Defiéndete de una maldita vez [Jungkook] [Completa]

4

Bien, las cosas no salieron como quise, lo acepto. Pero tendré más oportunidades. Luego de lo que sucedió ayer me resfrié, al menos espero que ella también.
Caminaba por los pasillos del instituto, simplemente me entretenía ver este lugar tan marchito, todos los alumnos preocupados y con miedo mientras a mí me daba igual.
No falta mucho para mí cumpleaños, no es que me importara pero espero que a mamá y papá no se les olvide como el año pasado...lo sé, pero si son buenos padres solo que trabajan muy duro, por algo tenemos tanto dinero.

- Jeon! - Taehyung llegó corriendo. - Se están propasando demasiado - apuntó hacia el patio trasero.

- Que?- levanté una ceja confundido.

- La niña, la están maltratando demasiado - estaba un poco nervioso y alterado.

- Maldición.... - caminé hacia el patio trasero algo enfadado, no sé exactamente por que me molestaba, tal vez me sentía culpable por lo de ayer, pero yo, Jeon Jungkook preocupado?.

Y sí, esta vez eran cuatro chicas y un chico de tercer o cuarto año, le jalaban el cabello y la golpeaban.
*Maldición! ¿Por que no te defiendes?.* Me acerqué hasta ellos y ví que estaba llorando de nuevo.

- Quitence - empujé a una sin expresión alguna.

- Jeon?... que haces?- preguntó nerviosa. Obviamente no era normal de mí interrumpir algo así, en éste momento estaría riéndome, pero yo la fiche como mí blanco de maltratos.

- Desde hoy a ella no la tocan, ok? - las miré con desprecio.

- Es tu novia Jungkook?...Te estás volviendo débil - el idiota de Han se rió burlonamente. Le dí un fuerte puñetazo en el rostro así que cayó al suelo.

- Ni si me vuelvo débil serías más fuerte que yo, idiota- Han escupió un poco de sangre y se marchó sin antes mirarme con desprecio.
Cómo nadie se iba a mover tomé a la estúpida niña de su cabello rosa y la arrastré con migo. La llevé hasta que estuviéramos lejos de todo y la solté.

- Eres una inútil, das lástima - ella secaba sus lágrimas mientras sollozaba. Agarró su pequeña libreta y escribió nuevamente.

" Me golpearon " realmente era tonta, simplemente la miré.

" Me defendiste " leí eso y tuve de nuevo esa rara y maldita sensación

- Te saqué a rastras de ahí, eso no es defender - jamás la defendería.

" No puedo escucharte hablar, escribe para mí " claro que no. La miré disgustado.

" Cuál es tu nombre?" Sonrió ampliamente.
Me estaba tomando a la ligera, yo no tenía ninguna intención de ser su amigo. Enojado, tiré su libreta al suelo y la pisé.

- No me interesa que sepas mí maldito nombre, tampoco ser tu amigo, ni defenderte. - dije eso mirándola fijamente, ella se sorprendió y escribió en su mano.

" Quieres ser mí amigo? " Ahg!, me queje en voz alta. Ella no me entendía.

- Eres una idiota! - la empujé y me marché

Ella era incapaz de entenderme, y yo no quería escribir para ella. No podía intimidarla, y tampoco podía golpearla...no por que fuera una chica, simplemente no podía hacerlo si me sonreía como una idiota. Siempre es más fácil cuando tienen miedo o son débiles. Pero esta vez no era fácil, y a la vez sí, y no sé exactamente por qué.