La Culpa de un Bizcochito

Capitulo 1

Lucia POV

—Che, sabés donde queda el apartamento 417?— Le pregunté a una que estaba parada en el pasillo.
—¡Ese e' mi cuarto!— Me dijo, tenía acento raro, se notaba que no era de aca, bue no se que esperaba si estaba con todos lo estudiantes internacional.
—¿Enserio? Que bueno, ¿vamo' buscarlo entonces?

—Si, vamo. ¿De donde eres? Tu acento es Argentino, ¿no?

—Si vamos a ser amigas por favor no me insultes. Soy Uruguaya.— Le digo exageradamente.

—Ah por eso estas con lo estudiantes internacional.—

—Si, ¿y vos de donde sos? ¿Caribeña?—

—Dominicana—
—No quise adivinar por las dudas. Más vale, que los Puertorriqueños son una mierda— Ella se ríe y vamos para nuestro apartamento.
—Ni me di cuenta, ¿cual es tu nombre? Yo soy Lucia—

—Soy Alexandra, un placer.

—Igual —Sonrio. De repente llegamos al apartamento y las dos tenemos una valija cada una. Cuando entramos a nuestro apartamento, vimos que era medio chico pero no esperaba mucho, compartimos un cuarto, baño y tenemos una sala y cocina combinada. Era muy lindo.

—Vo' ya re paso almuerzo, querés una merienda. Mi madre lo metió en mi valija como fue un vuelo cortito—

—¿Que tienes?

—Apronto unos mates, espero que nunca lo has probado. Y tengo un par de bizcochos

—No he probado mate. Se ve que es muy popular. Tengo dos preguntas.

—¿Que?

—Primero, ¿que es una valija? ¿Segundo como llevaste más de un bizcocho en un avión?

—Eso, la bolsa, ese coso, yo que sé, ¿como le dicen ustedes?— Digo poniendo agua a calentar.

—Maleta.

—Ah, se me olvido esa. No entendi la segunda— Le digo re confundida. Una cajita de bizcochos que dificil es entender. Saco la cajita y los ojos de ella se agrandan.

—¿Esos son tus bizcochos?

—Si que pensate, boluda— sonrió. Ella busca en su celular una foto y me muestra una torta.

—Eso es una torta— me rio —Imaginate llevarte uno

—Por eso no te entendí— dice guardando su teléfono.

—Bue, vas a tener un tiempo interesante acá con los malentendidos. Por lo menos hablo un poco de Argentino.

—La verdad que si— Cebo el mate y le doy el primero a ella.
—Ojo, que te pela— Le digo el segundo que la bombilla le toca la boca y casi vuelca todo. —A la mierda, ¿estas bien boluda?—

—No me dijiste que estaba tan caliente.—

—Bue, te dije que te pela. Menos mal que no lo hervi—

—Menos mal— se ríe mientras que le agarro la botella de agua que compre en el aeropuerto. Esto iba ser una amistad muy interesante.

Alexandra POV

Lucía y yo no las pasamos hablando por unas cuantas horas hasta que se me pego un sueño fuerte.

-—Bueno, Lucía un placer bochinchar contigo pero tengo un sueño del diablo así que good night-- dije, yéndome hacia mi cama.

—Buenas noches— dijo, también levantándose para acostarse. Me cae bien esa niña, ojalá que no me enoje, pensé y me dormí.

A las 2:00 am, me levanté a mear cuando me di cuenta del olor a café que había. Caminé hasta que descubrí Lucía, ahí parada, colando café como si nada.

—Que rico que huele Bustelo— dije. Ella saltó de sorprendida.

—La concha de tu madre, Alexandra, me diste un infarto— se río y se volteó a buscar una taza

—Que tu quieres, que yo me ponga una campana, oye eso— me reí, ya se me quitaron las ganas de usar el baño.

—¿Querés café?— Me preguntó.

—¿A esta hora? ¿Tu ta loca?— lo pensé —Sí, porque no— le contesté. Ella asintió la cabeza y sacó otra taza, preparo el café y no sentamos a tomarlo.

—Quieres suspiritos, yo traje de la República porque no sabía si se vendían acá— le pregunté. Le vi la cara de confundida. Tragó y me preguntó:

—Como que trajiste suspiritos, que son esos?— Saqué la bolsita y le enseñé —Esos son merengues, wacha. De donde vino suspiritos?— preguntó, no creyéndome ni por un momento.

—Ay que se yo, quieres o no— dije suspirando, me respondió que sí y comimos.

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Hola gurises, soy una de las autoras, solo dejo este mensaje para avisar que este capitulo sirve como tipo introducion y en el proximo empieza la historia, espero que les guste! -Uru