|•Podría ser peor•|

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Hacía frío, mucho frío. Era de noche en Tonwsville y la época helada ya se había apropiado de  la cuidad.

Pero Bombón no lo sentía, solamente sentía como abundantes lágrimas se deslizaban por sus mejillas, mejillas que estaban ligeramente rojizas, al igual que sus ojos y su pequeña nariz, debido a todo el llanto que había derramado.

Cubría su nariz con el extremo de su suéter color rosa palo que sobresalía de su pequeña y suave mano, pues dicho suéter le quedaba grande y le sacaba unas tres tallas más a la pelinaranja.

Tal vez y es seguro que quieran saber la razón de su llanto, y es que dicha chica ojirosa no había tenido un buen día, es más, sentía que el mundo tenía un complot contra ella.

Para empezar; en la mañana habían ensuciando su uniforme escolar con malteada de una mezcla de verduras y leche cortada, hizo lo posible por intentar quitarla en el poco tiempo que le quedaba antes de que las clases iniciaran, pero fue imposible, no se quitó, y tuvo que ir en la calle soportando susurros, burlas y críticas de las personas que la veían, su amiga Bellota tuvo que prestarle su chaqueta del equipo de fútbol para que no se mirara la enorme mancha.

En el almuerzo, su amienemiga Princesa Morbucks, le había ordenado a su escuadrón de pláticas que la llenaran de pintura en clase de arte, ganándose burlas por parte de todos en el salón, a excepción de Burbuja y Boomer que la ayudaron a limpiarse, ya que eran sus dos únicos amigos que tenían a esa clase con ella.

El suéter que llevaba puesto actualmente, era de Burbuja, ella se lo dio para que cubriera sus manchas.

La habían expulsado del club de lectura y del Consejo estudiantil "temporalmente" debido a que habían nuevos integrantes y se necesitan nuevos cupos, por lo que le avisaron en la tarde que la habían sacado, "por un tiempo".

Y para rematar, en la noche había decidido ir a tomar aire para olvidar su horrible día y todo iba bien, hasta que recibió un mensaje de su "novio" Dexter diciendo que habían terminado, no le había dado explicaciones ni nada, en la pantalla sólo se leía "Terminamos".

Se había ido a estar debajo de una casa abandonada, con la pintura desgastada y casi por desmoronarse… al igual que su vida.

Se encontraba agachada, sumergida en su celular mientras sus lágrimas iban cesando poco a poco.

— ¿Bombón? — La pelinaranja sintió una cálida mano se apoyaba gentilmente en su hombro y una masculina voz preguntaba por su nombre dulcemente.

La ojirosa volteó a la vez que levantaba su mirada para encontrarse con un pelinaranja mirándola tiernamente y con una comprensiva sonrisa en su boca.

— ¿Brick? — Susurró apenas audible la chica.

— ¿Qué haces aquí a estas horas de la noche?

— Odiando mi vida, ¿Y tú? :)

Brick liberó una risita — Compraba unas bolsitas de café. — Bombón asintió levemente con una sonrisa débil y Brick se fijó mejor en el rostro de la chica — ¿Estabas llorando? — Preguntó preocupado.

Bombón pasó rápidamente la manga de su suéter por sus ojos llorosos simulando estar bien — No, claro que no.

— ¿Entonces estabas fumando? Tienes los ojos rojos.

— Es que… — La voz de la chica se quebró — No tuve un día tan lindo.

Brick la miró ladeando su cabeza frunciendo levemente el ceño.

— Ven conmigo. — Brick empujó gentilmente el hombro de la chica mientras sonreía.

— No quiero moverme. — La pelinaranja hizo un puchero.

Brick sonrió dulcemente para después levantarla entre sus brazos.

— ¿A dónde vamos? — Preguntó con un tono aniñado la ojirosa, estaba de lo más tranquila.

— A mi casa a tomar un café. — Bombón asintió y se acurrucó en el hueco del cuello del mayor, lo que le hizo sacarle una risilla — Eres muy sentimental ¿Te lo han dicho? — Preguntó abrazándola más fuerza mientras caminaba tranquilamente, ella era ligera, a pesar de tragar las 24 horas del día, por lo que no le costaba trabajo cargarla como a un pequeño bebé Koala. Bombón asintió aún con su cabeza sumergida en el cuello del mayor, le había cautivado su fresca fragancia — ¿Estás mejor? — Bombón volvió a asentir. Brick sonrió — La próxima vez que tengas un mal día, sólo piensa en que podría ser peor. — Ella volvió a asentir, Brick tenía los suaves cabellos de la chica rozando su nariz — Hueles a chicle de fresa…

ØN€ §HØT$ 。。PPGxRRB。。Donde viven las historias. Descúbrelo ahora