Un nuevo comienzo [Banana fish]

Cap VI

Luego de que Ash, Shorter y Sing planearan como es que rescatarian al japonés sin que saliera herido prosiguieron a llevar el plan acabo, fueron al lugar de la cita, el pelimorado junto con el pelinegro se quedaron atrás dejando ir solo al rubio, éste al llegar vio a tres hombres que rodeaban al japonés, probablemente había más hombres escondidos, el pelinegro al ver al rubio llegar sonrió ligeramente

—¡Ash...! — grito y de inmediato alguien le cubrió la boca

—¿Tan importante es éste chico para ti? — cuestionó uno de los secuestradores —Pensamos que no llegarías, mucho menos solo, pero bueno— le hizo la señal a uno de sus compañeros y éste fue a inspeccionar al rubio, aprovechando para tocar entre sus piernas, el rubio sintió alta repugnacion al sentir la mano del contrario posarse sobre su miembro

—No viene armado— exclamó satisfecho

—Bien... ¿Quieres que nos divirtamos con tu amigo o contigo o los tres? —

—Dejalo ir, ese era el trato— respondió molesto

—Supongo que nos divirtiremos contigo— un hombre comenzó a desatar al japonés, éste al estar libre corrió a los brazos del rubio

—Ash... — murmuro aún preocupado

—Todo va a estar bien — susurro a su oído —Vete por la derecha— separó al pelinegro y sonrió con confianza

—¿Que...? — pregunto confundido

—Solo vete, escuches lo que escuches no voltees ni regreses— dijo para por fin soltarlo y dejando que se fuera. El japonés aún extrañado fue como el rubio se lo ordenó y se topo con el pelimorado sonrió ligeramente y el contrario colocó un dedo sobre sus labios indicando que guardara silencio

—Supongo que esta es la señal — miro a lo lejos e hizo una señal hacia Sing éste asintió y procedió a acercarse al lugar con sigilo —Eiji, quédate aquí, nosotros iremos por Ash— dijo en voz baja y el japonés asintió, observo las acciones de los contrarios

—Deberíamos de irnos a otro lugar más privado— comentó uno de los hombres mientras de acercaba al rubio con perversión reflejada en su mirada. El rubio desvió la mirada con disgusto y formó una mueca —Tomaré eso como un "si"— rodeó la cintura del rubio y lo apego a él, el contrario blanqueo los ojos no pudo evitar que varios recuerdos sobre su infancia pasaran por su mente, comenzaron a caminar cuando aquel hombre que abrazaba al rubio recibió un balazo en su cabeza, Ash de inmediato giro su cuerpo al lado opuesto y corrió hacia el pelimorado éste al ya tenerlo un tanto cerca lanzo el arma del rubio, pero éste no la pudo alcanzar debido a que una bala había rozado su pantorrilla dificultando así su carrera cayó al suelo pero sin dejar de avanzar fue por el arma

—¡Ash! — grito el japonés desde su posición, estaba preocupado por lo que le había sucedido al rubio, quería ir con él pero eso solo dificultaría el plan de estos, si bien la herida del rubio ya era un atraso el podría empeorar la situación, solo pudo cruzar mirada con el contrario trato de mostrar la mayor determinación posible y a la vez esperanza, el rubio un tanto aliviado tomó su arma y comenzó a corresponder el ataque mientras que el pelimorado lo ayudaba a levantarse, lo apoyó en su hombro y comenzaron a retroceder con rapidez, solo quedaban un par de enemigos así que fueron a donde se encontraba el pelinegro, dejando así el resto a Sing y a los de su pandilla —Ash... — lo abrazo mientras lágrimas caían —¿Estas bien? — checo la pierna del rubio

—Eiji... — tomó el rostro del contrario mirándolo a los ojos, sonrió —Estoy bien... Tranquilo, solo fue un roce— con sus pulgares secó las lágrimas del japonés

El pelinegro correspondió la sonrisa ya más aliviado, soltó un supiro mientras se relajaba —Tenemos que ir a un hospital—

—Eso será problemático, solo hay que vendar y en un par de días estaré bien— contradijo la propuesta del pelinegro

—De acuerdo entonces hay que regresar lo más pronto posible— se levantó

—Sing nos alcanzará allá— comentó el pelimorado —Parece que ya acabo — miro la situación, vio como el último sobreviviente cayó al suelo inerte

—Bueno que venga con nosotros — respondió el japonés, se encontraba ansioso por ver de nuevo a aquel chico

—¡Eiji! — se escucho la voz del pelinegro y el japonés sonrió

—¡Sing! — extendió sus brazos para así poder envolver al menor, este sin duda alguna fue a abrazarlo

—No puedo creer que estés aquí— murmuro el menor alegre

—Has crecido— comentó el japonés animado

—Bueno, hay que irnos chicos— interrumpió el pelimorado —Has mejorado mucho, Sing— alboroto el cabello del mencionado con una sonrisa, se pudo notar un ligero rubor en las mejillas de éste al escuchar aquel elogio y por la acción del contrario

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Hola criaturitas :3

El capítulo de hoy estuvo un poco corto pero espero lo hayan disfrutado. Creo es todo lo que tengo que decir :b

Bueno, nos vemos en el siguiente capítulo c:

L@s quiero~
Bye~