Pactó Perfecto -Klaroline-

Capitulo 28

POV Caroline.

Las horas pasaban lentamente, o tal vez era yo la que pensaba a así, llevaban horas encerrados en el estudio Klaus y Aurora. No saber que estaba pasando me estaba volviendo loca. No entendía como un día tan perfecto y feliz termino con un final tan malo como este.

Mi mente estaba hecha un caos, cualquier cosa me pude imaginar menos que reviviera el gran amor de juventud de Klaus. Y Decir revivir ya es mucho para decir. Cuando es obvio que no estaba muerta. Como también es obvio que klaus no la han dejado de amar por completo. Ya tenía más que suficiente con saber que amaba alguien más. Como para soportar este repentino fantasma pelirrojo.

Una rival más con la cual competir. Eso era todo menos bueno para mí salud mental. Desde que vi a Aurora mis nervios aumentaron, al grado de que Rebekah se encargo de los niños junto con Valery. Llevaron a los niños arriba para evitar que se enterarán de los repentinos problemas que acaban de llevar esta tarde que ya se había convertido en noche.

Necesitaba desahogarme con alguien y en vista que no podía hablar con Rebekah porque cuidaba a mis niños, llamé a Elena minutos después llegó en mi auxilio mental. Hablar con ella me había tranquilizado al menos por un rato. Ya que ver por horas encerrados en el estudio a Klaus con la tipa esa me ponía de nervios, cada vez más y más.

 Mi corazón se partía cada vez que imaginaba que lo estaba convenciendo de retomar su amor. Entonces yo saldría sobrando. Y me pediría el divorcio, me alejaría de él, y de Marcel. Caminaba por toda la sala de un lado al otro con impaciencia. Elena me tomo de la mano cuando pase por su lado.

-¡Caroline basta! -Me reprendió Elena- Harás una zanja en la sala. Si no te detienes.

-No puedo Elena, estoy desperará por saber que está pasando haya dentro. -Solte un gran suspiró al hablar, Elena me miró comprensivamente-

-Lo se Caroline, lo dejaste claro las últimas dos horas. -Me indicó que me sentarán a su lado, de mala gana tomé haciento junto a ella-

-Ya era difícil competir con un fantasma, como para que ahora resulte que no es solo un fantasma. Está muy viva demasiado pasa mi gusto. -Solte con frustración-

-Tranquila Caroline, todo estaré bien. -Elena me dedico una leve sonrisa-

-Como se supone que va a estar bien todo. Si lo más probable es que cuando klaus habrá esa puerta mi matrimonio habrá terminado. Y es lo más lógico ya que aún siente algo por ella. Tienen historia juntos y más importante tienen un hijo en común. Las únicas que salimos sobrando somos mi hija y yo. -Trate de hablar lo más serena posible pero me era difícil, en cualquier momento rompería en llanto-

-Caroline no pienses así, mi hermano te ama. De eso no me cabe la menor duda. Acabo de escuchar un poco de su plática con Aurora. Y no creo que te vaya a cambiar por la loca esa. ¿Además que te hace pensar que aún la ama? -Respondio Rebekah mientras tomaba haciendo junto nosotras- ¿Acaso te a dicho que aún la ama?

-No pero, hace días vi como mirada una pintura que el hizo, y la miraba con sufrimiento y dolor. Como si la extrañará. -Confece, Rebekah tomo mi mano libre ya que la otra la tenía ocupada por la mano de Elena-

-Conozco a mi hermano mucho mejor que cualquier persona. Y se muy bien de lo hablo. El jamás a mirado a nadie de cómo te ve a ti. De solo hablar de ti los ojos le brillan. Desde que están juntos está más feliz de lo que nunca antes ah estado. Cuando estaba con Aurora no estaba ni cerca de verse así de feliz como lo es contigo.- Hablaba con tanta seguridad que me daban ganas de creerle. Aún que me fuera imposible de créer ya que klaus no me amaba y nuestro matrimonio no estaba lleno de amor como Rebekah creía, al menos no por parte de Klaus.-