerca del chico que solía gustarle. Cinco niega tranquilo y desaparece de la habitación.

—Tomaste mi falda, se te ve mejor que a mi.—no es como que quisiera cambiar de tema, pero era la razón por la que venia, supongo.

—¿Que hacia el aquí, pasa algo?—me ve muy seriamente.

Me acerco a Klaus tranquilamente, lo abrazo por la cintura y le planto un beso en el cuello. Me invadía la ternura, jamás lo había visto celoso, ni siquiera creía eso posible.

—No pasa nada, cariño, solo vino a... no sé a qué vino, tranquilo, no tienes porque estar celoso.—me abraza.

Durante toda la tarde estuvimos recostados en mi cama esperando la hora para hacer el funeral, a ratos Klaus parecía perderse de la realidad por hablar con Ben, pero no me molestaba en lo más mínimo, estaba acostumbrada, incluso tenía su lado positivo, Ben lograba que Klaus fuera mejor persona, era como su Pepe Grillo o algo así.

Vamos por las sombrillas al armario pues ha comenzado a llover, Klaus escoge una transparente de bordes rosas, es linda. Yo, por otro lado agarro una negra sin diseño. Ambos salimos al patio tomados de la mano donde el resto de la familia nos espera.

Antes de que Luther tire las cenizas de papá, Klaus prende un cigarrillo casero. Todos nos observan cuando suelto su mano y me aparto, en especial Cinco, quien parece que está armando un rompecabezas en su mente.