Vieron esas locas ganas de destrozarle la cara a alguien cuando te toca demasiado los cojones? bueno, eso estaba experimentando ahora, la cosa era que con solo escuchar la voz de Alexander, me ponía echa una fiera con sentimientos asesinos. Voy a hacer de el una versión de Jeff The Killer en cuando siga fastidiándome.
Sinceramente no se que era lo que tanto me fastidiaba de el, el hecho de que sea uno de los mejores amigos de mi hermano perdido no ayudaba mucho, ya que lo tenia la mayor parte del tiempo dando vueltas por mi casa. Mi hermano era un ser que solo daba señales de vida cuando necesitaba algo, lo que sea, pero algo, si no se la pasaba de barcos y putas derrochando dinero por doquier, se la pasaba en casa con sus amigos, armando un despelote en toda la casa, o todo el vecindario, para ser mas exacta. Yo no me había criado entre pompones y cascabeles, mas bien era un intento fallido de ello, según la perspectiva de mi madre, yo, en cambio, sabia con firmeza que no había nacido para ser la princesita de tirabuzones rubios y ojos verdes que tanto deseaba mi madre, yo era lo que mi padre esperaba; la personificación del vandalismo. El no es un padre ejemplar, al contrario, le detesto en parte, lo primero que hizo al sostenerme en brazos en cuanto yo nací, fue murmurar "Esta tía-¡Tan solo tenia unas horas y el me trataba de tal forma!-será de las mías" Me lo contó mi madre, y me lo confirmo mi mismísimo padre, el representaba un gran papel, jefe de la mafia, mira tu que bien, mi primera palabra fue "PUDRETE", me acuerdo la reacción de mi madre cuando me estaba sermoneando por no juntar mis juguetes y yo le lancé un "¡PUDRETE!" llena de furia, volviendo al tema del padre ejemplar; tenia 6 años cuando me empezó a entrenar, tenia 8 cuando me enseño a herir verbalmente, 10 cuando me enseño a noquear gente, 13 cuando me enseño técnicas para conseguir lo que quería a través de la fuerza bruta, 14 cuando me enseño a manejar armas, 15 cuando me enseño a manejar automóviles, yo amaba las motos, 16 cuando me enseño a encontrar los puntos débiles de las personas, y ahora planea enseñarme técnicas de tortura. Sin embargo, era la hija de papi, mi hermano siempre me había tenido cierta envidia por el hecho de que casi toda la atención me la llevaba yo. Podría decirse que el solo me quería a mí, pero Jason, mi hermanis, seria el que se ocuparía del cargo de papa cuando el se "jubilara" o lo que sea que hace el jefe de la mafia al terminar con su trabajo. Yo igual estaba bastante conforme con la relación de mi hermano mayor, es decir, pasábamos gran parte, es decir, GRAN PARTE, del tiempo peleando, y eso que no nos veíamos mucho, pero éramos cómplices de nuestros actos, si uno se encontraba en una situación complicada, por así decirlo, el otro saltaba en su defensa, siempre y cuando la situación no se relacionara con una pelea entre nosotros, ahí si éramos como perro y gato. Creo que me fui demasiado del tema TeamAntiAlexander.
-¿Como me has llamado-comencé a preguntar de un tono demasiado tranquilo, si yo fuera el, ya tendría todas mis alarmas activadas-Alex...Ander-joder, debo acostumbrarme a no ponerle apodos a este rubito egocéntrico. Alexander.Alexander.Alexander.Alexander.Alexander. Joder, que no era tan difícil! era agregarle un Ander al final de Alex. ¿Veis? el contacto con su sangre y saliva ya comienza a hacer efectos, a que mañana me encuentran en plena descomposición.
-Bebe-dijo con mucho énfasis en la palabra-¿es que es tanto lo que te has encariñado conmigo que te resulta imposible no ponerme diminutivos?-pregunto, el sarcasmo en su voz era evidente-o puedes ponerme apodos, como Cielo, o ¡Ya se! Cariño...ese mola-dijo mientras levantaba las cejas, insinuante. Sentí como toda la sangre me llegaba a al rostro, ardía como la mierda, pero no dolía, me estaba sonrojando, joder, pero no como esas tias que están idiotas, que se sonrojarían sin poder evitarlo al oír semejante palabrerio salir de la boca de Alex...Ander. Yo estaba roja, si, pero de la furia, de la autentica rabia que crecía y se arremolinaba en mi interior, como un tsunami, esperando poder ahogar a Alexander en el. Sonreí ante la idea, y por supuesto, Alexander mal interpreto todo, eso, o solo trataba de aumentar mi rabieta. ya que no dudo al hablar-veo que te gusto la idea, bebe, se que soy jodidamente atractivo, pero no creo que era para tanto como para que te sonrojes, ¡Baah, claro que si es para tanto! con un tio tan escalandroficamente (?)Caliente, cualquier tia, e incluso tio, se sonrojaría-Lo mire boquiabierta, no podía dar crédito a lo que mis oídos claramente habían oído, me encontraba en estado de shock, nadie me provocaba tanto como Alexander salvo mi hermano, y ni eso, Alexander podría decirse que era peor, ¿como podía una persona ser tan egocéntrica, tan presumida? Alexander era espantosamente horrible...bueno, puede que fuera guapo, y tuviera un cuerpo espectacular pero...¡JODER MEGHAN!, ¿¡PERO QUE CARAJOS DICES!? FUE LA SALIVA MEGH, FUE LA SALIVA, Y EL CONTACTO CON LA SANGRE, TRANQUILIZATE MEGH, TRANQUILIZATE, ESTE TIO ES HORROROSO, NO LE ENCUENTRAS NADA DE ATRACTIVO, ES UN VOMITO HUMANO QUE FUE TRAGADO POR UN PERRO, QUIEN LUEGO VOLVIO A VOMITAR, FUE TRAGADO POR UN GATO Y LUEGO VOLVIO A VOMITARLO, QUE SE ACUMULO Y MEZCLO EN UNA CLOACA."Pero te resulta atractivo" murmuro mi subconsciente con los brazos en jarra, alzando una ceja, ¡Eso no es justo, yo nunca pude alzar una ceja!.Se ve que me había quedado dormida entre mis pensamientos ya que Alexander esbozo una sonrisa antes de hablar-¿Hasta te deje en estado de Shock?-pregunto fingiendo preocupación-tranquila Meggie, soy solo un tio, no es para tanto
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¿Femenina? ¡JA!
Storie d'amoreEstas palabras definen a Meghan Adams; nada femenina, temeraria, divertida, personificación del sarcasmo, vaga, DEMASIADO sincera para nuestro propio bien, sin vergüenza, extrovertida, hiperactiva y muy pero que muy problemática. Es parte de la alta...