-¡Meghan, al despacho del director!-grito mi amadísima-nótese el sarcasmo en mi voz-profesora de Historia mientras corría hacia Alex para auxiliarlo. Enserio… ¿Por qué siempre las profesoras de Historia tienen que ser las más cabronas? Aparte, no había sido mas que un golpecito…y el muy niña no lo había resistido.
-¡pero profesora, el me ha provocado!-grite mientras que prácticamente sacaba humo de la nariz, esta profesora amaba mandarme al despacho del director, les juro que parecía estar todo el tiempo a toda hora y en todo lugar esperando la oportunidad como para echarme la bronca y mandarme allí, faltaba que apareciera con la lupa y el traje de detective rastreando cada paso que yo daba. Le odiaba.
-Meghan, siempre que hay problemas en el instituto, estas tu de por medio, y es algo que esta mas que comprobado, ¡así que o vas ya o serás expulsada!-dijo mientras ayudaba a levantar a un muy mareado Alexander, me fulmino con la mirada en cuanto se volteo. ¡Maldita cabrona, solo por ser la esposa del director! Le iba a contestar, pero en lugar de eso, opte por dar la media vuelta y caminar derechito al despacho del director dando grandes pisotones, tras gritar un “vieja hostiada” y dejar una muy roja y enfurecida profesora de historia entre las carcajadas de los estudiantes. Esta la pagaría mas adelante, lo tenía más que sabido, me las haría pagar la muy zorra.
Estaba frente a la tan conocida puerta del director Jonson, estuve a punto de dar la media vuelta e irme por donde vine, pero preferí tomar de la mano a la oportunidad de no ser expulsada, sin tocar la puerta, como de costumbre, entre y me encontré con Jonson leyendo lo que supuse que serian unos expedientes muy largos y aburridos. Supe al instante que no serviría como directora, ni profesora, ni paseadora de perros, ni nada donde tenga que hacerme cargo de algo o alguien mas. El ni siquiera me miro, solo se limito a murmurar lo siguiente.
-Meghan, ¿es conciente de que de esto depende su futuro?-pregunto el sr.Jonson, nuestro director, aun que yo prefiero llamarlo “Fideo” ya que es un hombre largo y muy pero que muy delgado, incluso mas que yo. Definitivamente, tanto por mi salud mental como por la física, ruego por no encontrármelo jamás en la playa...-el instituto, la buena conducta, las notas, y usted, en lugar de preocuparse por cumplir con esas perspectivas, va por ahí, pegándole a jóvenes que no te han hecho nada…-dijo mientras seguía pasando las hojas de lo que sea que estaba leyendo, con una lapicera en la otra mano, dejo de hacer lo que hacia para acomodarse los lentes tan sosos que tenia en la punta de la nariz…Si no fuera por que de este tio depende la posibilidad de que siga concurriendo al instituto, y no tenga que enfrentarme a la furia de mi padre, ya hubiera saltado sobre el. Igual se que si a Fideo se le ocurre echarme, basta con que mi padre haga una sencilla presentación ante el director como para que cambie de idea, aun que eso no evitaría el sermón de 800 horas que me daría, mas el castigo al estilo militar que ama hacer y las bofetadas que le encanta dar, eso y mas. Lo mire y entrecerré los ojos, al recordar lo que dijo al final.
-¿Qué no me ha hecho nada?-murmure entre dientes-Fi…director Jonson-me corregí, aun que lamente al instante hacerlo-¿acaso estuvo usted presente en la pelea?-el me miro fijo, sin realizar gesto alguno. Ya me gustaría a mi verle la cara si supiera quien es mi padre.
-No, no estuve presente en la pelea, pero según lo que oí-empezó a decir.
-¿y usted cree en todo lo que oye?-le interrumpí con brusquedad-es decir, que si yo ahora vengo y le digo que usted es gay ¿me creería?-le grite furiosa, pensé que iba a seguir sin realizar gesto alguno, que me iba a expulsar y todo, sin piedad alguna, por lo que me sorprendí, y demasiado para mi gusto, al verlo echarse a reír, con lagrimas y todo…. Joder, este tio estaba pirado, se ve que se la había pasado fumando verde.
-Adams, si hay algo que tengo bastante claro, es mi gusto por las mujeres-murmuro entre risas, aun secándose las lagrimas de los ojos con la manga de su camisa cara.
-Sr.Jonson, no sabia que era un viejo verde-ahora la que se echo a reír fui yo, el me miro sorprendido y luego volvió a echarse a reír, definitivamente no conocía este lado de mi director, pero estaba claro que me gustaba mas que el Soy-tan-serio-y-aburrido-que-mis-alumnos-se-duermen-con-solo-oirme-hablar. Literal, más de una vez vi como varios chicos, en donde me incluyo, se quedaron dormidos en algunas de sus miles de charlas.
-creo que usted agarro demasiada confianza para una situación tan delicada como esta-dijo serio, de nuevo, aun que en sus ojos había cierto brillo que me indicaba que la situación le parecía de lo mas divertida.
-podría decirle lo mismo, fanático de las mujeres-dije y le guiñe un ojo, era muy obvio que estaba tratando de contener la risa…lo cual no le duro mucho, pues se echo a reír al instante.
-bueno, creo que esta conversación debería quedar entre nosotros, te dejare ir, pero con dos condiciones, la primera es que no vuelva a ocurrir lo mismo con Steele, la segunda, y la mas importante; salga con cara de sufrimiento, y para remarcar eso, y hacerlo mas real, les daré un castigo, uno bueno-mierda, uso plural…-a ti y a Steele-denme la puta arma que me suicido ahora mismo-juntos-¿alguna lapicera, un sacapuntas, una puta goma? ¡Lo que sea, pero me las puedo ingeniar para matarme igual!-haber si aprenden a llevarse mejor-pi.pi.pi.pi-se encargaran del jardín, completo-no pude evitar soltar lo que dije.
-¿¡es que esta demente!?-el alzo una ceja-¿¡eres conciente del tamaño del jardín!?-grite anonadada por lo que el quería que haga, el jardín, era 2/4 del instituto, y era prácticamente y literalmente un bosque, lleno de pasto crecido y árboles inmensos, estaba muuuy mal cuidado, eso podría demorarme una eternidad, literalmente.
-te dije que el castigo seria bueno-dijo con un brillo burlón en su ojos. Quería zamarrearlo hasta que se diera cuenta de que esto era prácticamente un homicidio.
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¿Femenina? ¡JA!
RomanceEstas palabras definen a Meghan Adams; nada femenina, temeraria, divertida, personificación del sarcasmo, vaga, DEMASIADO sincera para nuestro propio bien, sin vergüenza, extrovertida, hiperactiva y muy pero que muy problemática. Es parte de la alta...