New Beginnigs | Albalia

Capítulo 3

Nunca entenderé por qué tardo tantísimo tiempo en arreglarme. No importa si ya he decidido qué ponerme, o qué pintalabios voy a llevar, siempre encuentro algo que no me convence que hace que me retrase. Y aparte de eso estoy nerviosa. Es sábado por la noche y por lo visto todos los sábados por la noche se sale. O eso dice la Mari. Su novio Pablo es DJ en un pub súper chulo y no tenemos que pagar entrada, así que allí es donde se supone que debería estar yo desde hace 20 minutos. Sin embargo estoy dando vueltas por mi casa buscando las dichosas llaves que antes dejé en algún lugar pensando “si las dejo aquí las encuentro fácil”. Es la primera vez que salgo con ellos, y aunque les conozco del trabajo y sé que son geniales, tampoco hemos tenido mucho tiempo de hablar y me da un poquito de vergüenza. A María la he visto todos los días, y con Afri y Sabela he coincidido bastante, pero a Miki solamente le he visto una vez y a Joan aún ni le conozco porque ha estado de vacaciones. Creo recordar donde he dejado las llaves cuando me suena el móvil, asique las cojo mientras respondo.

- Te juro que estoy saliendo por la puerta Mari, pillo un taxi y en nada estoy allí lo juro.

- Más te vale porque ya estamos todos aquí, avísame cuando llegues y salgo a por ti, que es tu primera vez y el portero aún no te conoce.

Le doy las gracias a María y me meto en el taxi. A pesar de estar nerviosa, también estoy bastante contenta de haberles conocido. Nunca me ha gustado mucho estar sola y aquí no conozco a nadie más que a ellos. Me encuentro a Sabela esperándome en la puerta y la saludo con un abrazo.

- Vamos para dentro, que la Mari ya ha pedido por ti y por todos tus compañeros.

Lo paso increíblemente bien. Todos son incluso más geniales que en el trabajo, incluyendo Miki y Joan. En seguida me tratan como a una más del grupo y no me siento incómoda en ningún momento. Reímos, bailamos, y también bebemos un poco más de la cuenta.

- Afri, voy a salir a fumar y así me da el aire – por un momento creo que no me ha oído porque me mira con el ceño fruncido

- Hostia puta peña – dice gritando – que la Alba fuma, con la cara de no haber roto un plato que tiene – todos ríen a carcajadas y yo me encojo de hombros, riendo también.

- ¿Vas a salir? – pregunta Miki, y yo asiento – voy contigo.

Salimos de allí y empiezo a encontrarme mejor en cuanto piso la calle. La verdad es que estaba un poco mareada. Hasta el punto de que acabo de empezar a reírme sola.

- ¿De qué te ríes? – Me pregunta Miki con una expresión divertida

- No sé, me lo estoy pasando genial, estoy contenta.

- Y borracha.

- Si, eso también.

- Todos nos alegramos de haberte conocido Alba, nos encanta que te unas a nosotros, vamos a hacer muy buenas migas ya verás.

Estamos un rato hablando mientras fumamos y mientras mi borrachez expresa varias veces lo feliz que soy por tener unos amigos tan guays y lo celosa que Marta se va a poner cuando le cuente que he salido de fiesta con gente que acabo de conocer en mi segundo fin de semana en la cuidad.

Volvemos dentro en el momento auge de perreo, o de perreo máximo cómo oigo a África gritar, y nos ponemos a bailar como locas. Decido que es hora de irme a casa cuando veo que empiezan a encender las luces del local, negándome al intento de María de que nos fuéramos todos de after a su casa.

No sé ni cuántas horas he dormido cuando cojo el móvil para encontrarme con una cantidad de fotos ridículas de la noche anterior, y no puedo evitar sonreír.

Mari:
Sois todas unas zorras ahí perreando sin mí
Donde se supone que estaba yo

Afri:
Pues o meando
O pidiendo más alcohol, no hay más alternativas

Miki:
Es lo único que haces Mari

Sabela:
Y pedirle a Pablo canciones que sólo conoce ella

Joan:
No sé cómo te aguanta el pobre

Sabela:
Jajaja

Mari:
No sabía que este grupo era para meterse conmigo
Si queréis me voy

Afri:
No hace falta ya tenemos uno sin ti

Miki:
JAJAJAJA
Afri tía que eso es secreto

Mari:
Sois unos cabrones
Os odio

Sabela:
Que no Mari que en el fondo te queremos, no te enfades

Alba:
Pobre Mari encima que nos deja entrar de gratis
Lo pasé genial anoche chicos

Mari:
Gracias Alba por tu apoyo y sensatez
Sed como Alba

Miki:
Si la verdad que la Alba anoche sed tenía
La que me diste cuando salimos a fumar

África:
Tú te callas que te caíste subiendo las escaleras

Sabela:
Jajajaja
Que sería de la vida sin esos pequeños momentos

Joan:
Un muermazoooooo
Como lo que se viene el lunes
¿Quiénes trabajamos?

Alba:
Yo por la mañana, contigo no?

Afri:
Sí, tú y Joan
Y por la tarde la Sabe y yo
El puto Miki tiene dos días de resaca

Miki:
Besisssss 😘

Alba:
Jajaja
Pues el lunes nos vemos chicuelos

Dejo el móvil porque sé que no van a parar nunca, y yo ya he planeado estar todo el día en la cama sin hacer nada que no sea levantarme para abrirle la puerta al repartidor de pizza.

Hablo con Marta por Skype durante horas y me pongo un poco triste al colgar, la echo mucho de menos, tengo que planear algo cuanto antes para que venga a verme, me hace mucha ilusión que conozca el ambiente y a los chicos. A veces siento como si necesitara su aprobación, como si me sintiera más segura sabiendo que apoya todo lo que hago. Intento animarme pensando que la veré pronto y me veo una peli antes de irme a la cama para empezar una nueva semana.