Capítulo 4 "Reencuentro Con El Destino"

571 83 23
                                    

― ¿Ccino? ―se pregunta sabiendo la respuesta, pero está aturdido después de cinco años sin saber nada de él y de su hijo.

Hija.

Da tontos pasos hacia ellos. Ccino da un paso atrás, no quiere que se le acerque afirmando de manera resguarda a su pequeña.

―Ese señor me ayudó. ―informa la menor, inocente en no darse cuenta la situación que se plantea.

―Yo ―la garganta se le presiona. Una sensación en el estómago le hace sentir mal y bien al mismo tiempo. Mal, por haberles abandonado, y bien, por al fin encontrarles―…te he estado buscando durante mucho tiempo. ¿Cu-Cuál es su nombre? ―surca un poco los labios para no aparentar estar contento, y le gustaría estirarlos más, con mayor fuerza.

―No tiene nombre. ―le espeta con frialdad acribillando el corazón de Nigthmare, como él lo hizo con el suyo.

―Bueno…es bonita. ―se siente patético e incómodo.

―Gracias ―y en su mente se dice "Supongo" . Quita la vista sobre el azabache y la posa en su hija―. Despídete del caballero, regresaremos con los abuelos.

"Caballero" , ni siquiera le dijo quién es.

―Adiós señor. ―la menor levanta la mano y se despide de Nigthmare, éste hace el mismo procedimiento.

―Cuídate y hazle caso a tu mamá en todo. ―le sonríe a la niña y se detiene cuando Ccino le lanza una mirada de reojo. Y se van.

Su órgano vital se le contrae, en cualquier momento se le saldrá por la boca. Sus pies tiemblan y presiona los ojos. ¿Qué debe hacer ahora? ¿Dejarlo ir o seguirlo? Tiene que elegir ahora o los perderá de nuevo. No puede tirar a la basura la piedad del destino. Si lo sigue, puede ser rechazado. Si lo deja, seré difícil encontrarlo otra vez. Tiene que disculparse, era joven, era un imbécil. No era un amigo de verdad.

Y sólo quizás, sólo quizás en algún momento estuvo enamorado de Ccino.

MokkaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora