Si tan solo la vieran caminar sabrían porque me he vuelto loco por ella.
Ni hablar de esa sonrisa tan pícara y bonita, no se compara ni con una margarita.
Tan solo desearía que me viera y que entendiera porque la quiero solo mía.
Quiero tenerla entre mis brazos y cuidarla, como se cuidan a las flores en primavera, así quiero cuidarla, pero toda una vida. Y no me importa si conlleva espinas porque me atrevo a pincharme solo por tenerla y llamarla vida mía.
Llámame loco, porque loco estoy por esa flor que visitó cada día.