Hermanos Primero (One Shots) TMNT

Adios

Y el Sol sabía que se había equivocado, porque aunque estaba rodeado de súbditos, su hermana Luna ya no estaba a su lado.

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Estoy cansado, siempre ocurre lo mismo.

Las personas se equivocan cuando dicen que el ser humano es el único animal que cae en la misma piedra dos veces.

Nosotros no somos humanos y caemos en la misma piedra, una y otra vez.

Siempre es a la misma hora, como un reloj de cuco.

Siempre me resultaron curiosos esos relojes.

Es como el marcapajinas de nuestra historia.

La diferencia es que nosotros no pasamos al siguiente capitulo.

Nunca lo hacemos.

Me he agotado.

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Pensé que esa noche iba a ser tranquila, recorreríamos un rato la ciudad y volveríamos a casa, esa noche echaban una de las películas favoritas del enano y nos había pedido quedarnos los cuatro a verla, últimamente habíamos estado un poco separados los unos de los otros, pero había sido por puro agotamiento, el maestro-la verdad seguía sin acostumbrarme a que Leo fuera el jefe, pero el viejo lo había puesto al mando hacía unos cuantos de meses y había decidido irse de viaje a no se donde para hacer algo de meditaciones y cosas de esas que le gustan a el- se había puesto un poco paranoico con una pesadilla y nos había hecho entrenar el doble, no era la primera vez que pasaba solo teníamos que esperar un par de semanas y todo volvería a la normalidad.

El caso es que nos había convencido, habíamos conseguido un par de paquetes de palomitas y teníamos pizza de sobra y aunque nos ibamos a pasar la noche viendo Tod y Toby, estaba bien.

Todo estaba bien...

-¡Raphael vuelve aquí!

Ya era la cuarta vez que me llamaba a voces, acababamos de regresar de la patrulla y lo único que quería era acostarme en mi hamaca y dormir diez horas, la verdad me hubiera gustado pegarme un golpe y desmayarme como les sucedio a los de pequeños, por suerte los muy idiotas solo estaban asi por el cansancio y un pequeño susto que les habían dado.

La cabeza me retumbaba, parecía que me iba a explotar y aun así seguiste.

No entendía porque tenemos que pelear por esto siempre, sabes que soy tan cabezota como tu y al igual que tu no podías dejar de lado a nadie que consideraras de tu familia, yo tampoco podía hacerlo.

-¡Te he dicho que vengas aquí!-gritó el intrépido, sigo preguntandome si no le dolía la garganta llevava gritandome desde dos manzanas atras.

-Y yo te he dicho que hablamos mañana, tu estas cansado y yo estoy cansado, si quieres te digo una solución para ese problema pero estarías llamandote tonto a ti mismo.

Está bien reconozco que estaba un poco irascible, pero hemos repetido esta discusión hasta la saciedad, y para que yo no quiera pelear con el intrépido imaginaos como tendríamos que estar.