Capítulo XI

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2 de Agosto de 2010, Londres.

Señorita Emma,

Me alegra que lo pasase bien. Que curioso que tenga familia en Corleone.

No se preocupe por eso, lo he superado. Simplemente espero no tener que volver a verlo en mi vida.

Le creo cuando dice que le hubiera dicho cosas peores, es usted bastante temperamental y ese hombre era capaz de sacar de quicio hasta al más paciente.

Lamento que no lo hayan aceptado, es una pena. Comprendo que quiere decir con lo de que se frutró al saber que no podría cumplir su sueño, pero no se puede decir que no lo intentó. Otros ni siquiera llegan a probar suerte. No es una tontería, y no me molesta.

En cuanto a la boda de su hermano... ¿Realmente quiere qué vaya? Es decir, no me importa y puedo ir, ya que tengo las próximas dos semanas libres. De acuerdo, iré, aunque no deja de sorprenderme que me lo proponga siquiera.

Respecto a Los Miserables, aún voy por las primeras doscientas páginas. No deseo ser borde, pero no me interesa la vida de un cura, lo que hace que el principio sea tremendamente pesado.

Un abrazo,

Jonh

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4 de Agosto de 2010, Dublín.

Querido John,

¡Gracias, gracias y gracias! Te agradezco muchísimo que vayas a venir. Sé que de primeras podía sonar un poco precipitado y extraño, pero me encantaría que vinieras. También sé que nos conocemos desde hace relativamente poco, pero a pesar de ello te has convertido en uno de mis mejores amigos.

Lo único malo de esta boda es que tendré que ir con Olivia, Lauren (la prometida de Mario) y mi madre a mirar vestidos. Yo creía que podía utilizar algún vestido antiguo que tenía por casa, pero no... Me tengo que comprar uno nuevo. La idea no me agrada, pero creo que podré soportarlo. Olivia seguro que me lleva a todas las tiendas de Irlanda...

También quiero darte las gracias por animarme con lo de mi sueño. Ya estoy mucho mejor, después de desahogarme llorando (soy de lágrima fácil) me sentí algo mejor. Sobretodo pensé que no era el fin del mundo, ni mucho menos. Y si no ha sucedido es porque ese no era mi destino.

Comprendo lo de Los Miserables, el principio era bastante aburrido, pero luego la cosa se pone más interesante, hasta que no puedes dejar de leerlo. Los personajes son tremendamente humanos y me encanta que con la progresión de la historia sus caracteres vayan cambiando. Sólo espero que te guste.

Un grandísimo abrazo,

Emma

P.D: Te adjunto con la carta la invitación de la boda y una nota con algunas indicaciones.

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