El Playboy #1 》JJK

Capitulo 03|Nervios

Trate de evitarlo el resto del dia despues de la clase de ingles.
Estaba ansiosa de llegar a casa, pero luego me di cuenta, que tendria que hacer frente a Jungkook de una forma u otra, por lo que decidi tomar el camino largo a casa. Mis padres se irian aproximadamente dentro de una hora, y eso significa solo una cosa: en una hora Jungkook estaria en mi casa, como mi niñero.

De: Mama.

¿Donde estas, Hari? nos vamos
pronto.

Lei el mensaje de mi madre que acababa de recibir. Suspire. Mi madre era ese tipo de madre que estaba obsesionada con el tiempo.

Para: Mama.

Ya casi estoy alli, calmate. Y por cierto, todavia no se por que necesito un niñero. Estoy en mi ultimo año, tengo casi dieciocho años, no necesito un niñero. - Hari.

Cuando entre en casa, vi a mis padres dando vueltas por la sala de estar cogiendo las cosas que necesitaban.

- Ya estoy aqui. - Dije, pero no recibi ni un hola de su parte, lo unico que recibi fueron un par de espaldas.

Entonces sono el timbre.

Me tense por un segundo, trate de relajarme. No queria que mis padres pensaran que era una paraonica o algo por el estilo, lo unico que odiaba era que alguien pensase que estaba exagerando.

- ¡Hari! - Me grito mi madre desde la cocina, me gire. - ¿Puedes abrir la puerta? Estoy un poco ocupada. Se amable. Seguramente es tu niñero. - Me imagine que mi madre no leyo mi mensaje de texto, porque seguramente me habria comentado algo como "debes aceptarlo, nosotros solo queremos lo mejor para ti".

- Lo que tu digas... - Murmure entre dientes, caminando hacia la puerta principal. Ya que era una puerta de cristal, se podia asumir a la perfeccion que era la figura de un chico alto, vestido con pantalones ajustados y una camiseta que debia verse bastante bien en el, y realmente no necesitaba abrir la puerta para ver quien era. Cuando abri la puerta, lo mire:

- Jungkook.
El sonrio, y ahora que me daba cuenta, me veia pequeña junto a el, parecia que el podia romper mis huesos con facilidad.

- Hari. - Contesto.

- Adelante. - Invite, fingiendo que era bienvenido en cualquier momento. Obviamente, no confiaba en el, en absoluto. ¿Por que iba ser digno de confianza? Era un Playboy. Un dia te dice que te quiere y al dia siguiente esta con otra chica y no vuelve a hablar contigo. Y si eres lo suficientemente guapa, te buscaria dos veces.

Ambos empezamos a caminar hacia la sala de estar, y alli estaban esperandonos mis padres, una vez que nos vieron, mi madre se acerco con una sonrisa deslumbrante.

- Hari, este es tu niñero, Jungkook. - Nos presento. - ¿Ya se conocian?

Los dos nos miramos durante un segundo.

- No. - Respondimos al unisono.

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Cuando mis padres se fueron, no tuve ninguna sensacion de falta, ya que estaba acostumbrada a que me dejaran sola.

Jungkook habia dicho que tenia que ir a recoger algunas cosas a su casa, ya que como era de esperar, habia llegado tarde para conocer a mis padres y no tuvo tiempo de coger sus cosas.

De: Sunhe.

Oi que Taehyung va a ir a una fiesta el sabado. No se quien va ser la fiesta, pero debemos ir. Dice que todo el mundo puede ir, y yo se que querras ir por tu ya sabes quien:)

Inmediatamente me sonroje. Kim Taehyung. Habia tenido un flechazo con el desde el primer momento en que lo vi. Era completamente guapo, con sus impresionantes ojos marrones que aveces los veia verdes y con su cabello castaño claro. Tenia lo que solia tener una sonrisa de un chico sexi. De hecho era uno. Siempre fui timida para hablar con el. El no era un Playboy, pero era uno de los chicos mas populares.

Asi que, en realidad, las probabilidades de gustarle eran pocas.

Para: Sunhe.

Duh, obviamente iremos. No perdere la oportunidad... No tengo por que gustarle, solo con mirarlo es suficiente para mi. -Hari

- ¿Con quien hablas? - Oi una voz profunda detras de mi, salte, dandome un susto de muerte.

- Con nadie. - Le respondi, rapidamente con ganas de cambiar de tema .

Cuando el sonrio, me pillo con la guardia baja y rapidamente me quito el telefono, y comenzo a leer los mensajes entre Sunhe y yo.

Abri los ojos con horror puro, y como auto-reflejo, trate de quitarle el telefono antes de que pudiera leer el ultimo mensaje.

Tonta por pensar que eso
funcionaria.

En vez de conseguir el telefono, Jungkook rodeo mi cabeza con un brazo. Desde mi punto de vista, vi un colgante colgar de su cuello. Podia sentir su calido aliento sobre mi oreja, y mi corazon no podia dejar de latir con rapidez.

- ¿Que intentas hacer, Yerim? - Pregunto con voz baja, esa voz con la que todas las chicas parecian caer rendidas a sus pies. Me fije en que utilizo mi apellido en vez de mi nombre, uno de sus pequeños trucos seguramente.

Solo queria salir de su agarre, pero el hablo.

- Siento que estos ocho meses van a ser geniales.

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Nos leemos pronto7w7...