Capítulo XVII

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Camus desayunaba aparentemente tranquilo pero a leguas se notaba que estaba herido, claro que Saga se dio cuenta de esto.

-Camus..., ¿Estás bien?.

-No..., sabes, anoche pensé que las cosas con Milo finalmente tendrían solución, pero esta mañana me dí cuenta de que solo fueron ilusiones mías.

Saga contemplaba el semblante decaído de Camus, no pudo evitar rodearlo en un cálido abrazo para intentar reconfortarlo, estaba funcionando a decir verdad, de no ser por la molesta interrupción del ser mas despreciable sobre la faz de la tierra.

-Pero que lindos, veo que no tardaste demasiado en encontrar consuelo en otros brazos querido.

-¡Largate de aquí!.

-Tranquilo jajaja, a decir verdad me alegra que lo hicieras ya que Milo y yo finalmente seremos padres, alguien tenía que consolarte.

Camus estaba a punto de llorar por la noticia, a decir verdad si se esperaba esa noticia tarde o temprano pero ahora, justo después de la noche que pasó con Milo, bueno no hay palabras para  describir el dolor que sentía.

-Me alegro mucho por ustedes, ahora que Milo tiene lo que quería no veo la necesidad de permanecer en esta casa.

Saga lo miró sorprendido, ¿estaba diciendo que se marcharía?, debía estar bromeando, sabía por la mirada de Milo esta mañana que había encontrado la felicidad en Camus y si éste se marchaba seguro le rompería el alma.

-Es bueno saber que trato con una persona razonable, sabía que tú no permitirías que un ser inocente sufra.

-No, no lo permitiré, espero que hagan una hermosa familia, ahora mismo empacaré mis cosas para regresar a casa de mi padre.

-Adiós.

Pasó a un lado de la arpía quien al escuchar la puerta cerrarse no pudo evitar doblarse de risa, todo visto por Mu, Afrodita y Death con un gesto de desaprobación, no perdieron el tiempo y se apresuraron a dirigirse a la habitación de Camus.

Llamaron a la puerta y al no recibir respuesta entraron sin más, encontrándose a Camus caminando desesperado guardando sus pertenencias mientras gruesas lágrimas escurrían por sus mejillas.

-Camus por favor, no le des gusto a esa víbora.

Saga intentaba desesperadamente evitar que se marchara, por que sabía que para él y Milo lo mejor era permanecer juntos.

-No Saga, ellos ahora serán una familia y yo no planeo ser quien le niegue esa dicha a ese bebé inocente.

-¿Qué tal que no es de Milo? - comentó Death siendo apoyado por los otros tres.

-¿Cómo se te ocurre? he visto el cariño que Mariam le tiene a Milo, sería incapaz de hacerle eso.

-Camus, a veces pienso que eres el ser más inocente sobre la tierra - dijo Afrodita mientras se acercaba a él y lo abrazaba por los hombros - Cariño... ¡A KILÓMETROS SE LE VE LO ZORRA QUE ES!.

-Afro, no grites - lo calmó Mu - pero tiene razón Camie, ella no es precisamente la persona más casta del mundo, a decir verdad yo mismo la he visto varias veces acompañada de Alex él chofer que con trató Milo y no se comportaban como amigos precisamente, no me extrañaría que esos dos tuvieran algo que ver.

-No podemos aferrarnos a simples suposiciones Mu, lo que ahora es seguro es que Milo va a ser papá y eso da a entender que yo ya no tengo nada que hacer aquí - cierra sus valijas y se dirige a Death - ¿podrías llevarme a casa de mi padre?.

-Sabes que siempre estaré para ayudarte en lo que se te ofrezca, aún cuando no estés aquí sabes que siempre podrás contar con nosotros - se puso de pie y le dio un fuerte abrazo, raro en él pero se había encariñado demasiado con el corazón bondadoso del muchacho y a pesar de todo le molestaba verlo tan dolido.

Recuerdos del corazón (Milo X Camus) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora