—¡Me explicas todo, ahora! — Me ordenó Cassidy sentándose en nuestra mesa de comedor con su bandeja llena de comida. Sigo preguntándome como es que come tanto y no engorda. Ah si, ella va al gimnasio diario y yo no.
—¿El qué? — Me hice la desentendida.
—¡Joder! Que dónde estabas en Historia — Exclamó exasperada.
—Por ahí — Me encogí de hombros calmada y le di una mordida a mi sandwich de queso.
—¿Por ahí donde? — Rodeé los ojos.
—Fui a Starbucks a desayunar porque no me dió tiempo, además no quería escuchar a la maestra regañandome por no hacer la tarea. Su berruga me aterra — Hicé mueca de asco.
—¡Jade! ¿Qué no ves que estoy comiendo? — Señaló a sus papas fritas con queso.
No pude evitar carcajear, recibiendo una mirada de pocos amigos por parte de Cassie — Ya, lo lamento — Dije y le dí otra mordida a mi sandwich.
—Hola guapas — Levanté la mirada para encontrarme con el tonto de mi mejor amigo y hermano mayor de Cassie.
—Hola Ed— Sonreí.
—Hola engendro — Lo saludó Cassidy.
—¿De qué hablaban? — Tomó asiento junto a mi.
—Nada interesante — Me encogí de hombros y le dí una ultima mordida a mi sandwich.
—Jade no fue a la primera hora de clases.
—Uh, chica mala. ¿Por qué?
—No hicé la tarea — Dije y me acabé de beber mi bebida de un sorbo.
—¿Por qué el chico guapo de aquella mesa no para de mirarte? — Fruncí el ceño.
—¿Quién? — Cassidy señaló a la mesa que se encontraba al lado de la nuestra.
¿Por qué jodidos Justin tiene su mirada fija en mi?
—Oh, es Justin.
—¿Justin qué?
—No me sé su apellido, apenas lo conocí en la fiesta de el sábado.
—¡Uy! ¡Le gustas! — Chilló emocionada.
—Cassidy, tienen tres días conociéndose. ¿Cómo pretendes que le guste? — Dijo Ed.
—¡Amor a primera vista! — Suspiró como tonta enamorada.
—Ed, debes prohibirle las telenovelas.
—¡No! ¡Es cierto! ¡Mira la forma en que te mira! — Chilló — ¡Eso es amor!
Fruncí el ceño —Yo me voy a clases — Tomé mi mochila y me dirigí a mi salón.
Ultima hora de clases.
Caminé hacia el fondo del aula para sentarme en el único asiento que se encontraba vació,al lado de Justin.
Suspiré y saqué mis útiles.
—¡Buenos días clase! — Se escuchó un desganado "buenos días" de parte de todos los estudiantes.
La maestra dijo las cuatro palabras que mas odiaba en toda mi vida — ¡Formen grupos de par! — Chilló entusiasmada.
Una oración tan simple pero a la vez tan detestable. Toda mi vida he detestado los grupos porque por alguna razón siempre me tocaba el peor compañero. El que nunca hacía nada, el que era muy mandón, el que siempre faltaba, el que era estúpido. Si me pongo a contar a los horribles compañeros que he tenido en mi corta vida no termino hoy.
—Su compañero será la persona que tienen a su lado — A mi lado se encontraba Justin, con una expresión de fríaldad.
¡¿Ven?! Esta vez me tocó con el fumador compulsivo/aburrido/molesto/frío compañero.
—El proyecto consiste en que tienen que conocer a fondo a su compañero. Su lugar favorito, comida favorita, hobbie, etcétera. La próxima semana tendrán que venir aquí a decir todo lo que han aprendido de su compañero.
¿Qué clase de proyecto era este? Es lo más estúpido que he escuchado en toda mi vida. Y apuesto que si fuera Justin estuviera diciendo "Mi hermana menor tiene tantos años y le ponen a hacer eso en la escuela". Pero, como no soy el y no tengo hermana o hermano menor digo que este es un proyecto estúpido.
Ni siquiera tienes que pasar tiempo con Justin para saber cómo es el. Su hobbie es fumar, detesta a las personas alegres, su comida favorita es el tabaco — que no sé si cuenta como cómida — tan solo tengo que averiguar que tipo de música le gusta.
—¿Comenzamos ahora? — Le pregunté y el se encogió de hombros.
Suspire. De todos mis compañeros de clase este sería el mas molesto de todos.
—¿Puedes parar con tu actitud de "me importa una mierda todo"? — Rodeé los ojos.
—En realidad me importa un mierda todo, así que me importa una mierda sacar malas calificaciones por no hacer el proyecto.
—Pues a mi si me importa, así que lo haremos.
—¿Hacer el proyecto implica pasar más tiempo contigo?
—Creeme yo tampoco quiero pasar mucho tiempo a tu lado.
—No lo demostraste cuando me invitaste a desayunar — Lo miré indignada.
—Cabrón — Musité y me crucé de hombros mirando hacia el frente.
—Ya, no te enojes. Empecemos con este proyecto — Lo ignoré — ¿En serio estas enojada? — No lo estaba mirando, pero sabia perfectamente que en su rostro había una sonrisa burlona a punto de tornarse en una carcajada — Solo estaba bromeando ¿Vale? — Rodeé los ojos.
—Ya, empecemos — Lo miré.
—En realidad no tienes que decirme tus gustos, de tan solo mirarte lo sé.
—A ver ¿Cuáles son mis gustos?
—Te encanta el rosado, eres positiva, perseverante y molesta. Te gusta pretender que eres una niña, te gusta leer y apuesto toda mi vida a que eres otra frustrada más con One Direction.
—Haz fallado en casi la mayoría — Reí entre dientes. — No me gusta el rosado, de hecho mi color favorito es el amarillo. Soy positiva y perseverante, pero no molesta. Tú lo eres. No pretendo que soy una niña y no me gusta One Direction, de hecho mi artista favorito es Ed Sheeran.
—Apuesto a que mentiste en casi la mitad — Frunció el ceño.
—De hecho no — Carcajeé. — En cambio tú, eres un fumador compulsivo, negativo y arrogante. Tú color favorito o es el negro, el blanco o el gris y estoy casi segura de que tus gustos musicales estan entre el punk y el metal.
—No había pensado en mi color favorito — Entrecerró los ojos — Pero creo que es el gris. Y con lo de mis gustos musicales fallaste completamente. Me gusta el R&B y el rap, no lo sé — se encogió de hombros.
El timbre sonó indicando que la hora había llegado a su fin. Recogí mis cosas y me puse de pie.
—¿Cuándo terminaremos? — Se encogió de hombros. — ¿Te cuesta tanto decir un puto día y listo?
— mañana espués de clases yo te llevare a mi lugar favorito y tú al tuyo — Indicó.
—Esta bien, te veo después.
Me despedí y caminé hacia donde Cassidy que se encontraba dándome miradas coquetas por haberme visto conversando con Justin.
n/a: jade en la multimedia(:
5+ comentarios para continuarla.
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vicios. ➸ bieber.
FanfictionLa vida de Justin Bieber estaba llena de vicios, hasta que Jade Harries llega a poner orden en ella convirtiendose en su único vicio.