1.52 (Maratón 4/...)

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____ POV

(...)

Ya estaba anocheciendo y mi madre aún no llegaba, solo espero que no se haya topado con Rubén en el camino, que fastidio.

Escuché como se abría la puerta, era mi madre, traía unas bolsas, fui hasta ella para ayudarla y ponerlas en la cocina.

-Gracias mamá- le dije poniendo las bolsas sobre la mesa

- No es nada mi niña- me sonrió- Tuviste suerte, encontré todo lo que me pediste-

- Asombroso- saqué las cosas y lo primero que tomé fue el tinte- ¿Me ayudas?-

- Pensé que lo ibas a ocupar para otra cosa-

- Oh, cierto, para pintar a mi perro- suspiré- Lo siento mamá-

- Tranquila mi niña, fue un comentario tonto- jaló una silla- Vamos a ponerte bella-

Me senté y mi madre preparó el tinte, empezó a aplicarlo a mi cabello castaño, mientras lo hacía, me platicaba de lo que hablaron con la terapeuta, esa mujer hizo algo bueno por ellos, me devolvió a mis padres, los que alguna vez perdí.

Terminó de aplicarlo, se quitó los guantes y me dijo que debo esperar 20 minutos, después podía bañarme.

-Gracias-

- No hay de que mi niña- sacó las demás cosas, su rostro se veía prrocupado

- ¿Te preocupa que vaya a hacer algo de lo que después me arrepienta?-

- Si- susurró- Pero no me voy a entrometer- volteó a verme- Yo no controlo tu vida, esto es tu decisión y si así lo quieres, así va a ser-

No dije nada, solo la abracé, su apoyo es lo único que tengo ahora, ella respondió a mi abrazo, se que está preocupada, pero ella sabe mis razones y las comprende, su celular comenzó a sonar y se separó de mi.

-Debe ser tu padre- contestó- ¿Qué pasa querido? Si, estoy con ella… Oh, claro… Si, yo le digo… Bueno, espero tu llamada- colgó

- ¿Si era él?-

- Si, se va a quedar unos minutos más en su trabajo, que por el momento me quedara contigo hasta que el salga-

- Está bien- le sonreí- ¿Cuánto tiempo ha pasado…-

- Como cinco minutos, no seas impaciente hija-

- Lo siento-reí- Bueno, iré a arreglar mi habitación, ayer hice un desastre- rasqué mi nuca nerviosa

- Yo lo hago, no quiero que tus cosas terminen rojas como tu cabeza- empezó a reír y fue a mi habitación- ¡¿Qué sucedió acá dentro?!-

- Es un poco larga la historia- le dije desde el living- Ten cuidado con los pedazos de espejo-

No escuché respuesta de mi mamá, más que la puerta cerrándose, bueno, dejaré que haga magia en mi habitación, fui de nuevo a la cocina y vi todo lo que compró.

Tomé el bidón de gasolina y lo llevé a mi auto, regresé a la cocina, tomé mi encendedor y la pintura en aerosol y de vuelta a mi auto, los dejé ahí, para que no se me olviden.

(...)

Mi madre terminó de arreglar mi habitación y yo me metí a bañarme, ya que el tiempo de espera terminó, salí y empecé a vestirme, completamente de negro, busqué mis guantes negros igual, y los guardé en mi chaqueta, bajé a donde estaba mi mamá, vaya, está haciendo la cena.

•Mi Chica Rebelde•  (Rubius y tú) [PAUSADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora