Sólo Emery piensa que el amor, sólo existe en las novelas

capítulo 10

Emery:

La cara de Sam no era precisamente, la que me esperaba encontrar, me dejo muy fuera de lugar, cuando vi las miradas que le echaba, a mi hermano y a Jason que no eran normal, los miraba con cara, de ganas de quitarle la cabeza en cualquier momento.
   -¿qué te pasa?- le preguntó
   -algo-
   -y ¿no me lo puedes contar?- antes de que respondiera, le toca a mi hermano girar la botella, en cuanto giró y paró en la chica que tanto estaba deseando, la cogió de la mano y se fue con ella.
   -ahora venimos- comunicó antes de marcharse.
   -cuidadito- dije con cara de hermana mayor, lo cual no soy.
Cuando me dispongo a seguir mi conversación, con Sam me doy cuenta que se había ido, al mirar a Carla, ella me explico.
   -creo que alguien está celoso-
   -¿a dónde fue?-
   - se fue al jardín, vete y habla con él-
Sin más que decir, me levanté y fui en busca de el.
Cuando ya estaba cerca de la puerta, de acceso al patio, escuchó que me llaman.
   -¡eh, hermana de Marcus!- escuchó que viene de una voz, masculina, lo cual intento pasar de ella, y sigo caminando.
   -¡chiquito culo! ¿¡porque tan antipática!?- ya cansada, me volteo y ahí está, Jay, el chico que se había liado con más de medio Instituto, y claro el junto a sus amigos, no se llevan muy bien con el grupo de mi hermano y mucho menos con Marc. Son los dos grupos, de chicos más guapos, sino que Jay era todo lo contrario a mi hermano.
Ojos azules, pelo castallo oscuro, alto y un poco menos en forma que Marcus y que todos los del combo pica pica, lo que pasa que es un creído, por eso las chicas lo usan de segundo plato, cuando mi hermano no les presta atención; por eso se odian tanto.
   -¿que quieres Jay?- dije a la vez que rodaba los ojos, y me cruzaba de brazos. Se va  acercando poco a poco, a la vez que intentaba seducirme con la mirada y una sonrisa malvada.
   -sólo quiero hablar contigo- dice, sólo a penas de 5 centímetros de mi.
   - pues, lo siento tengo muchas cosas mejores que hacer, adiós- me despido, y me doy la vuelta para poder salir ya de esa puta casa, pero como no me coge del brazo y yo le gritó
   -¡no me toques!-
   -vas a ir, detras del que esta babeando por ti ¿verdad?-
   -¿de qué hablas?-
   -por favor no te hagas la tonta, todo el mundo sabe que Sam está loquito por ti, y la verdad no le falta razón, en ir detrás de una tía que esta tan buena como tú- dice sin soltarme y a la vez que me mira de arriba y abajo constante mente. Yo me quedo un poco mal, al ver que lo que me decían mis amigas era verdad, pero no tardó en reacciona.
   -¡que me dejes en paz, gilipollas! ¡madura!- en eso veo que me suelta, rápidamente. Cuando me doy cuenta veo que está mirando a alguien que está detrás de mi, lo cual me volteo, feroz mente y veo a Sam apollado, en el marco de la puerta.
   -¿la vas a dejar ya? O no ves que te está diciendo que la dejes en paz- dice Sam a la vez que lo fulmina con la mirada.
   -¿y qué vas a ser, pegarme?- en eso veo que lo está dejando mal delante de todos sus amigos, y decido reaccionar.
   -¿y tú qué vas hacer? ¿llorar hasta que alguna chica te quiera de verdad?- en ese momento me siento un poco mal, al ver la cara de Jay, que no tarda en ponerse, roja. Pasan 20s y se va de la casa junto a sus amigos.
Cuando me volteo para por fin, poder hablar con Sam, me doy cuenta de algo, y es que había escuchado, toda la conversación, lo cual había visto como Jay me decía que todo el mundo sabía que estaba detrás de mi.