No puedo hacer la promesa de permanecer por siempre, pero si te digo que lo intentaré. No soy de los que creen en un para siempre, porque sé que quien me lo dijo, hace tiempo me a dejado de querer. Puede que sí, talvez intente creerte a ti, pero cariño... ¿a quien engañó? Sí ni de mi palabra puedo confiarme. Sé que a veces me temes, temes que me valla, o que me aleje otra vez, te invade el miedo a que te olvide, por eso intentas hacerme prometer, que por siempre a ti te perteneceré.