puta madre no te enamores

tres

Empezamos la semana mal. Con el chico que me gustaba (se llama javier plz) bueno el me hablo por whatsapp todo el fin de semana, yo estaba aburrida.

Pues el lunes llego un compañero nuevo para mi ( antiguo estudiante de la escuela) era el chico mujeriego el esteban. Al primer instante en que lo vi me parecio simpatico y hablamos un poco.

Bueno los dias fueron todos iguales con el javier saliamos los primeros 2 o 3 dias despues le decia que no podia por abc motivo y pues me iba a mi casa a dormir.

La segunda semana llego el mejor amigo del javier el erick el cual no me parecio muy simpatico ya que estaria mas tiempo con el que con migo.

*se me olvido decirles que durante toda la semana estube con el javier y deje de lado a mis amigas las cuales se enojaron con migo y actualmente me caen muy mal y son malas conmigo*

Con el esteban establecimos una amistad nos caiamos muy bien el se sentaba conmigo.

Un dia el javier me dijo por whatsapp que si me traia una hojita de marihuana ( yo no fumo pero igual me la trajo) El javier se enojo conmigo porque penso que les dije a todos que la hoja de marihuana la trajo el y se iba a meter en problemas. A mi me parecio una actitud muy afeminada y le dije:

-yo no le he dicho a nadie

-¿y quien mas iba a ser?

-¡nose! ¡yo no fui!- ¡pero que inmaduro! - talves fue otra persona

No me respondio, estaba enojado. Pues yo le di mi hojita de marihuana al esteban asi que ya no es mi problema.

El javier no me hablo mas, estaba muy enojado. A mi no me intereso. El esteban se sento conmigo todos los dias ya que noto que nadie me hablaba. Mis amigas se enojaron conmigo por dejarlas solas y el javier practicamente termino lo que nunca empezo.

El esteban fue un buen amigo, igual estaba triste. Estaba sola y el me animaba "obligandome" a jugar a dumb ways to die ese juego es la puta hostia. La verdad es que resulto y me alegraba mucho.

Nos hicimos muy buenos amigos hablabamos todos los dias pasaban los meses y el javier se sentia tambien solo y volvio arrepentido. Se sentaba al lado mio, yo no lo tomaba en cuenta. Se aprovechaba y me tomaba la mano le dije:

-¡sueltame!

Se puso rojo, todos me escucharon.

A mi me importo un carajo.