Un nuevo comienzo [Banana fish]

Cap IX

—... Aaa~... No se que decir— desvió la mirada nervioso y con sus mejillas levemente ruborizadas

—No debes responder ahora si quieres... Puedo esperar — sonrió tranquilo y continuó caminando, pero el pelinegro lo tomo del brazo deteniendolo

—No, no quiero que esperes, es solo que me desconcertó un poco que hicieras esa pregunta tan de repente — soltó un par de risillas nervioso y suspiro, soltó el brazo del rubio —Ash... Yo, estoy encantado de intentar algo contigo, espero ser suficiente para ti y poder ofrecerte todo lo que este a mi alcance— el rubio repentinamente lo rodeó con sus brazos

—Tonto, yo soy el que debería decir eso, tu me has ofrecido tanto que no tengo palabras para agradecerlo, solo espero darte todo lo que te mereces... — lo apretujo entre sus brazos

—Ash... — dejó su maleta a un lado y correspondió aquel abrazo, tenía una pequeña sonrisa dibujada en sus labios —Bueno, vámonos solo estamos bloqueando el paso— comentó y se separó del rubio lo miro por unos instantes y beso su mejilla

—Si— sonrió y tomo la maleta del pelinegro, sostuvo la mano del contrario, eran tan cálida, suave y delgada, se sentía tan diferente cuando estaba con él. Caminaron hasta la casa del rubio, al llegar comenzaron a acomodar las cosas tras ello el pelinegro propuso a que fueran a desayunar, el rubio aceptó y fueron a un pequeño restaurante —Eiji, estaba pensando que también debería trabajar para ayudarte con la renta del Departamento... — comentó mientras daba un sorbo a su jugo

—Mmm de hecho quería comprarlo... — dejó de comer para poder hablar a gusto con el rubio

—¿Comprarlo? — pregunto sorprendido —Yo diría que solo rentaramos, ya que solo estarás aquí medio año —

—Tienes razón... Bueno hay que ir viendo algunos departamentos en lo que entro a trabajar y en lo que tu consigues trabajo—

—Muy bien, hoy empezamos a buscar departamentos, ¿te parece? — posó su mano sobre la del pelinegro y sonrió animado

—¡Si...! — aceptó con emoción y continuaron comiendo, tras terminar de comer y pagar la cuenta, optaron por comenzar a buscar el departamento ideal para ellos, dentro de en precio accesible pero lo suficientemente amplio. Luego de visitar lo edificios con departamentos disponibles, cerca del trabajo del pelinegro y de varios restaurantes alrededor, regresaron a su actual casa.

—¿Que departamento te gusto más? — pregunto el rubio con curiosidad

—El penúltimo, es espacioso y dentro de nuestro presupuesto, ¿no crees?, ¿a ti cual te gusto? —

—El segundo tiene lo que necesitamos, una recámara, sala, baño y cocina, y un lugar donde colgar nuestra ropa —

—Cierto, pero el departamento esta en el tercer piso, así que tendríamos que subir tres pisos más para llegar a la azotea, y a los vecinos al parecer no les agradamos... — comentó nervioso y recordando como varios de ellos los habían visto con disgusto

—Bueno, eso si, pero el Departamento que tu dices esta en una zona un tanto peligrosa y no quisiera que te ocurriera algo—

—Es un área que conoces y además cerca de ahí vive Shorter—

—Si... Bueno, al parecer tienes mejores puntos, aun tenemos unos días para decidir—

—Si, de todas maneras tengo la tarjeta de los encargados de cada uno de los edificios que visitamos —

—Bueno, pues hay que descansar un poco... Más tarde iré a buscar trabajo— se acercó al pelinegro y lo abrazo por la cintura dio un pequeño beso sobre sus labios y sonrió, el pelinegro ruborizado ante tal acción correspondió su sonrisa

—Vale, pero... Quédate hoy conmigo, ¿si? Mañana puedes buscar desde temprano— colocó sus manos sobre los hombros de este

—¿Seguro? —

—Si~— le sonrió dulcemente —Solo vayamos a la cama o veamos una película, quiero pasar tiempo contigo antes de que entremos a trabajar—

—De acuerdo— lo apegó más a él y recargo su barbilla en el hombro del contrario, suspiro y se alejó —Veamos una película—

—¡Bueno...! - exclamó animado

Días después...

—Ash... Despierta, ya me voy al trabajo— se escuchaba la voz del japonés entre los sueños del rubio

—¿Eiji...? — pestaño un par de veces y talló sus ojos

—Hoy es mi primer día y quiero llegar puntual — comentó —Te dejé el desayuno en la cocina, calientalo cuando despiertes bien— completo y se inclinó para dar un tierno beso sobre sus labios —Me voy— se incorporó y decidió irse, pero el rubio sostuvo su mano

—Suerte y se que te ira bien— sonrió aún adormilado

—Gracias— acarició su mano y se fue —Te quiero— grito antes de salir, con paso apresurado tomó un taxi con dirección a la empresa, al llegar pagó y bajo, ingresó al edificio y en recepción de ofrecieron a guiarlo en lo que sería ahora su área de trabajo, lo llevaron con su jefe y este le dio sus primeras órdenes, las horas transcurrieron y su turno termino, su jefe lo felicito por su gran empeño y por fin salió de su primer día, al salir del edificio se topo con una sorpresa —¡¡Ash!!—exclamó emocionado y corrió a abrazarlo —¿Como supiste donde trabajaba? —

—Shorter me dijo— respondió alegre por como lo tomó el contrario, lo abrazo con calidez y dulzura

—Ya veo— aún sonriente se separó del rubio y como saludo dio un corto beso sobre sus labios

—¿Como te fue? — pregunto con un ligero rubor en sus mejillas tras recibir dicho beso

—Bien, estuvo tranquilo—suspiro —Aunque se que no será así siempre —

—Solo será medio año, ¿cierto? — comenzó a caminar

—Si, eso es lo bueno— recordó algo —Por cierto, cuando me secuestraron ya no termine de hacerte la pregunta— se detuvo y el rubio lo miro

—¿De que se trata? —

—¿Vendrias a vivir, ahora si, conmigo a Japón para iniciar tu nueva vida a mi lado y permitirme sanar tus heridas? — cuestionó nervioso

(Las imágenes no tienen casi nada que ver, pero pos me gustaron :v)