Cuando mi padre pregunto dónde iría esta mañana no tuve más opción que mentirle.
─La biblioteca ─ dije mientras tomaba un sorbo de café
Cuando Ben dijo que me ayudaría sabia que no seria gratis y no me sorprendí mucho cuando me envió una ubicación esta mañana. Aunque me sorprendió que fuese en su casa. Es decir todos sabíamos que su padre no le permitía realizar fiestas en su casa. Aunque de todas formas eso no le impedía caer drogado en alguna parte.
El me mira por unos segundos, esta peinado y casi puedo decir que esta sobrio.
─ Si Emma estoy sobrio─ siempre me sorprende como lee mis pensamientos. Tendría que trabajar en ocultar mis emociones.
─No me interesa ¿Entonces porque estoy aquí?
─ Porque mi dulce Emma ─ dice acercandoce a mi ─antes de decirte algo sobre Devon Lane. Necesito que tengas un pequeño gesto por mi.
Lo miro sin inmutar un paso. Algo que sabia sobre Ben Campbell era que no me deseaba. Sabia que le gustaba seducir a las chicas y sabia que cuando alguien le interesaba hacia lo imposible para verla debajo de sus sabanas.
Y conmigo era diferente, yo sabia que me necesitaba. El no era tan insistente con nadie.
─ ¿Que tengo que hacer?─ El desliza su pulgar por mi rostro
─ No es la gran cosa para ti ─Su pulgar recae en mis labios ─ Solo entra allí asiente a todo lo que diga y tratare que dure 10 minutos, luego nos largaremos ¿entendido?
─ Entendido ─ Asiento─ pero antes tengo una duda
El me mira casi como si supiese lo que voy a decir
─ Me dijiste que sabias cosas sobre Devon Lane ¿Cómo sé que son ciertas?
─ Mira Emma, yo no miento. Si digo que se cosas sobre Devon, es porque las sé. Me folle a 3 de sus novias, casi es como si yo fuese uno de sus ex's.
Trato con todas mis fuerzas de no reírme y tener a cara más seria posible, después de todo de esto dependía lo que haría.
─ Dime algo y entrare allí y haré lo que me digas. Solo necesito algo
El suspira casi dándose por vencido conmigo
─ Sabia que no serias fácil. Bien Emma, sé que Devon se acuesta con la profesora de gimnasia; los sábados después de su entrenamiento de las doce.
No es que lo supiera, pero había notado alguna mirada entre ambos.
─ Eso no me sirve─ digo─ A lo mucho el va a recibir un llamado de atención y la única que estaría acabada seria la profesora. Todos sabemos quien es su padre
¿Acaso había perdido mi tiempo?
─ No es la única mujer mayor de la que esta interesado. Ya sabes lo que dicen de tal palo tal astilla
─ ¿A que te refieres?─ pregunto curiosa
─ A lo que tu imaginación mas perversa se esta imaginando
Tardo unos segundos en procesarlo y le sonrió
─ Bien ─ digo caminando por delante ─ ¿en dónde es?
El coge mi mano y me lleva por el camino contrario
─ Los próximos 10 minutos tu y yo somos los seres humanos más enamorados ¿Entiendes? ─ dice plantando su mirada en mí.
─ Si, amor ─ contesto con burla
Su casa es enorme, como un palacio. Noto que su incomodidad al ingresar, tiene un enorme jardín lleno de rosas rosas con un pequeño camino de piedras que nos conducen al "palacio"
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Mi lista de chicos malos: La Perfecta Mentirosa
Teen FictionEmma fue descubierta, tantos años fingiendo ser una chica buena y la descubrió el peor de sus problemas. Ben era peligroso, un estallido de emociones, que podría hacerle perder el control y Devon, era malo, lástima que también era el chico dorado. D...