Hormonas Venus | Tg

Grandes Cambios

Paula se había encargado de hablar con todos los que rodeaban en el diario vivir de Diego para que no hablen de su delicada condición a causa del tratamiento de cáncer.

Mientras pasaban los días Diego iba al gimnasio, pues pensaba que el tratamiento estaba afectando su tono muscular. Los cambios ya eran notorios para él. Las pesas que levantaba con poco esfuerzo, ahora ya eran casi imposibles. Su cuerpo ya era diferente en su desarrollo y mientras más ejercicio hacía, su cintura y trasero se iban definiendo sutilmente.

Diego comenzó a sospechar lo que estaba pasando con su cuerpo. Había pasado una semana y sus pechos habían crecido un poco más. Su cuerpo cada vez tenía una contextura más femenina pero no la suficiente para asustar a Diego. Por un lado él sospechaba que parecía una chica pero por otro lado no quería aceptarlo y justificaba las ideas como síntomas del tratamiento. Era como la anorexia, él se veía como un hombre aunque cada vez era más evidente que su cuerpo iba cambiando.

- Paula, creo que dejare de tomar esas pastillas.

- Por lo menos hasta regresar a la normalidad.

- Mi cuerpo se ve....

- diferente

En efecto Diego comenzó a rechazar las pastillas pero Paula las disolvía en sus comidas. No podía dejar de tomarlas ya que los efectos podrían ser devastadores en Diego.

Mientras tenían sexo, Paula colocaba Viagra en la comida de Diego e intentaba que sea en las noches donde Diego no podía ver su pequeño pene. Paula se daba modos para que el pene de Diego no se salga fácilmente en las posiciones y fingía orgasmos mientras adulaba su poder sexual.

Diego no se daba cuenta de su pene reducido debido a que a estas alturas era casi imposible que tenga erecciones y cómo ya se sabe, padecía de una condición de no aceptación. Las caderas de diego cada vez eran mas pronunciadas y gracias al constante ejercicio su cintura se iba reduciendo, por lo general diego solo podía ver lo que pasaba en frente de su cuerpo. Su trasero había crecido notoriamente mientras sus piernas se veían mas largas a diferencia de su torso.

El vello de todo su cuerpo se había caído, algo que Diego no le sorprendía, pues si su barba desapareció, cual sería la diferencia con su vello corporal. su cara tenía rasgos mas finos pero aun no cambiaban la esencia de Diego. Era domingo por la noche, después de una semana de ausencia en el trabajo.

- Creo que regresaré a trabajar

- No quiero perder todas mis vacaciones

- Ya me siento mejor. Hablaba Diego con una voz mas fina, como la de un adolescente.

Mientras se colocaba su apretada camisa de trabajo para ver como le quedaba, pudo notar que sus pequeños pechos resaltaban entre la ropa.

- Mierda - estos pechos me hacer parecer como una chica

- Estúpido tratamiento

- Parece como si...

- ¡Me estuviera convirtiendo en una mujer!.

Paula bajó la mirada como símbolo de incomodidad. Mientras diego se deba vueltas para mirar su cuerpo.

- Mierda, mierda, mierda

- Tengo trasero y caderas.

- Porque no lo noté antes

- Soy deforme

- ¡ejem! - Diego carraspeaba su garganta

- Mi voz

- Suena diferente

-!Paula¡

- ¡Que es todo esto!- Dijo Diego con una lagrima en sus ojos.

-¡¡Paula!! - Gritó nuevamente como respuesta al silencio de paula.

Paula levantó lentamente la mirada y dijo.

- Era la única manera de curar tu cáncer

- Te dije que no podías saberlo, pues no lo ibas a aceptar.

- No quería que mueras - Sif-

Diego, debido a sus hormonas femeninas no podía contener las emociones. Con voz temblorosa y lagrimas en los ojos le dijo.

- Parezco un monstruo

- Dime ¿Que me esta pasando?

- Me...

- ¿Me estoy convirtiendo en una chica? - Dijo Diego con miedo a una respuesta positiva.

Paula con lagrimas en los ojos afirmo con la cabeza sin dar una respuesta verbal. Diego al escuchar la respuesta cayó de rodillas intentando mirar todo su cuerpo con resignación.

- ¡No!

-no, no, no

- ¡Regresame a la normalidad!

- Yo...

-Yo soy un macho, yo soy un hombre, un macho alfa.

- El cuerpo femenino es solo para darme placer como hombre.

- ¡Las mujeres son débiles y tontas ! - Dejo soltar diego en medio de la desesperación y el enojo.

- ¡ No quiero esto!

Paula miro a Diego con enojo y se fue diciendo.

-¡Pues deseo con ansias que te conviertas en una mujer débil y tonta!.

Diego cayó llorando con su cuerpo desnudo en el suelo mientras pensaba.

- ¿Porque lloro?

- Esto no esta bien

- Que voy a hacer mañana

- Odio este cuerpo

A la mañana siguiente diego despertó en el mismo lugar donde se recostó. Debía ir a trabajar, pues ya había hablado en su trabajo que iría y estaba planeada una exposición importante que había sido postergada.

Al colocarse la ropa de trabajo, notó que el pantalón le apretaba en el área de las caderas y los zapatos que usaba no  le quedaban. Fue al armario de Paula y encontró un par de zapatos negros que ella solía usar en casa. Al colocárselos, notó que le apretaban un poco pero su pie entraba perfectamente para poder usarlos.

Para cubrir sus pechos se colocó su chaleco casi nuevo, pues nunca lo usaba. Al ver su cabello, notó que ya colgaba mas abajo de sus orejas. Intento hacer un peinado de lado y salió a trabajar, sin olvidar tomar "el jugo que Paula le prepara con mucho amor todos los días".