INNOCENT (Viktuuri) Omegaverse

capitulo 23

Que jodido era vivir de esta manera, el miedo constante de que algo iba a pasar tenía la cabeza de Viktor colapsada de preocupaciones vagas respecto a cualquier mera situación que pudiese poner en peligro a su amada persona. Yuuri era todo lo que el alfa tenia y por nada del mundo iba a permitir que algo le pasara, o por lo menos eso creía, el no había podido salvar a su madre pero definitivamente haría algo por Yuuri.

Ese martes en la tarde Nikiforov tendría una reunión con Sasha, este lo había llamado para arreglar unos asuntos en total privacidad, sin embargo, Viktor aprovecharía para plantarle frente a sasha respecto a sus encuentros con Vanya, tenía que hacerlo, pero definitivamente el alfa no quería ir, ese día no tenía ganas de verle la cara a su padre, ni ese día, ni ningún otro. Pero a fin de cuentas el ya no era un niñato, era un hombre de veintisiete años hecho y derecho, debía cumplir con sus responsabilidades. Aún recuerda como hace ya algunos años se había revelado en contra de su padre, en contra de su destino, en contra de su preparación para ser el nuevo jefe de los Nikiforov, la disyuntiva en su cabeza de que era lo correcto no le permitió tomar buenas decisiones que al fin y al cabo son solo decisiones. Si se hubiese escapado como tenía planeado lo mas probable es que nunca habría encontrado a Yuuri y jamás habría fortalecido su hermandad con Chris, así que no se sentía arrepentido de sus errores por que le trajo enseñanzas y felicidad a su vida y eso no se consigue triunfando

Sin embargo, aunque estaba muy seguro de lo que hacía yendo a ver a su padre aun la idea le molestaba por el simple hecho de que ese hombre solo le gustaba burlarse de su manera de pensar además de poseer un carácter más explosivo que una bomba hacia Japón.

Pero él era un alfa, tenía que dejar sus malos presagios atrás para poder seguir adelante o por lo menos tratar de hacerlo, pero no quería tocar ese tema. No ahora que era tan feliz a su manera.

Al llegar a la residencia de su padre pudo sentir como empezaba a marearse, ese olor que se apoderaba de aquella propiedad era definitivamente nauseabundo para él, un alfa con pareja. Su padre solía montar orgias en toda la casa con sus chicas, el olor de doce omegas era realmente asqueroso, ni siquiera tuvo que tocar cuando llego a la puerta ya que solo con un reconocimiento facial esta se abrió por si sola.

Tantos lujos hacia que su estómago se revolviese, lo odiaba.

Al pasar consiguió a su progenitor sentado en el sofá del estar principal, tomando una copa de vino, probablemente el más caro que existe, sus miradas se conectaron, la situación era tan tensa que se podía cortar con una tijera para cejas, era curioso, las mismas miradas, las mismas expresiones, era como estar viendo el reflejo de una persona en el agua.

El alfa mayor se levantó, sus azules ojos se pasearon por su hijo, examinándolo, juzgándolo.

-Sabes...cada vez que te veo me sorprendo sabes...de lo mucho que ha crecido- el tono de voz del alfa mayor denotaba que el alcohol había derrumbado su razón.

Viktor se cruzó de piernas preparado para otro show de su padre, verdaderamente algo que no le importaba en lo más mínimo. El solo quería saber que se traía con Vanya, ¿qué le harían a su Yuuri?

Estaba dispuesto a matar si la situación lo ameritaba en gran medida.

-No tengo tiempo para tus melancolías Sasha, me llego tu mensaje de que querías verme...pues aquí me tienes. -El joven ruso tenía su mirada clavada en su padre, como si estuviese viendo escoria humana.

-bueno en realidad se supone que eres tú el que me tiene que decir algo ¿no es así vitya? -el ruso se paralizo por un segundo.

El alfa miro a su padre totalmente confundido, sin saber que quería en realidad. Por alguna razón su cabeza no maquinaba lo suficientemente rápido.