El Reflejo De Tu Alma

Tú y yo

Neji nunca había tardado tanto en pensar en una solución, cuando recibía su entrenamiento para convertirse en cazador rápidamente había recibido halagos de sus superiores sobre las reacciones rápidas y soluciones inmediatas para los problemas que se le presentara.

El día en que por fin alcanzó su objetivo después de cinco años puliendo sus habilidades había tomado decisiones rápidas que lo habían llevado a conseguir atrapar aquel lobo de pelaje castaño que corría a una velocidad impresionante.

Observó su mano por inercia después de ver el cuerpo inconsciente de la chica.

Ya no había contrato entre ellos.

Él sabía que se había desvanecido al reconocer a su prima minutos atrás.
Supo que el riesgo que tomaría sería por decisión propia.

Frunció el ceño y formó un puño con su mano maldiciendo mentalmente aquella situación.

Maldiciendose a sí mismo al abrir aquella puerta y poner en riesgo lo que él creía que era su prioridad, a su prima.

—Los humanos son tan predecibles como sus expresiones— el zorro de nueve colas frente a él dejó de tomar el rostro inconsciente de Tenten para dejar caer todo su cuerpo a sus pies— si te lo preguntas o no, sé exactamente que estás pensando en este momento— le miró con algo de aburrimiento sin borrar su sonrisa— en realidad piensas en muchas cosas a la vez, permíteme organizar tus ideas, la respuesta es si, el contrato entre ustedes se acabó pero parece que aún sin darte cuenta la vida de ésta loba que utilizaste todo este tiempo se volvió valiosa para ti— borró su sonrisa y lo miró con odio— apuesto a que quizás no te imaginaste que ella sentiría lo mismo al grado de querer atacarme cuando recuperó su verdadera fuerza y detenerme de llegar a ustedes cuando se dio cuenta de lo que haría cuando los encontrara...fue demasiado tarde cuando lo intentó, logré encontrarlos... pero no lo consideraste por eso estás sorprendido, ustedes los humanos son tan egoistas no merecen ni el más mínimo de nuestros pensamientos.

La mirada severa del chico se dirigió por detrás de Neji hacía Hinata, ésta tembló al instante, negó con la cabeza y dejó de hacer contacto visual para mirar a su primo.

— Neji-niisan tenemos que irnos— le mencionó alarmada— es una trampa, es sólo una ilusión hecha por magia, ella estará bien, tenemos que irnos ahora.

La risa del zorro hizo que ambos le prestarán atención de nuevo.

—Es increíble— dijo entre risas su expresión cambio de nuevo a una con furia— ¿No te cansas de engañar para tu propio beneficio?, incluso a los de tu misma especie... tu voz engaña a quién la escucha, yo haré que te calles por siempre por el bien de todos.

Levantó su mano y aunque estaba cubierta con un guante negro con franjas rojas hasta la mitad del codo sus dedos estaban libres, sacó las garras y se arrodilló colocando su dado índice en el cuello de Tenten, dibujó la línea con su garra y la sangre brotó de inmediato.

Hinata dio un salto sorprendida y asustada al ver que no era una simple ilusión.

Neji apretó los dientes y frunció el ceño al ver la sangre de Tenten cayendo al suelo.

—¿Ves?, las mentiras salen de tu sucia boca como el respirar— de inmediato se levantó y golpeó hacía adelante con la misma garra, Neji reconoció el sonido que los había hecho salir las garras habían quedado grabadas por unos segundos en una superficie invisible que rodeaba la casa donde estaban, impidiéndole al zorro avanzar hacía ellos— mi hermano fue tan ingenuo al protegerte de esta manera pensando en que así se ganaría tu amor, ¿Y como le pagaste?, tu sangre está en tus manos.