Nuestro querido SpringTrap ha estado recibiendo cartas anónimas, y con pequeñas pistas, tendrá que adivinar: ¿Quién es su autor?
|SpringTrap x ¿? |
Personajes: Edd00chan, FHS. /Scott Cawthon, FNAF./
Espero que les guste, o les pego.
[TERMINADA]
Abri...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿Por qué? ¡¿Por qué?!
¡¿Por qué en tu jodida cabeza no te cabe que no, es: NO?!
Ahora sabes que me gustas, y yo no deseaba eso.
No puedes hacerte el desentendido, te lo dije mil y una veces.
¡NO ESTOY LISTO! Y no responderé a ti, no puedo, no lo logro.
Esto es una puta maldición.
¿Por qué me vuelvo tan débil en estas situaciones?
Definitivamente, odio el amor de pareja.
Sólo te hace querer estar preocupado por alguien más, querer que esos brazos te abracen, y te acurrucan en su pecho...
Deseas permanecer ahí siempre. Luego ser llenado de besos, o también darlos... Te quedas obsesionado por la seguridad que te da. Una sensación dulce cubre tu cuerpo, y sonríes con mucha sinceridad. Llegas a prometer muchas cosas...
Me encantaría que fueras tú el que me proteja cuando me sienta débil...
Digo, ¿Qué?
No, ya no me importa. El amor solamente me hace daño.
Prefiero las veces en las que finji que Meg me gustaba. Ver aquella expresión enojada acompañada de un sonrojo pequeño.
En las que recibía golpes de amenaza en la cabeza de parte de ella. Y luego:...
Venían ustedes, tú y el pelo de menstruación a defenderla, como si yo fuese un pedófilo que va a violarla.
Ustedes sí son unos pedófilos. Tú tienes 20 y Fox 19, yo soy un lindo chico con 18.
Aún me resulta entretenido recordar a Meg. Sinceramente, yo solamente tenía una obsesión con ella, nada fuerte, me imagino que debe sentirse aliviada porque ya no la molestaré.
¿Por qué hacerlo? Eso dependería verte a ti.
Y no quiero verte, pulgoso de mierda.
No entiendo cómo llegaste a gustarme, poner a darle vueltas a mi cabeza sólo con el recuerdo de tu mirada.
Antes de que mi infierno comenzara, simplemente te detestaba, porque tú si tendrías oportunidad con aquella albina de ojos ámbar, digo, de un ojo ámbar. Que fome la cíclope. Ah, ¿En qué estoy pensando?
Ah, hablaba de mí y mis molestias. Ya recordé.
Bien, detestaba la cercanía de ustedes, siempre mirandote con ojos envidiosos, ¿Cómo es qué lograste adueñarte de mis pensamientos?
Mh, ahora que lo recuerdo...
Fué hace ya un largo tiempo. Yo observaba a Meg y le coqueteaba, normal, rutina diaria.
