El reencuentro.

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Capítulo4: El reencuentro.Rico

-Podrías haberte informado antes-Dice Yanira retocándose lo que ella llama "contouring" delante del espejo de mi habitación-No sé, no conoces a esas chicas podría ser algún tipo de trampa para reírse de Tea, a lo Carrie. Y como sea eso seré yo la que dé el discurso el día de la coronación.

-Yanira las conozco, bueno a Alaia. Una vez fui a su cumpleaños, era una de las únicas que me caía bien, no se juntaba conmigo por mis juguetes.

-Que tierno eres cuando recuerdas tu infancia. Me hubiera gustado conocerte entonces. Todo hubiera sido diferente.

Yanira se mudó cuando tenía catorce años, al no saber quien era yo el primer día se sentó a mi lado y me trató como alguien normal, para cuando se enteró ya éramos tan amigos que no me podía tratar diferente. Según ella se había fijado en mí por el pasillo y agradeció que estuviera en su clase, por eso se sentó a mi lado.

-Es muy bonito lo que estás haciendo por esas chicas.

-Lo que estamos haciendo-Le corrijo.

-Es precioso poder ayudar a que cumplan su sueño sin importar lo que un alcalde diga.

-Sí, además siempre he querido hacer teatro-Respondo delante del armario.

Hoy es la fiesta en la piscina, y como Yanira no está invitada sale de fiesta con el grupo, el cual piensa que hemos cortado.

Daría lo que fuera por irme con ellos de bares en vez de a una de las fiestas del instituto.

-Bueno, tómatelo como un experimento social sobre el amor romántico, podrás ser un Troy Bolton medio árabe.

Suelto una carcajada enorme y pongo encima de la cama el bañador que me quiero poner para la fiesta.

-En realidad de árabe solo tengo el color de piel y alguna característica física heredada de mi madre. Porque como cerdo, celebro navidad, me vinculo a la religión Cristiana, aunque no soy creyente. No me dio tiempo a conocer nada de la cultura de mi madre, puesto que me soltó en el hospital y se largó a Marrakesh a dirigir su cadena de hoteles.

Yanira se asoma por la puerta del lavabo con su cara comprensiva de "¿quieres hablar de tu madre?".

En realidad, no sé mucho de ella, mi padre solo me dijo que era árabe, de Marrakesh, de buena familia y que se tuvo que ir a dirigir una gran cadena de hoteles. Que no se quedó conmigo porque allí un hijo fuera del matrimonio era un pecado y los dos corríamos peligro. Pero empiezo a creer que hay algo más detrás de esa historia, puesto que llevo dieciocho años esperando a que ella vuelva a conocerme y nunca ha aparecido.

-Ya sabes que me encanta ser árabe, lo puedo utilizar a mi conveniencia cuando quiero, como en las cenas familiares con la madre súper racista de mi hermano, son más divertidas así. Menos mal que mi hermano no ha salido a ella.

Yanira se ríe mientras niega con la cabeza y vuelve al espejo.

Saco una camisa de manga corta y unas chanclas verdes del armario, ese será mi "outfit" del día. En realidad lo eligió Violet anoche por Skype revisando una a una cada pieza de ropa que contenía mi armario. Espero que Tea no haya tenido que sufrir eso, ella tiene más gusto para lo que "está de moda" que yo.

Cuando me quito la camiseta de dormir, el móvil, conectado al cargador encima de mi mesita, empieza a sonar. Me acerco a él y veo en la pantalla un mensaje de Tea por el grupo de "Operación: Princesas".

"Ya estamos en la fiesta, y parece que haya llegado Beyonce en vez de yo

DÓNDE COÑO ESTÁIS???".

OPERACIÓN: PRINCESASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora