Tsuna se sentó debajo de un árbol, y oculto su rostro entre sus piernas, la cabeza le dolía demasiado, parecía que le explotaría.
En la escuela un furioso peli plata caminaba lo más rápido que podía por los pasillos en dirección a la azotea.
-Yamamoto apresúrate, casi termina el receso – Gokudera estaba molesto con Yamamoto, el chico lo había hecho perder tiempo con su indecisión sobre que iba a comprar
- calmante Gokudera no es para tanto
- dejamos al décimo solo en la azotea – murmuro aterrado de que la odiosa Sasawaga hubiera aprovechado la oportunidad – ya te dije que no debo dejarlo solo...
-ah cierto – comenzó a reír – lo había olvidado
-¿qué? – Le dio un golpe en la cabeza – ¡¿cómo te has podido olvidar del décimo?!
- era broma Gokudera – sonrió – no podría olvidarme de Tsuna
- tsk, como sea apresúrate – lo tomo del brazo para hacerlo caminar más rápido
- sí, si – suspiro
- Gokudera creo que te hablan – al escuchar que el celular del mencionado sonaba se detuvo
-¿enserio? no me había dado cuenta – dijo sarcástico, para luego sacar su celular de su bolsillo
- ¿quién es? – pregunto el moreno un tanto curioso
- el décimo... ¿Pero y a ti que te importa? – Yamamoto en verdad lo confundía, pero ahora tenía que leer el mensaje del décimo.
|Gokudera-kun lo siento pero me regreso a la casa, no me siento muy bien.
Ah por cierto deje mi mochila en el salón ¿podrías esconderla?
Gracias, nos vemos luego|
- y bien, ¿qué dice Tsuna? – murmuro mientras intentaba ver el celular del chico
- el décimo no está en la escuela, se regresó a su casa – suspiro
- ¿qué? Pero si hace un momento estaba aquí, en la escuela – estaba confundido, ¿en qué momento el castaño se había ido?
- sí, eso ya lo sé, mejor comemos en el salón
Después de mandarle el mensaje a Gokudera, Tsuna vio el lugar en el que estaba, y por un momento se olvidó el dolor de cabeza.
- yo... yo ya había estado en este parque – Tsuna intento recordar, pero por más que intentaba el dolor en su cabeza regreso y cada vez se hacía más fuerte – mejor regreso a casa.
Tsuna suspiro y empezó a caminar hasta que llego a su casa, la cabeza aun le dolía por lo que decidió tomar una pequeña siesta, para calmar el dolor.
El día había pasado rápido y las clases habían acabado Gokudera y Yamamoto iban hacia la salida cuando Hana y Ryohei los alcanzaron.
- Yamamoto, yo y Ryohei queremos hablar contigo – dijo Hana que al mismo tiempo noto en Gokudera una mueca de desagrado – bueno creó que a los dos les interesa
- claro ¿qué ocurre? – el moreno miro a las dos personas con curiosidad
- aquí no podemos hablar – el mayor de los cuatro hablo serio
- vayamos a la cafetería que está cerca – hablo la chica
Gokudera acepto ir con ellos, sin saber exactamente porque, al llegar a la cafetería los cuatro se sentaron y ordenaron algo antes de hablar.
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Nuestra Promesa
Fanfic*Primera parte de después de una promesa* 1827 Tsuna y Hibari se conocieron cuando eran niño y se hicieron amigo, sin embargo al versé en la necesidad de separarse deciden hacer una promesa, ¿la podrán cumplir? ...