I

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Lo primero que ve cuando despierta es oscuridad.

Cuando sus ojos se adaptan nota que está en una habitación que no es la suya. Tiene el vago recuerdo de haberse levantado a revisar porque había tanto ruido en su Torre si vivía solo y luego sentir un golpe en la cabeza.

La puerta se abre y entra un hombre vestido de negro. Beta. No puede obtener ningún aroma de él por lo que esta más que seguro de que es un beta.

El beta tira a un chico al suelo y luego se marcha de nuevo, escucha como cierra la puerta por fuera por lo que sabe que no va a poder salir de ahí a menos que le robe las llaves a alguno de ellos.

Un gimoteo lastimoso por parte del joven lo hace levantarse y acercarse a él. Su cabeza duele y esta seguro de que va a doler durante unas cuantas horas.

—Chico, ¿estás bien?

Cuando se termina de acercar nota el fuerte olor a cerezas que el chico tiene mezclado con miedo y un poco de enojo.

Omega. Su alfa se remueve inquieto porque tiene varias semanas de no estar cerca siquiera de un omega.

—Alejáte de mi —el chico trata de alejarse cuando él intenta tocarlo.

Quizá porque le tenía miedo.

—No te voy a hacer nada, ¿vale? Sólo quiero ayudarte.

Ve la duda en los ojos chocolate y luego asiente débilmente, él nota que tiene una herida en el hombro y la ropa manchada de sangre, por lo que quizá esta mareado y por eso no puede levantarse.

—Necesito...—el chico suspira, él le revisa la herida. No es muy profunda pero aún así había perdido bastante sangre y parecía hecha con un cuchillo, si la cuidaban bien se iba a curar pronto —... agua.

Asiente y se dirige hacia una pequeña mesa que hay en la habitación, la había notado un par de segundos luego de despertar. Toma un jarrón con agua y luego regresa con el chico.

No duda en romperle la camisa para poder limpiarle la herida aunque sea un poco.

—Esto te va a doler —presiona sus dedos sobre la herida cubierta por la camisa y el chico gime de nuevo.

Cuando termina de limpiársela, hace una venda y luego se la pone alrededor de la herida ya limpia. No es seguro que no se vaya a infectar pero bastara hasta que puedan conseguir un poco de alcohol y vendas limpias.

—Gracias —el chico agradece cuando el termina y lo lleva hacia la única cama que hay en la habitación, la tenue luz bañando su rostro.

—No es nada.

Le da un poco de agua y luego lo deja descansar, aunque probablemente no sea lo más recomendable no puede hacer nada más en ese momento.

Suspira cuando lo ve dormir.

No le calculaba más de veinticinco años y estaba seguro de igual forma que el chico aún no había salido de la universidad.

Quizá aún vivía con sus padres.

Mientras el chico durmió, él aprovechó para alejarse un poco y buscar en la habitación.

El aroma del chico era bastante fuerte y eso ponía a su alfa muy inquieto y a él muy incómodo.

El chico despierta dos horas después.

Lo sabe porque aún conserva un reloj en su muñeca derecha que espera le sirva más adelante para lo que esta planeando.

El chico luce más relajado pero aún puede oler el miedo que destila de él.

—¿cuánto dormí? —el chico se frota los ojos y luego bosteza, él se encuentra a sí mismo pensando que eso es lo más jodidamente tierno que ha visto.

—Dos horas...

—Peter —dice con voz suave —. Me llamo Peter Parker.

—Entonces, dormiste dos horas, Peter.

Agradece en su interior ya no tener que llamarlo "chico" cada vez que piense en él.

—¿Hace cuantos días estás aquí?

La pregunta de Peter lo hace pensar un poco.

—Un día.

O al menos eso cree.

Peter no responde, sin embargo se dedica a observar toda la habitación de la misma forma en la que él lo había hecho un par de horas atrás.

Desvía la vista del menor al darse cuenta de que lo esta observando fijamente.

Piensa en Pepper, seguramente la beta de debe estar volviendo loca porque no logra localizarlo para resolver los miles de pendientes que tiene en la empresa. Rhodes seguramente ya lo está buscando ya que es raro que él pase mucho tiempo sin molestarlo de cualquier forma.

El resto de sus amigos probablemente ni piensen en él.

Su vista vuelve a Peter, quién se sentó sobre el único sofá que hay en al habitación y parece estar pensando algo.

Si lo piensa bien, las condiciones en las que están no son tan malas, bueno, seguramente han habido peores. Por lo menos tienen una cama, incómoda pero con sábanas limpias, un sofá, un baño un poco equipado con las cosas necesarias para una higiene promedio y espera que sea como en las películas y les den la comida más noche/tarde.

—Pude ver un poco del lugar cuando me trajeron aquí. Estamos en lo que parece ser un bosque, no hay casas cerca y probablemente este a más de sesenta kilómetros de la ciudad más cercana —la voz de Peter lo saca nuevamente de sus pensamientos —. Hay alrededor de cuatro agentes esparcidos alrededor de la casa, no es muy grande por fuera pero esta parte es subterránea, así que no tengo ni una jodida idea de que tan extenso es.

Ahora siente admiración por Peter y ni siquiera lo conoce bien.

No cualquiera hubiese notado tantos detalles en un rato, peor considerando en las condiciones que el beta lo traía.

—¿Viste autos alrededor? ¿tienes idea de quién te secuestro?

Peter no contesta, él se da cuenta de que luce muy cansado y probablemente le haya dicho todo eso solo para recordarlo más rápido después.

Peter se vuelve a dormir no sin antes tomar un poco más de agua, él se da cuenta de que queda poca y espera que realmente les lleven un poco de comida pronto.

Despierta cuando escucha la puerta ser cerrada de golpe.

Peter no está y hay una bandeja con un poco de comida y agua en la mesa.

Su alfa se pone bastante histérico y su mente en lo único que puede pensar es en Peter. Él espera que no le vayan a hacer nada malo, lleva unas cuantas horas de conocer al chico pero está casi seguro de que el menor es bueno.

Su instinto se lo dice y nunca falla.

Come un poco deseando que le devuelvan a Peter pronto, se siente más solo sin él a pesar de que no hablaron demasiado.

ѕweeт  | starkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora