"Cuando somos niños pensamos que no tendremos ningún problema y que siempre viviremos así, pero nos equivocamos, los niños también tienen problemas, los niños también tienen que afrontarlos, y por desgracia yo soy una de esos niños. Tuve que afrontar los problemas sola y aunque mi tía estuviera conmigo, tuve que consolarme y afrontarlos sola. Ahora que soy mayor tengo el doble de problemas, por ejemplo el otro día el estúpido de Bryan me tocó el culo delante de toda la clase y luego hizo como si la mano se le cayese; se que es una tontería, pero me molestó mucho y me sentí humillada. Pero ningún problema de los que me han sucedido se comparan al incidente que tuve con tan solo 5 años de edad. Me separaron de mis padres y luego me dijeron que ellos habían muerto en un incendio, pero nunca creí en esa historia. Hoy en día convivo con mi tía, la que me ha cuidado desde que me separaron de mis padres y la que esconde un gran secreto"
- Laya quiero que bajes ahora mismo -había estado oyendo a mi tía llamarme y gritarme desde hace tiempo, pero hacía como que no la escuchaba y me ponía música con los auriculares.
- Señorita Laya, sé que me está escuchando. Ya no funciona eso de conectarte los auriculares y hacer que no me escuchas -noté como mi tía arrancaba los auriculares de mis orejas.
- Me los podrías haber roto -me quejé.
-Pero no lo hice -como siempre, se puso a mirar el cuarto, el cual estaba desordenado, y a mirarme con cara de desagrado -no te dije que antes de que fueras al Instituto recogieras el cuarto. Parece que lo que te digo te entra por un oído y te sale por el otro.
- Ya voy tía. Solo estaba... -fui interrumpida por una camiseta que había quedado estampada en mi cara ya que mi tía me la había tirado -¿Por qué has hecho eso?
- Como este cuarto no este recogido antes de la cena, te castigaré tu ordenador.
- No puedes hacer eso. ¿Cómo haría los trabajos o mis diseños?
- Claro que puedo hacerlo, y como en menos de treinta y cinco minutos no esté recogido, ya sabes las consecuencias.
- ¡Dios! Ya voy -de verdad que mi tía no entiende el "ya voy".
- Siempre dices ya voy y nunca vas.
- Mira -me levanté de la cama -ya voy a recoger el cuarto, ¿contenta?
- Contentisima -estuvo a punto de salir por la puerta cuando vuelve a girarse para dirigirse a mi - Por cierto, falta una semana para tu cumple, ¿que harás?
- Puede que vaya a dar un paseo con mis amigos.
- ¿Ya está? ¿No lo celebrarás? -me preguntó con confusión y un tanto de ¿tristeza? Bah, mi tía nunca está triste, más bien está amargada.
- ¿Qué más quieres?
- Celebrarlo juntas... - me miró con el ceño fruncido -tú y yo.
- Como quieras, total me da igual mi cumple, así que no te creas que me hace mucha ilusión...-la cara de mi tía era un poema, pero había algo en ella distinto, sus expresiones eran distintas, se podía notar una felicidad inquietante en ella.
- Bueno, recoge el cuarto iré a la cocina, cuando vuelva...
- "lo quiero todo recogido o si no estás castigada " -imité la voz de mi tía.
-------------Tan sólo un día para mi cumple. No me puedo creer que una semana haya pasado tan rápido.
Siendo sincera, mi cumpleaños no me hace ilusión, nunca me lo ha hecho. De pequeña soñaba con un cumpleaños perfecto, en el que llevar un vestido con el que parezca una princesa y tener una tarta más grande que yo. Pero por desgracia eso nunca me sucedió, solo fue un sueño.
ESTÁS LEYENDO
ᎠᎡᎬᎷϴΝS ; jjk
Science-Fiction"La única forma de librarse de la tentación es caer en ella" - Promete que lo harás -habló él mirándola directamente a los ojos -promete que si ellos me llevan, tú correrás y te irás lejos. - No puedo prometerte eso -ella sollozaba -estaré contigo h...