El Reflejo De Tu Alma

La sobrevivencia del más fuerte

Tenten escuchó las ovaciones de los humanos al ver a Neji llegar con el conejo negro para entregárselo al rey, ella también salió del bosque observando que Sasori se acercaba a ella, en su mirada inexpresiva Tenten solo encontró descontento.

-Lo siento -se aproximó a decir la chica- tuvo más suerte que yo.

-Bueno es lo malo de algo tan casual como la suerte, no todos la tenemos -le dio la espalda y antes de caminar se volteo ligeramente y le extendió la mano para que Tenten la tomara- sin importar los pequeños errores el espectáculo siempre debe continuar.

Tenten tomó su mano y se dio cuenta de lo suave y delicada que era su piel y a la vez tan fría, casi perfecta el efecto de muchos años tomando sangre de los suyos que curaba cualquier herida fuera y dentro de su cuerpo.

No pudo evitar temblar mientras el sujetaba su mano y con una mirada de Sasori, ella supo que se había dado cuenta y después una pequeña sonrisa y cerró los ojos mientras caminaba.

-No hagas nada estúpido -dijo lo bastante bajo para que ella escuchara, apretó su mano contra la de ella con algo que fuerza- para ser honesto, disfruto de tu compañía no me obligues a convertirme en el monstruo que crees que soy y arruinarlo toda esta perfección.

Tenten no respondió, poco después notó de entregar al conejo Neji ya no se encontraba entre los demás humanos, cuando giro en dirección a la prima menor de Neji esta le sonrió y guiñó el ojo, Tenten no correspondió al tener tan cerca a Sasori y que este se diera cuenta pero por dentro sonrió y supo que Neji cumpliría con todo y rescataría a Sasuke.

Le costó algo de trabajo entrar sin ser visto, pero al parecer los sirvientes de la mansión estaban demasiado ocupados limpiando diferentes partes de la casa como para ponerle atención al cazador que se escondía en las sombras.

Tenía tiempo, el sufiente como para observar con cuidado quién estaba a cargo de todos los demás sirvientes, identificó rápidamente a la chica rubia a cargo mientras ordenaba la limpieza del suelo de la estancia principial comentando que debian apresurarse ya que a Sasori no parecía agradarle verlos limpiar.

Espero a que la chica saliera de ahí y la siguió a través del pasillo principal que guiaba a la salón y la enorme cocina, Neji se movió de manera rápida y sigilosa, tal y como un cazador asechaba, tapó la boca de la chica mientras la empujó hacia la sombra más cercana, detrás de los muebles del salón, unos sirvientes pasaron justo detrás de ellos sin verlos, Neji mantenía el cuchillo en el cuello de la chica y su mano cubriendo su boca evitando que los gemidos se convirtieran en palabras articuladas.

-Si gritas te cortaré la garganta -Neji entrecerró los ojos seriamente- no quiero que nadie salga herido así que llévame al sótano dónde tienen al lobo.

Ella negó con la cabeza de inmediato, frunciendo el ceño hacia él con sus ojos azules.

Neji enterró ligeramente el cuchillo, cuando la chica se quejó lo suficiente lo retiró.

-Llévame ahora y te dejaré ir, si no lo haces simplemente tomaré de rehén a otro sirviente hasta que uno lo haga- la amenazó en voz baja, ella desvío la mirada por unos segundos y después asintió, Neji retiró la mano de su boca pero no el cuchillo.

-Si te lo digo y escapa... él me lo hará pagar... -Ino bajó la mirada con preocupación y luego la subió decidida- ayúdame a escapar también, tienes que hacer que ese lobo me lleve con él lejos de aquí.

-Este lobo en particular no es alguien que disfrute la compañía de humanos en lo más mínimo -sonrio con un ligero sarcasmo- tendrás suerte que cuando lo liberemos no arremeta contra nosotros por simple capricho.