Primer día de clases - Primera parte

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Es lunes son las cinco de la mañana y ya Jesen me está despertando para que me arregle.

Odio las clases, en realidad, odio muchas cosas, pero lo que más más odio es el primer día de clases siempre lo he odiado, es súper incómodo y todo el mundo te mira como un experimento de ciencias o el blanco perfecto de burlas y ninguna de las dos me van muy bien, si me miran mal me incómodo y miro peor, y si me tiran de blanco de burla lo más posible es que alguien termine con un hueso roto y no quiero eso el primer día de clases.

-Dúchate rápido-me dijo Jesen- Y por el amor de dios no dures tres mil años vistiéndote. Tu uniforme está en tu habitación ve a buscarlo.

- ¿Uniforme? ¿¡Usaremos uniforme!?

-Si Leiya usaremos uniformes como estudiantes normales ¿Por qué te sorprender tanto? -Dijo entre risas.

-No lo sé, ¿será porque en el anterior colegio no teníamos que usar uniformes? - dije irritada- ¿Por qué aquí sí? Y además los odio, solo espero por lo menos sea bonito.

-No sé lo que en ti se refiere a bonito, pero yo solo te espero en veinte minutos abajo o si no te dejo.

- ¡Que indignación! ¿Me dejaras sola el primer día de clases?

-Si no mueves tu maldito trasero sí.

-ok, ok, no durare, que racha contigo.

Ya en mi cuarto me duche rápidamente y busque el dichoso uniforme en el closet, que de seguro la tía Ross lo había puesto allí.

Oh May gatito, esto debe ser una broma, ¿Cómo quieren que salga a algún sitio con esto?

Puse el uniforme en la cama, tenía una camisa manga larga blanca y una falda a cuadros entre amarilla y negra, con corbata ¿Con corbata? No es, muy usual un uniforme con corbata.

De mala gana me puse el uniforme y me puse las botas grunge, junto con las medias a un lado, creo que voy a primaria eso o el director es un pervertido que le gusta ver a las colegialas estilo cosplay, esto es un horror, en definitiva, este será un día largo y agotador.

Baje las escaleras directo a el comedor, la verdad casi nunca tengo hambre en la mañana, pero más tarde sé que me dará, así que me preparo un sándwich rápido y los guardo para comérmelos luego.

Tome un vaso de jugo de la nevera y me lo tome mientras Jesen terminaba de comer, lo único que saque de estos dichosos uniformes es que puedo gozar de ver a mi hermano con chaqueta y corbata a diario sabiendo que el odia los trajes.

-Y que te parecen nuestros uniformes hermanito -dije conteniendo la risa.

- ¡Cállate quieres! no diré ni una sola palabra respecto a los dichosos uniformes – dijo mientras se desajustaba la corbata.

-ok, ok, pero que sensible – dije con una sonrisa de oreja a oreja.

-Oye ya vayámonos mejor, que no quiero llegar tarde – dijo él.

-Vamos - le dije poniéndome el bolso.

-Oye Leiya

- ¿dime?

- ¿Qué tal si esta vez tratar de romper tu récord a no golpear a nadie por todo el día de clase o que te dure por lo menos hasta después del descanso?

-Hare mi mejor intento -le dije mientas le guiñaba el ojo- depende de cómo se comporten los estúpidos de esa secundaria.

-Ash, presiento este será un día muy largo – Dijo mientras resoplaba.

-Oye tú no te hagas el santo que tú también te tienes que controlar, te recuerdo la última vez fuiste tú quien golpeo a ese chico hasta dejarlo hospitalizado o ¿no?

de vuelta al juego/nada sera igual que antesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora